viernes, 25 de septiembre de 2009

EL REFUGIO BUDISTA


El Refugio Budista
Sangharákshita

*
Este texto es la transcripción de una
conferencia dada en la India.
El tema de esta conferencia es el Ir al Refugio (En pali: saranagamana, y en sánscrito:
sarana-gamana), y me alegra mucho que se me haya invitado a hablar sobre ello,
puesto que se trata de algo muy querido para mí. Sin embargo voy a enfocarlo de
manera indirecta, a través de mi experiencia recogida viviendo y trabajando para el
budismo en Gran Bretaña. Desde 1967 he dedicado mi tiempo y energía a la creación
y consolidación de un movimiento budista completamente nuevo en occidente, que
empezó en Gran Bretaña, y es a través de mi experiencia dentro de este nuevo
movimiento como voy a abordar el tema de la toma de refugio.
En los centros budistas de las distintas ciudades -este nuevo movimiento se conoce
como los "Amigos de la Orden Budista Occidental"- se llevan a cabo una variada serie
de actividades como pueden ser conferencias sobre budismo, sobre literatura o arte,
clases de meditación, clases de hatha yoga, o cursos sobre la comunicación humana.
Cada cierto tiempo tienen lugar retiros, que llevan consigo pasar el día entero en el
centro budista haciendo meditación, estudiando, intercambiando opiniones o haciendo
ejercicios de comunicación.
La gente llega a conocer nuestras actividades por diversos medios. Unos, a través de
nuestra publicidad, pero lo más frecuente es que un amigo le comente a otro que
conoce un sitio donde se practica meditación, o donde se puede aprender algo sobre
budismo, o practicar hatha yoga; de una manera u otra, la gente entra en contacto con
el centro más cercano y, por lo tanto, con nuestro nuevo movimiento budista.
Al principio, puede que estén simplemente interesados en la meditación, o en la
filosofía budista, o en el hatha yoga, y vienen a nosotros sólo por esto. De cualquier
modo, empiezan a venir. En la mayor parte de los países occidentales hay miles de
personas que se dedican a “probar” todo tipo de grupos espirituales. Se interesan por
uno de ellos durante un tiempo, luego prueban otro y otro y otro, con lo que acaban
probando gran número de ellos. Algunas de las personas que vienen a cualquiera de
los centros son de este tipo. Se quedan durante un tiempo, y después nos dejan para
continuar su búsqueda en otra parte; pero otros, permanecen con nosotros porque les
gusta nuestra manera de ver las cosas y se sienten como en casa. Se van interesando
cada vez más por nuestras actividades, y un día surge en ellos la idea de que les
gustaría sentirse identificados con nosotros, en otras palabras, "pertenecer" al grupo. A
partir de ese momento pueden llegar a convertirse en lo que llamamos Mitra, que es
simplemente la palabra sánscrita que equivale a amigo. Aquí quizás debería aclarar
que uno no se hace socio de los "Amigos de la Orden Budista Occidental". Uno no se
inscribe simplemente rellenando una ficha o pagando una suscripción. En vez de esto
se emplea un sistema diferente que voy a explicar a continuación. Cuando una
persona alcanza el momento en el que quiere "pertenecer" a los "Amigos de la Orden
Budista Occidental" y convertirse en Mitra, comunica a los demás su deseo, si éste es
auténtico y demuestra un interés real por las diversas actividades de los "Amigos de la
Orden Budista Occidental", tiene lugar entonces una sencilla ceremonia pública en la
cual esa persona ofrece flores, una vela encendida y un palito de incienso ante una
imagen del Buda. De esta forma uno se convierte en Mitra. Hasta entonces esa
persona había sido considerada como un Amigo con mayúsculas. Nosotros tenemos
estas categorías, como si dijéramos, para los "no-miembros". Todo aquel que venga a
participar en cualquiera de las diversas actividades, por pequeña que sea esta
participación, es considerado como Amigo. No tiene que "pertenecer" de una manera
burocrática, y se tiene completa libertad para obtener beneficio de cualquier tipo de las
diversas actividades, sin que eso implique ningún tipo de obligación o responsabilidad
determinadas. A nosotros, nos alegra mucho que sea así. Ahora bien, si esa persona
quiere profundizar a partir de ese primer contacto, entonces se convierte en Mitra de la
forma que he explicado antes.
El hecho de que una persona se convierta en Mitra significa que ha cesado su
búsqueda para pertenecer a un grupo espiritual, y a partir de ese momento todo su
tiempo y energía se enfocará exclusivamente hacia los "Amigos de la Orden Budista
Occidental". De un Mitra se espera: 1. Que dé por terminada su búsqueda de un
movimiento espiritual y que se haya decidido por la Orden; 2. Que mantenga una
práctica de meditación diaria; 3. Que se mantenga en contacto con los miembros de la
Orden que dirigen las actividades del centro y que desarrolle, "Kalyana Mitrata" o
"compañerismo espiritual" con ellos; y 4. Que ayude al centro y al movimiento en
general de la forma práctica que crea más conveniente.
Por tanto, existen Amigos, Mitras y también Miembros de la Orden, o Dharmacharis y
Dharmacharinis, sobre los cuales explicaré algo más, dentro de un momento.
Una vez siendo Mitra, lo más probable es que uno se vea progresivamente más
envuelto en el movimiento y más atraído por la belleza del ideal espiritual budista, el
ideal de la iluminación humana. Puede que encuentre que su experiencia en la
meditación se hace más profunda, que su comunicación con otras personas se
expande y que sus condicionamientos psicológicos están desapareciendo. Finalmente
uno puede descubrir que el centro de gravedad de su existencia se ha visto
desplazado ligeramente, y que ahora quiere dejar a un lado sus antiguos intereses y
actividades y comprometerse completamente con el budismo, con el Dharma, con la
vida espiritual en suma. Llegado este momento, uno empieza a pensar seriamente en
entrar a formar parte de la Orden o, usando términos tradicionales, uno piensa en
tomar refugio en el Buda, en el Dharma y en la Sangha. Si los miembros de la orden
están convencidos de que el deseo del aspirante es auténtico, y de que esa persona
está realmente capacitada para tomar refugio -que no es tarea fácil de llevar a cabo-,
entonces, su "solicitud" es aceptada y a su debido tiempo tiene lugar la maravillosa
ceremonia de ordenación. Uno se convierte en Dharmachari o Dharmacharini, o lo que
es lo mismo, alguien que toma refugio en el Buda, en el Dharma y en la Sangha, y
quien, además, empieza a considerar los "Diez Silas" o preceptos morales, mediante
los cuales, el cuerpo, el habla y la mente se ven progresiva y sistemáticamente
purificados.
Llegados a este punto, puede que os estéis preguntando dónde se encuentra el origen
de este “Ir al Refugio", y por qué parece representar la culminación del compromiso no
sólo con nuestro nuevo movimiento budista, sino incluso con el budismo como tal.
Después de todo, uno se convierte primero en Amigo, luego en Mitra y finalmente en
Dharmachari o Dharmacharini, como acabo de explicar. La tradición de "tomar refugio"
es, sin embargo, muy antigua. Para poder comprender dónde se origina y por qué tiene
una importancia tan tremenda deberemos remontarnos muy atrás en el tiempo, hasta
la época en que vivió el Buda, cuando acontecieron unos determinados sucesos.
Después de haber alcanzado la iluminación, el Buda dedicó gran parte de su tiempo a
viajar de un lugar a otro dando a conocer el Dharma o verdad que había descubierto y
el camino que llevaba a ese conocimiento. Mucho de lo que dijo se conserva en las
escrituras en pali, pero aunque a veces nos encontremos con lo que muy bien podrían
ser las auténticas palabras del Buda, quizás no seamos capaces de apreciar el efecto
tan poderoso que tendrían en las personas que en aquél entonces las escucharon de
labios del Iluminado.
Lo que normalmente encontramos en los textos es que en el curso de su deambular, el
Buda se encuentra con una persona determinada, bien sea un rico brahmin, un
humilde vagabundo o un joven príncipe, y los dos comienzan a hablar. Cuando la
conversación se hace más profunda, el Buda empieza a hablar desde lo profundo de
su experiencia espiritual. En otras palabras, el Buda expone el Dharma: el dharma sale
a la luz.
A veces, cuando leemos las escrituras budistas nos da la impresión de que el Dharma
consiste en una serie de listas, las cinco de esto, las seis de lo otro, etc., así como de
que estamos ante algo excesivamente esquematizado y cuadriculado. Pero desde
luego, no era así al principio, ni mucho menos. Era algo fresco, original y creativo. El
Buda hablaba desde lo profundo de su experiencia mística. Exponía la verdad y
mostraba el camino que lleva a la iluminación y la persona con la que estaba hablando
se sentía absolutamente asombrada y admirada. En algunos casos puede que esa
persona fuera incapaz de hablar o de hacer otra cosa que no fuera balbucear unas
palabras carentes de toda coherencia. Algo le había sido revelado. Una puerta se
había abierto de pronto, más allá de su comprensión ordinaria. Por un instante, al
menos, había vislumbrado la verdad y esta experiencia le había dejado anonadado. A
veces, en ocasiones como éstas, las escrituras nos dicen que la persona al respecto
exclamaba: "Maravilloso, señor, maravilloso". Como sí uno tuviera que empezar de
nuevo lo que ha sido derribado, o revelar lo que ha estado oculto, o indicar el camino a
alguien que estaba perdido, o llevar una luz en la oscuridad y decir: "Aquellos que
tengan ojos verán". De este modo ha sido manifestada la verdad en boca del más
excelso. Entonces, desde la profundidad de su gratitud esta persona declararía
fervientemente: "Buddham saranam gacchami", "Dhammam saranam gacchami",
"Sangham saranam gacchami" - "Voy por refugio al Buda al Dharma y a la Sangha".
Ahora podemos entender no sólo donde tiene su origen el "tomar refugio", sino
también algo de su tremendo significado espiritual. Tomar refugio representa la
reacción emocional positiva -de hecho una reacción y respuesta totales- al ideal
espiritual, cuando este ideal es revelado a nuestra visión espiritual. Es tal la fuerza de
la llamada, que no queda más remedio que responder a ella de manera total y
absoluta. Como muy bien afirma Tennyson: "No nos queda más remedio que amar lo
supremo cuando lo vemos". Ir al Refugio es quizás algo así. Hemos visto lo "supremo",
nos ha sido revelado, por lo tanto no tenemos más remedio que amarlo, que darnos a
ello por entero, que comprometernos con ello. Ese compromiso nuestro con lo
"supremo" es tomar refugio. La finalidad de tomar refugio es triple, lo que se conoce
como las tres piedras preciosas o las tres joyas. Uno toma refugio en el Buda, el
Dharma y la Sangha. El significado de tomar refugio puede entenderse con facilidad en
un sentido general -darse o comprometerse uno por entero a lo "supremo"- pero, ¿qué
significa tomar refugio en el Buda específicamente o en el Dharma, o en la Sangha?
El Buda es un ser humano que alcanzó la iluminación. No es Dios, ni un mensajero
suyo, sino un ser humano que gracias a su propio esfuerzo alcanzó la cumbre de la
perfección humana. Consiguió llegar a un estado inefable al que llamamos iluminación,
nirvana o estado de Buda. No solamente es un Buda, sino un Samyak Sambuddha,
completa y perfectamente iluminado. Cuando tomamos refugio en el Buda, lo hacemos
en este sentido. No se trata sólo de que le admiremos a distancia. Le admiramos en
gran medida y, de hecho, puede que esté muy distante de nosotros en este momento,
pero por grande que sea la distancia entre el Buda y nosotros, esa distancia puede
acortarse hasta desaparecer.
Podemos hacer que desaparezca si seguimos el camino y practicamos el Dharma.
También nosotros podemos parecernos al Buda. También nosotros podremos alcanzar
la iluminación. Este es el gran mensaje del budismo. Todo ser humano que se
esfuerce en ello, que siga el "Noble Camino Octuple" hacia la iluminación, puede llegar
a ser lo que fue el Buda. Por lo tanto, cuando tomamos refugio en el Buda es como si
dijéramos: "Eso es lo que yo quiero llegar a ser. Eso es lo que yo quiero alcanzar.
Quiero llegar a la iluminación y desarrollar la sabiduría y la compasión al máximo".
Tomar refugio en el Buda significa considerar al Buda -al estado de Buda- como
nuestro ideal espiritual personal, o como algo que nosotros mismos también podemos
conseguir.
El Dharma es el sendero o camino. Es el sendero de lo que a veces he denominado la
evolución superior del hombre, un estadio de desarrollo puramente espiritual más allá
de la normal evolución biológica. Como tal camino o sendero, existen diferentes
formulaciones del Dharma. Decimos "el camino triple" de la moralidad (sila), la
meditación (samadi), y la sabiduría (prajna); así como el camino de las "seis
perfecciones" (paramitas), que son la generosidad (dana), la moralidad (sila), la
paciencia y el dominio sobre uno mismo (ksanti), el vigor (virya), la consciencia superior
(samadi) y la sabiduría (prajna), que es el camino del bodisatva. Aunque hay muy
diversas formulaciones, el principio básico del camino es sólo uno. El camino es
esencialmente el camino de la evolución superior; es todo aquello que nos ayuda a
evolucionar. El Dharma o el camino no debe ser identificado con una u otra enseñanza
concreta. De acuerdo con la propia declaración expresa del Buda, Dharma es todo
aquello que contribuya al desarrollo espiritual del individuo. Cuando su tía materna y
madre adoptiva Mahaprajapati - la Gotamid - le preguntó por un criterio por el cual
pudiera distinguir entre lo que era Dharma-vinaya y lo que no lo era, el Buda contestó:
"De cualquier doctrina, Gotamid, de la que puedas afirmar con seguridad que: 'Estas
enseñanzas conducen a la pasión y no a su disipación; a la esclavitud y no a la
imparcialidad; al incremento de beneficios en el mundo ordinario, y no a su
disminución; a la codicia y no a la sencillez; al descontento y no al contento; a la
compañia y no a la soledad; a la pereza, y no a la energía; al deleite en la rnaldad y no
en la bondad'. De tales enseñanzas deberías ciertamente afirmar Gotamid: 'Esto no es
el dharma, esto no es el vinaya, esto no es el mensaje del maestro'. Pero de aquellas
enseñanzas de las que puedas con certeza afirmar que son lo opuesto a lo que acabo
de decir; podrás ciertamente afirmar 'esto sí es el Dharma, esto es el vinaya, este es el
mensaje del maestro’".
Cuando tomamos refugio en el Dharma nos comprometemos a seguir el camino de la
evolución superior. Nos comprometemos con todo lo que nos ayude a desarrollarnos
espiritualmente, a crecer hasta el estado del Buda.
Sangha quiere decir "comunidad espiritual". En primer lugar representa la comunidad
de todos aquellos seres más avanzados que nosotros: los grandes bodisatvas, los
arhats, los que han entrado en la corriente, etc. Todos ellos forman la aryasangha o
comunidad espiritual en su sentido más elevado. En otro sentido, significa la
comunidad de todos los budistas, es decir, de todos aquellos que toman refugio en el
Buda, en el Dharma y en la Sangha. Tomar refugio en la aryaSangha implica abrirnos
a la influencia espiritual de los seres excelsos que la forman, aprender de ellos,
sentirse inspirado por ellos, reverenciarlos.
Tomar refugio en la Sangha en su sentido más común, como comunidad de todos los
budistas, implica disfrutar de una mutua camaradería espiritual, ayudarse unos a otros
en el camino de la evolución. A veces, puede que no necesites un gran bodisatva
avanzado para ayudarte. Todo lo que necesitas es un ser humano corriente que esté
un poco más evolucionado espiritualmente que tú, o incluso que sea un poco más
sensato. Con demasiada frecuencia la gente va en busca de un gran gurú muy
evolucionado, pero eso no es lo que realmente necesitan, incluso aunque esa persona
sea accesible. Lo que necesitan es una ayuda donde ellos están en un momento
determinado, es decir, en el estadio concreto del camino en el que se encuentran, y
esa ayuda puede generalmente darla una persona budista cualquiera.
Así pues, esto es concretamente lo que significa tomar refugio en el Buda, el Dharma y
la Sangha, y es esta triple toma de refugio -de la forma en que lo he explicado- lo que
convierte a uno en budista. Pero una vez dicho esto, tengo que añadir que, muy a
pesar mío, el tomar refugio, a pesar de su crucial importancia, está poco considerado
en los países budistas asiáticos, sobre los cuales diré algo enseguida. Dentro de los
"Amigos de la Orden Budista Occidental" hacemos hincapié en la importancia que tiene
el tornar refugio, estamos intentando volver a como las cosas eran en la época del
Buda. Estamos tratando de restablecer el significado que el tomar refugio tenía en un
primer momento.
Volviendo de nuevo a la época en que vivió el Buda, encontrarnos que algo de la
mayor importancia, aparte de lo ya mencionado, ocurría. No sólo se daba el caso de
que alguien, se sintiera tan impresionado y estremecido ante la exposición de la verdad
por parte del Buda que decidiera tomar refugio, sino que mientras le escuchaba podía
surgir en su mente una auténtica penetración en esa verdad. Según el lenguaje de las
escrituras budistas, en esa persona, surgiría pura y transparente ya, la visión de la
verdad (dharma-caksus) -una profunda experiencia espiritual-, Esta visión de la verdad
es una de las cinco visiones que se conocen en la tradición budista. En primer lugar
está "la visión física" (mamsa-caksus), que es la visión con la que ahora les estoy
mirando y viceversa. Se trata del órgano físico de la visión, gracias al cual percibimos
los objetos materiales. En segundo lugar se encuentra "la visión divina" (divya-caksus).
Si fuerais capaces de ver lo que pasa al otro extremo de la ciudad o en otra más
lejana, o incluso en la India, estaríais haciendo uso de este tipo de visión. Se la conoce
como la facultad de la clarividencia y es uno de los poderes paranormales que pueden
surgir de manera espontánea durante la práctica de la meditación. En tercer lugar se
encuentra "la visión de la verdad" (dharma-caksus), la visión espiritual interior, con la
cual se "ve" la verdad de las cosas y más adelante volveré sobre ella. En cuarto lugar
se encuentra "la visión de la sabiduría" (prajna-caksus), que va incluso más allá que la
visión de la verdad y que surge solamente cuando uno se convierte en un arhat. En
quinto y último lugar se encuentra "la visión universal" (samanta-caksus) también
conocida como "la visión del Buda", que surge sólo cuando uno ha llegado a la
iluminación completa, cuando la visión espiritual es total y absoluta.
Analicemos ahora más atentamente la visión de la verdad, la visión del Dharma. Existe
una frase en las escrituras budistas que nos da una explicación resumida. Dice
simplemente que todo lo que surge -lo que aparece en la existencia - debe
desaparecer. Esto es tan sencillo y evidente que quizás podáis pensar que ya lo
sabíais; pero, la visión de la verdad no representa un conocimiento teórico acerca del
hecho de la impermanencia o transitoriedad universales, sino una introspección
espiritual sobre ello, una comprensión verdadera y real. El que todas las cosas sean
impermanentes -que al final hemos de abandonarlo todo, dejarlo todo- puede parecer
un mensaje terrible para algunas personas, sin embargo, esto no tiene porque ser así,
ya que la impermanencia implica no sólo cambio, sino también desarrollo y
transformación. Si las cosas no fueran impermanentes y no cambiaran -si fuéramos
hoy los mismos que ayer y ayer los mismos que anteayer- eso si que sería algo
realmente terrible, ya que no podríamos crecer ni evolucionar. La ley de la
impermanencia garantiza la posibilidad de la evolución. Esto es lo que uno comprende
cuando se abre la visión del Dharma. Uno no sólo ve la impermanencia, no sólo
comprende que todo cambia, sino también observa la posibilidad del crecimiento y la
evolución humana. Ve la posibilidad de la transformación, desde la naturaleza humana
normal hasta la iluminación o estado de Buda.
Cuando se desarrolla este tipo de introspección y se alcanza la visión del Dharma,
ocurre algo especial. En el lenguaje budista "se entra en la corriente" -la corriente que
conduce directamente al nirvana-. Todo tu ser se dirige irreversiblemente hacia la
iluminación o estado de Buda. Esto es lo que llamamos "verdadero" Ir al Refugio o, si
se quiere, el Ir al Refugio "trascendental". Al "entrar en la corriente", al "tomar refugio"
de esta forma tan elevada y trascendental, se rompen al mismo tiempo tres de los
"diez impedimentos" que nos atan a la existencia ordinaria. Debido a la ruptura de
estos tres impedimentos se "entra en la corriente y uno se convierte en lo que se
conoce como "el que entra en la corriente" (srotapanna). Puesto que ocupan un lugar
importante en el budismo, permitidme añadir unas palabras acerca de cada uno de los
tres impedimentos.
El primer obstáculo es el del "concepto del yo" (satkayadrsti). Cuando se es víctima de
este concepto del ego, se tiene la idea de que lo que experimentamos como ego o yo
es algo fijo, irreducible y último. Creemos que hay un núcleo de nosotros que nunca va
a cambiar y que es nuestro yo "real". El concepto de ego trae consigo este tipo de
actitud que bloquea el cambio e inhibe la evolución, porque pensamos que somos de
una manera determinada, y tal y como somos ahora permaneceremos siempre. Es
muy difícil superar este obstáculo e imaginarse a uno mismo como algo distinto a lo
que se es ahora. Pero puede hacerse. Si uno está realmente comprometido con el
camino espiritual, llegará un momento en el que podremos mirar atrás y ver los
enormes cambios que se han producido. Veremos que hemos evolucionado, incluso
que estamos transformados. Pero hasta que no se supere el obstáculo del concepto
del ego no se dará realmente ni la evolución espiritual ni la entrada en la corriente.
El segundo obstáculo es el de la "duda" (vicikítsa), aunque no se trata de duda en el
sentido espiritual, sino en el de la indecisión. Se trata de una indecisión culpable y
deliberada. Se renuncia a tomar una decisión y por lo tanto a comprometerse. En vez
de dedicarnos a algo de todo corazón, preferimos mantener todas las opciones
abiertas. Así, ponemos excusas, dudamos, vacilamos, no nos decidimos, esperamos
tiempo y racionalizamos. Este es el obstáculo de la duda. Es esa duda la que nos
impide lanzarnos de lleno a la vida espiritual, lanzarnos hacia lo más profundo.
Consecuentemente no llegamos a ninguna parte en nuestro camino espiritual: hemos
fracasado en conseguir algún progreso espiritual.
El tercer obstáculo es el de la "dependencia de las leyes morales y los preceptos
religiosos" (silavrata-paramarsa), o dicho de otro modo, la creencia en que el obrar por
puro formulismo es suficiente. Uno obra así cuando su corazón no se halla realmente
en lo que está haciendo. Pensamos que si mantenemos las apariencias (externas), es
decir, si observamos las normas de moralidad porque eso es lo que nos exige la
sociedad y cumplimos los preceptos religiosos porque eso es lo que nos exigen
nuestros correligionarios, no habrá ningún problema. Este tipo de actitud es lo que se
llama dependencia de las leyes morales y los preceptos religiosos. Se produce una
división entre la observación de las leyes y el estado de ánimo interior. Aunque lo que
estemos haciendo puede ser muy bueno en si mismo, nuestro corazón no está en ello
y por lo tanto nuestra actuación es algo vacío, mecánico, rígido y artificial. Esto implica
que este tipo de acciones no nos ayudarán a evolucionar: no llevan espiritualmente a
ninguna parte.
Estos son los tres obstáculos. Cuando se "entra en la corriente" se superan y cuando
se superan es cuando se "entra en la corriente". Cuando se abre la visión del Dharma,
la verdad de la impermanencia se abre ante nosotros incluyendo la verdad de la
posibilidad de transformación total, y esa introspección interior de una visión espiritual
superior produce la superación de los tres obstáculos. Así pues, ocurren dos cosas al
mismo tiempo: la toma de refugio en el Buda, el Dharma y la Sangha a nivel
trascendental y la apertura de la visión del Dharma, o visión espiritual superior, que
llevaría a su vez a la superación de los tres obstáculos y a la entrada en la corriente.
De hecho, no sólo es que estas dos cosas, es decir, el tomar refugio y la entrada en la
corriente, ocurran juntas, sino que son diferentes aspectos en una misma persona y de
una única experiencia espiritual o proceso espiritual.
Volviendo de nuevo a la época del Buda, podemos llegar un poco más lejos aún.
Suponed que alguien escucha al Buda exponiendo el Dharma, se siente impresionado
y estremecido y decide Ir al Refugio y suponed que alcanza la entrada en la corriente.
Aún hay algo más que puede ocurrir al llegar a este punto. Puede que esa persona
deje su casa y se convierta en un monje o bikshu. Esto no ocurría siempre. A veces,
alguien tomaba refugio y se abría al mismo tiempo su visión del Dharma, pero no
dejaba su casa, a pesar de que la mayoría sí que lo hacia. En tales casos no sólo se
dan dos, sino tres cosas al mismo tiempo: tomar refugio, la entrada en la corriente y lo
que se conocía como "ordenación", es decir, ir hacia la vida errante y convertirse en un
bikshu o monje. Esta era la situación en el tiempo del Buda.
Después de la muerte del Buda, o de lo que llamamos su paranirvana, se produjeron
numerosos cambios. Y quizás, inevitablemente, se produjo un cierto deterioro
espiritual. La entrada en la corriente se hizo cada vez más rara, y a medida que iban
transcurriendo los siglos, el énfasis se fue poniendo poco a poco en "convertirse en
monje" en su sentido más formal, y tomar refugio fue gradualmente perdiendo su
significado como el acto central de la vida budista. Esto ocurrió especialmente en los
países de tradición teravada en el sudeste asiático. En la actualidad si visitamos estos
países o hablamos con un budista de la escuela teravada, no nos dirán mucho acerca
de la importancia que tiene tomar refugio. Nos hablarán, sin duda, de convertirse en
monje en su sentido más formalista, es decir, raparse la cabeza y llevar la túnica
amarilla. Ahí es donde la escuela teravada pone su énfasis. Para ellos existen dos
tipos de personas: los monjes y los laicos. A un lado se sitúan los monjes, que son los
verdaderos budistas, al otro lado la gente laica, que no son tan "verdaderos" budistas
como los primeros. Uno puede incluso hablar entonces de budistas de primera clase y
budistas de segunda clase. A veces, las diferencias parecen llegar hasta este extremo.
Parece, sin embargo, que observando los hechos tal y como ocurrían en la época del
Buda, hay que decir que aunque realmente hay diferencia, ésta es de otro tipo. La
verdadera diferencia no se encuentra entre monjes y laicos, sino entre aquellos que
han tomado refugio y aquellos que no lo han hecho. La diferencia entre un monje que
toma refugio y una persona laica -un hombre o una mujer- que toma refugio tiene una
importancia secundaria. Que tú vivas de una manera determinada, o sigas una
disciplina concreta, eso tiene una importancia secundaria. Lo que es primordial es el
compromiso espiritual cuando se toma refugio. Por esto en los "Amigos de la Orden
Budista Occidental", tenemos un dicho, una especie de refrán: "tomar refugio -o
comprometerse- es lo principal, la forma de vida es algo secundario".
Ahora bien, aunque en los países de tradición teravada se haya insistido demasiado
entre la distinción de monje y laico, y se haya perdido la apreciación de la importancia
que tiene el tomar refugio, esto no ocurrió con la misma intensidad en los países de
tradición mahayana. Como su propio nombre indica, los países de tradición mahayana
siguieron la tradición del gran sendero. Siguieron el ideal del bodisatva e hicieron
hincapié en el ideal de alcanzar la iluminación, no sólo para beneficio propio sino para
beneficio de todos los seres. En último término, por supuesto, la distinción entre ambas
cosas desaparece. No se puede realmente llegar a la iluminación para beneficio de
otros a menos que se sea una persona de un desarrollo espiritual considerable, y esa
persona no puede evolucionar espiritualmente a menos que, al mismo tiempo no tenga
conciencia, hasta cierto punto, de las necesidades de los demás seres vivos.
A la larga el individualismo espiritual y el altruismo espiritual coinciden; pero como
reacción necesaria al primero de los acercamientos, al acercamiento teravada e
hinayana en general, que son más individualistas, la escuela mahayana hizo hincapié
en el ideal del bodisatva. La actitud del bodisatva es la siguiente: "No deseo la
iluminación para mí mismo únicamente. Si ha de ser solamente para mi, entonces no
me interesa. Deseo la iluminación para todos los seres. Así pues, estoy trabajando
para que todos lleguen a la iluminación; incluyéndome a mí también". No es que el
bodisatva se excluya a sí mismo. Se incluye, pero sólo como uno más entre muchos.
Su misión es trabajar por el progreso espiritual, la iluminación última de todos los
seres.
Puesto que la escuela mahayana adoptó o desarrolló el ideal del bodisatva, todas las
distinciones menores perdieron su importancia. Se insistía en que todo el mundo
debería tener por meta el alcanzar el estado de buda, todo el mundo debería seguir el
ideal del bodisatva. Ya fuera monje o laico, culto o iletrado, rico o pobre,
espiritualmente desarrollado o no, todos deberían aspirar a la iluminación para
beneficio de todos los seres. Debido a la existencia de este ideal del bodisatva,
encontramos que en la tradición mahayana hay menos diferencia entre monje y laico, o
al menos, se ha insistido menos en esa diferencia.
Pero ¿qué es un bodisatva y qué significa aspirar a la iluminación para beneficio de
todos? De acuerdo con la tradición mahayana, el bodisatva en un sentido real es aquel
en el que ha surgido la bodichita o "deseo de iluminación'' (como yo traduzco el
término), como una experiencia espiritual vital. Bodichita no es una mera aspiración
piadosa, ni un concepto, ni un ideal abstracto. Cuando, desde la profundidad del ser,
surge un impulso tremendamente poderoso hacia la iluminación para beneficio de
todos los seres, y cuando ese impulso domina la vida entera y se convierte en la
corriente principal de la experiencia, entonces a eso se le denomina bodichita.
Llegados a este punto surge una interesante cuestión que concierne a la naturaleza de
la relación entre la bodichita, o el surgimiento de ésta por un lado; y el tomar refugio, el
abrirse a la visión del Dharma, la entrada en la corriente y el ir hacia la vida errante y
convertirse en monje por otro. La bodichita, o el surgimiento de la bodichita representa,
por así decirlo, la dimensión más altruista de esas otras cuatro experiencias. 0 mejor
dicho, las cinco, incluyendo la bodichita, representan cinco aspectos de una única,
básica y crucial experiencia espiritual. El tomar refugio hace hincapié en los aspectos
emocionales y volitivos de esa experiencia; la apertura de la visión del Dharma en su
contenido cognitivo; la entrada en la corriente, en la naturaleza permanente y de gran
alcance de sus efectos; ir hacia la vida errante dirige su atención hacia la
reorganización del esquema de la vida diaria que esta experiencia inevitablemente
conlleva, sin tener en cuenta el convertirse o no en monje en su sentido estricto. La
bodichita, como ya he dicho antes, representa el aspecto altruista, 'el mirar por los
demás", de esa experiencia.
Quizás tengamos ahora una concepción mejor y más amplia de lo que significa tomar
refugio. Implica mucho más de lo que la gente normalmente cree y es por esto que se
le da tanta importancia en los "Amigos de la Orden Budista Occidental". El uso de la
palabra "refugio" a veces lleva a confusión, porque se la asocia mentalmente con,
refugiado". Expresiones como “tomar refugio", "ir en busca de refugio" tienen, de
hecho, otras connotaciones como son las de escapar de las dificultades, tomar la
salida fácil, etc. Teniendo en cuenta todo lo dicho hasta ahora, debería haber quedado
claro que tomar refugio en el sentido budista no tiene nada que ver con escapar o con
huir. Sin embargo, para evitar la posibilidad de error o confusión por parte de los que
no se encuentren familiarizados con la expresión, hablamos a menudo, no de Ir al
Refugio, sino de "comprometerse". La palabra "compromiso'' o "comprometerse" está
muy de moda últimamente en occidente; nosotros decimos que es una palabra
especial. Así que a menudo hablamos no de tomar refugio en el Buda, en el Dharma y
en la Sangha, sino de comprometerse con el Buda, comprometerse con el Dharma y
comprometerse con la Sangha. Esto no es todo. Con el paso de los años hemos
llegado a distinguir cuatro niveles de la toma de refugio, cuatro niveles de compromiso.
En primer lugar, se encuentra el Ir al Refugio " provisional" a veces llamado tomar
refugio étnico. Consiste simplemente en recitar la fórmula en pali o en otra lengua de la
toma de refugio, sólo porque forma parte de la propia cultura nacional. En países
budistas como Sri Lanka, Tailandia o Burma, es fácil encontrar gente recitando la
fórmula de la toma de refugio, Buddham Saranam Gacchami, etc, sin entender su
significado. Es sólo una parte de su cultura y no tiene un significado espiritual real para
ellos. La recitación de la fórmula, incluso sin entenderla no es algo incorrecto, pero
ciertamente no es suficiente. De la misma manera, a veces se encuentra gente en los
países budistas de Asia que se consideran a sí mismos como "budistas de
nacimiento". Pero, ¿cómo se puede ser budista de nacimiento? ¿es que ya sale uno
del vientre de su madre recitando "Buddham Saranam Gachami"? Un budista de
nacimiento es algo completamente contradictorio. Uno puede convertirse en budista
sólo consciente y deliberadamente, como resultado de una elección personal. No es
posible que uno nazca budista. El propio Buda criticaba a los brahmines de su época
por pensar que uno podía nacer brahmin. Vosotros seréis brahmines, insistía, sólo a
partir de vuestra actuación como tales. Si la verdad y la corrección se hallan en
vosotros, entonces se os podrá llamar brahmines, y no por otro motivo. Del mismo
modo, uno no puede ser budista de nacimiento. La gente de los países budistas que
aseguran que son budistas de nacimiento no son mejores que los ancianos brahmines
que decían que eran brahmines de nacimiento. Lo que esto significa es que el
budismo, así llamado, se ha convertido simplemente en brahmanismo. Esto es algo
muy importante. El tomar refugio debe ser algo real. Sí tú eres budista, eso debe
depender de tu propia voluntad, de tu propio entendimiento. Así que uno no puede ser
budista de nacimiento. Si piensas que si, es que estás todavía en el nivel de la toma de
refugio provisional, cuyo significado es cultural más que genuinamente espiritual.
En segundo lugar, se encuentra el Ir al Refugio "efectivo". Se trata de un compromiso
consciente y de todo corazón con el Buda, el Dharma y la Sangha. Aunque ese
compromiso sea sincero y genuino, no es lo suficientemente fuerte como para hacer
superar los tres obstáculos y no implica la entrada en la corriente. Uno puede fracasar
aunque haya tomado refugio efectivo.
En tercer lugar se encuentra el Ir al Refugio " real". Este coincide con la entrada en la
corriente, que implica la superación de los tres obstáculos. Uno no puede fracasar a
partir de este nivel.
En cuarto y último lugar, se encuentra el Ir al Refugio "absoluto". En este nivel, en
cierta forma, no hay toma de refugio. Aunque de hecho se tome refugio en el Buda,
ahora que se ha alcanzado la iluminación, uno mismo es Buda. Aquí, pues, al haberse
llegado a la meta ansiada, el sujeto de la toma de refugio y el objeto de la misma son
lo mismo, Buda toma refugio en Buda.
Estos son los cuatro niveles del Ir al Refugio, o los cuatro niveles de compromiso.
Ayuda mucho pensar sobre la toma de refugio, de esta manera. Añadiré algo más, sin
embargo, acerca del nivel más elevado, el "absoluto". En la tradición mahayana se
afirma a veces que en último término sólo hay un refugio, que es el del Buda. En un
sentido hay un refugio en el Dharma y un refugio en la Sangha, pero en otro sentido no
es así. Después de todo, el Dharma procede del Buda, es el resultado, la creación de
la experiencia de la iluminación del Buda. El vehículo a través del cual se transmite esa
experiencia a otros seres humanos para que les sirva de ayuda. De igual modo, la
Sangha es la comunidad espiritual integrada por los que practican el Dharma. Así
como el Dharma depende del Buda, la Sangha depende a su vez del Buda.
Concluyendo diremos que sólo existe el Buda: sólo existe el refugio en el Buda.
Aunque hablemos de tres refugios, en última instancia los tres refugios se convierten
en uno. Pero por ahora, sin embargo, no hay duda de que es muy beneficioso pensar
en términos de tres refugios, en términos del refugio en los tres objetos.
Quisiera concluir volviendo a hablar de nuestro nuevo movimiento budista. En el
corazón de este movimiento, en el corazón de los "Amigos de la Orden Budista
Occidental" se encuentra una comunidad espiritual de personas que han tomado
refugio de manera efectiva. Quizás ninguno de ellos haya llegado hasta la toma de
refugio "real" pero por lo menos, han transcendido la toma de refugio "provisional". Lo
que hemos conseguido crear a lo largo de tantos años en esta orden, en esta Sangha
o comunidad espiritual de gente que toma refugio, es que hacen del acto de tomar
refugio algo central en sus vidas, y que hacen hincapié en ello. Algunos de ellos viven
en sus casas, con sus esposas o maridos y sus hijos; otros, viven en comunidades de
hombres o de mujeres. Unos pocos son anagarikas, que significa que han tomado el
voto de celibato. Como ya he mencionado anteriormente, todos los miembros de la
orden observan diez preceptos: abstenerse de dañar a ningún ser vivo; de tomar lo que
no les ha sido dado; de conducta sexual incorrecta (en el caso de los anagarikas, de
romper su voto de celibato); del falso discurso; del discurso frívolo, vano e inútil; del
discurso que divide y desune a la gente; de la ansiedad; del odio y de los puntos de
vista equivocados. De acuerdo con la tradición budista, los bikshus o monjes observan
227 ó 250 preceptos, pero con el paso del tiempo muchos de ellos se han deteriorado
en su esencia, y hoy en día son venerados más en su forma externa que en su
observancia real. Por lo tanto, decidimos tener una lista corta de preceptos que la
gente pudiera considerar verdaderamente.
De este modo, contamos con una orden, esa Sangha o comunidad espiritual de gente
que ha tomado refugio en el Buda, en el Dharma y en la Sangha, gente que realmente
practica el dharma, que observa los "diez preceptos". Algunos de ellos han sido
miembros de la orden durante diez, doce o más años, y están recogiendo experiencias
constantemente, por medio de dar clases de meditación, conferencias, o de participar
en los negocios cooperativos. De hecho, este núcleo de personas dedicadas de lleno y
comprometidas que hay en el corazón del movimiento, son los responsables de que
todo funcione perfectamente.
De todo esto podemos sacar la conclusión evidente, espero, de la vital importancia
para nosotros mismos como individuos, y para la sociedad a la que pertenecemos, que
tiene el tomar refugio.
Espero que seamos capaces de crear esa Sangha o comunidad espiritual de aquellos
que van al refugio, no sólo en Gran Bretaña y en occidente, sino en muchos otros
países del mundo. Si somos capaces de hacerlo, debe ser, sin embargo partiendo del
Buda, del Dharma y de la Sangha. Sólo puede darse una transformación a partir del Ir
al Refugio.

La Liberación Inconcebible -- Vimalakirti Nirdesa


Vimalakirti Nirdesa
La Liberación Inconcebible


*
Capitulo 1: Purificación del campo de Buddha
Capitulo 2: Destreza inconcebible en la técnica de Liberación
Capitulo 3: La renuencia de los discípulos para visitar a Vimalakirti
Capitulo 4: La renuencia de los Bodhisattvas
Capitulo 5: La consolidación del inválido
Capitulo 6: La Liberación Inconcebible
Capitulo 7: La Diosa
Capitulo 8: La familia de los Tathagatas
Capitulo 9: La Puerta del Dharma de la No Dualidad
Capitulo 10: La Fiesta traída por la Encarnación Emanada
Capitulo 11: Lección de lo Destructible y lo Indestructible
Capitulo 12: Visión del Universo Abhirati y del Tathagata Aksobhya
Epílogo: Antecedentes y Transmisión del Santo Dharma

*
Transferencia de Méritos:
Que los méritos que pudieran derivar del presente trabajo sirvan para que todos los seres
alcancen la Iluminación y puedan liberarse de todas las causas de sufrimiento. Que todos los
seres puedan vivir en paz y felicidad!
Cuatro Grandes Votos:
Los seres sintientes son innumerables, tomo el voto de liberarlos a todos.
Las aflicciones son inagotables, tomo el voto de extinguirlas a todas.
Las Puertas del Dharma son infinitas, tomo el voto de estudiarlas a todas.
El Camino de Buddha es insuperable, tomo el voto de lograrlo completamente.
*
1.Purificación del campo de Buddha
Reverencia a todos los Buddhas, Bodhisattvas, Aryasravakas, y Pratyekabuddhas, del pasado,
presente y futuro.
Así he oído:
Una vez el Señor Buddha estaba residiendo en el jardín de Amrapali, en la ciudad de Vaisali,
acompañado por una gran asamblea de Bhikkus que eran ocho mil, todos santos. Ellos
estaban libres de las impurezas y las aflicciones, y todos habían alcanzado la auto maestría.
Sus mentes estaban completamente liberadas por el conocimiento perfecto. Eran calmos y
dignos, como elefantes reales. Habían completado su trabajo, hecho lo que debían hacer,
arrojado sus cargas, obtenido sus metas, y destruido totalmente las ataduras de la existencia.
Todos ellos habían alcanzado la perfección suprema de cada forma del control de la mente.
De bodhisattvas que eran 32.000, grandes héroes espirituales que eran aclamados
universalmente. Ellos estaban dedicados a través de la actividad penetrante de sus grandes
super conocimientos, y eran sostenidos por la gracia del Buddha. Guardianes de la ciudad del
Dharma, ellos sostenían la verdadera doctrina, y las grandes enseñanzas resonaban como el
rugido del león a través de las diez direcciones.
Sin que se les solicitara, ellos eran los benefactores naturales de todos los seres vivos. Ellos
mantenían sin ruptura la sucesión de las Tres Joyas, conquistando a los demonios y enemigos
y venciendo todas las críticas.
Su plenitud mental, inteligencia, realización, meditación, encantamiento, y elocuencia eran
todas perfectas. Habían alcanzado la tolerancia intuitiva de la incomprehensibilidad suprema de
todas las cosas. Ellos giraban la irreversible rueda del Dharma. Ellos estaban estampados con
la insignia de la no marcabilidad. Eran expertos en conocer las facultades espirituales de todos
los seres vivos. Eran valientes con la confianza que sobrecoge a todas las asambleas. Habían
reunido los grandes cúmulos de mérito y de sabiduría, y sus cuerpos, hermosos sin
ornamentos, estaban adornados con todos los signos y marcas auspiciosas.
Ellos eran exaltados en fama y gloria, como la cima elevada del Monte Sumeru. Su luz se
convertía en tan dura como el diamante, irrompible en su fe en Buddha, Dharma y Sangha;
ellos se bañaban en la ambrosia que se desprende de los rayos de luz del Dharma, que brilla
en todas partes.
Sus voces eran perfectas en dicción y resonancia, y versátil en el habla de todos los idiomas.
Ellos habían penetrado el principio profundo de la relatividad y habían destruido la persistencia
de los hábitos mentales instintivos que subyacen en todas las convicciones acerca de finitud e
infinitud. Ellos hablaban sin temor, como leones, haciendo sonar el trueno de la enseñanza
magnífica. Inigualados, ellos sobrepasaban toda medida. Ellos eran los mejores capitanes del
viaje de descubrimiento de los tesoros del Dharma, los almacenes de mérito y virtud. Eran
expertos en el camino del Dharma, que es recto, apacible, sutil, suave, difícil de ver, y difícil de
comprender. Estaban dotados con la sabiduría que es capaz de comprender los pensamientos
de los seres vivos, así como de sus idas y venidas. Han sido consagrados con la virtud de la
inigualable gnosis (conocimiento intuitivo) del Buddha. Con su gran resolución, se acercaron a
los diez poderes, las cuatro no temeridades, y las dieciocho cualidades especiales del Buddha.
Habían cruzado el abismo aterrador de las malas migraciones, y asumieron aun
voluntariamente la reencarnación en todas las migraciones por el bien de la disciplina de los
seres vivos. Grandes Reyes de la medicina del Dharma apropiadamente. Ellos eran minas
inagotables de virtudes ilimitadas, y glorificaban innumerables campos de Buddha con el
esplendor de esas virtudes. Conferían grandes beneficios al ser vistos, oídos, o aun al
aproximarse. Eran uno para enaltecerlos por innumerables cientos de miles de miríadas de
eones, ni aun uno extinguiría su poderosa inundación de virtudes.
Estos bodhisattvas eran llamados: Samadarsana, Asamadarsana, Samadhivikurvitaraja,
Harmesvara, Dharmaketu, Prabhaketu, Prabhavyuha, Ratnavyuha, Mahavyuha,
Pratibhanakuta, Ratnakuta, Ratnapani, Ratnamudrahasta, Nityapralambahasta,
Nityotksipthasta, Nityatapta, Nityamuditendriya, Pramodyaraja, Devaraja,
Pranidhanapravesaprapta, Prasiddhapratisamvitprapta, Gaganaganja, Ratnolkaparigrhita,
Ratnasura, Ratnapriya, Ratnasri, Indrajala, Jaliniprabha, Niralambanadhyana, Prajnakuta,
Ratnadatta, Marapramardaka, Vidyuddeva, Vikurvanaraja, Kutanimittasamatikranta,
Simhanadanadin, Giryagrapramardiraja, Gandhahastin, Gandhakunjaranaga, Nityodyukta,
Aniksiptadhura, Pramati, Sujata, Padmasrigarbha, Padmavyuha, Avalokitesvara,
Mahasthamaprapta, Brahmajala, Ratnadandin, Marakarmavijeta, Ksetrasamalamkara,
Maniratnacchattra, Suvarnacuda, Manicuda, Maitreya, Manjusrikumarabhuta, y así en adelante,
con los restantes treinta y dos mil.
Estaban también reunidos allí diez mil Brahmas, y su Brahma principal, Sikhin, quien había
venido desde el universo Ashoka con sus cuatro sectores para ver, venerar, y servir al Buddha
y para escuchar el Dharma de su propia boca. Había allí doce mil Sakras, de varios universos
de cuatro sectores. Y había allí otros dioses poderosos: Brahmas, Sakras, Lokapalas, devas,
nagas, yakshas, gandharvas, asuras, garudas, kimnaras, y mahoragas. Finalmente, allí estaba
la comunidad cuádrupla, consistente de Bhikkhus, Bhikkhunis, laicos y laicas.
El Señor Buddha, así rodeado y venerado por esas multitudes de muchos cientos de miles de
seres vivos, erigió un trono majestuoso de león, y comenzó a enseñar el Dharma. Dominando a
todas las multitudes, como el Sumeru, el rey de las montañas, asomando por sobre los
océanos, el Señor Buddha brillaba, irradiaba y relucía mientras se sentaba sobre su magnífico
trono de león. Luego de eso, el bodhisattva Licchavi Ratnakara, con quinientos jóvenes
Licchavi, cada uno sosteniendo un parasol precioso hecho de siete clases diferentes de joyas,
vinieron desde la ciudad de Vaisali y se presentaron en el bosque de Amrapali. Cada uno se
aproximó al Buddha, se inclinó ante sus pies, lo rodeó en sentido horario siete veces,
recostaron su parasol precioso en ofrenda, y se retiraron a un lado. Tan pronto como todos
estos preciosos parasoles hubieron yacido, repentinamente, por el poder milagroso del Señor,
ellos fueron transformados en un precioso pabellón tan grande que formó una cubierta para
esta galaxia entera de billones de mundos. La superficie de la galaxia entera de billones de
mundos fue reflejada en el interior del gran pabellón precioso, donde el contenido total de esta
galaxia puede ser visto: mansiones ilimitadas de soles, lunas, y cuerpos estelares; los reinos de
los devas, nagas, yakshas, gandharvas, asuras, garudas, kimnaras y mahoragas, así como los
reinos de los cuatro Maharajas; el rey de las montañas, Monte Sumeru; Monte Himadri, Monte
Mucilinda; Monte Mahamucilinda; Monte Gandhamadana; Monte Ranaparvata; Monte
Kalaparvata; Monte Cakravada; Monte Mahacakravada; todos los grandes océanos, ríos,
torrentes de bahías, corrientes, arroyos y manantiales; finalmente, todas las villas, suburbios,
ciudades, capitales, provincias, e inmensidades. Todo esto podía ser claramente visto por
todos. Y las voces de todos los Buddhas de las diez direcciones podían ser oída proclamando
sus enseñanzas del Dharma en todos los mundos, los sonidos reverberando en el espacio
debajo del gran pabellón precioso.
Ante esa visión del milagro magnificente afectado por el poder supernatural del Señor Buddha,
la totalidad de los invitados estaba en éxtasis, en rapto, asombrados, deleitados, satisfechos y
plenos de pasmo y placer. Todos ellos se inclinaron ante el Tathagata, se retiraron a un lado
con las palmas juntas, y lo observaron con atención fija. El joven Licchavi Ratnakara se
arrodilló con su rodilla derecha sobre el suelo levantando sus manos; las palmas presionadas
juntas en saludo al Buddha, y lo elogió con el siguiente himno:
Puros son tus ojos, amplios y hermosos, como los pétalos de un loto azul.
Puro es tu pensamiento, habiendo descubierto la suprema trascendencia de todos los trances.
Inconmensurable es el océano de tus virtudes, la acumulación de tus buenos actos.
Tú afirmas el camino de la paz.
Oh, Gran Asceta, obediencia a ti!
Guía, toro de los hombres, nosotros contemplamos la revelación de tu milagro.
Los soberbios y radiantes campos de los Sugatas aparecen ante nosotros,
Y tus extensas enseñanzas espirituales, que llevan a la inmortalidad, se hacen oír a sí mismas
a través de todo el alcance del espacio.
Rey del Dharma, tu riges con el Dharma tu supremo reino de Dharma, y por lo tanto confieres
los tesoros del Dharma sobre todos los seres vivos.
Experto en el profundo análisis e las cosas, enseñas el significado supremo.
Soberano Señor del Dharma, obediencia a ti!
Todas estas cosas surgen dependientemente, de las causas,
Y aun ellas no son existentes ni inexistentes.
Allí no hay ni yo, ni experimentador, ni hacedor,
Ni aun la acción, buena o mala, pierde sus efectos.
Tal es tu enseñanza.
Oh Shakyamuni, conquistando al poderoso huésped Mara,
Encontraste paz, inmortalidad, y la felicidad de esa suprema iluminación,
Que no es realizada por nadie entre los heterodoxos,
Aunque ellos hayan detenido sus procesos de sensación, de pensamiento y mental.
Oh, Maravilloso Rey del Dharma,
Haces girar la rueda del Dharma ante hombres y dioses,
Con su triple revolución, sus múltiples aspectos,
Su pureza de naturalidad, y su extrema paz;
Y de ese modo los Tres Tesoros fueron revelados.
Aquellos que están bien disciplinados por tu Dharma precioso
Son libres de imaginaciones vanas, y siempre profundamente apacibles.
Supremo doctor, pones fin al nacimiento, declinación, enfermedad y muerte.
Inconmensurable Océano de virtud, obediencia a ti!
Como el Monte Sumeru, eres inamovible por el honor o el desprecio.
Amas por igual a los seres morales o inmorales.
Equilibrada en la ecuanimidad, tu mente es como el cielo.
Quién no honraría semejante joya preciosa de un ser?
Gran Sabio, en todas estas multitudes reunidas aquí,
Quienes ven tu aspecto con corazones sinceros en fe,
Cada ser sostiene al Vencedor, como si estuviera delante de él.
Esta es una cualidad especial del Buddha.
Si bien el Señor habla con sólo una voz,
Aquellos presentes perciben esa misma voz diferentemente,
Y cada uno comprende en su propio idioma según sus propias necesidades. Esta es una
cualidad especial del Buddha.
Desde el acto del Guía de hablar en una sola voz,
Algunos desarrollan meramente un instinto para las enseñanzas, algunos ganan realización,
Algunos encuentran pacificación de todas sus dudas.
Esta es una cualidad especial del Buddha.
Obediencia a ti que comandas la fuerza del liderazgo y de los diez poderes!
Obediencia a ti que eres denodado, no conociendo temor!
Obediencia a ti, guía de todos los seres vivos,
Que manifiestas plenamente las cualidades especiales!
Obediencia a ti que has cortado la esclavitud de todas las ataduras!
Obediencia a ti que, habiendo ido más allá, te paras sobre tierra firme!
Obediencia a ti que salvas a los seres sufrientes!
Obediencia a ti que no permaneces en las migraciones!
Te asocias con todos los seres vivos frecuentando sus migraciones.
Si bien tu mente está liberada de todas las migraciones.
Así como el loto, nacido del fango, no está manchado,
Así el loto del Buddha preserva la realización de la vaciedad.
Tú anulas todos los signos en todas las cosas en todo sitio.
No estás sujeto a ningún deseo de absolutamente nada.
El poder milagroso de los Buddhas es inconcebible.
Me inclino ante ti, que te yergues en ningún sitio, como el infinito espacio.
Luego el joven Licchavi Ratnakara, habiendo celebrado al Buddha con estos versos, se dirigió
además a él:
"Señor, estos cinco mil jóvenes Licchavis están verdaderamente en su camino hacia la
insuperable, perfecta iluminación, y han preguntado qué es la purificación del campo de
Buddha de los bodhisattvas. Por favor, Señor, explíqueles la purificación del campo de Buddha
de los bodhisattvas!!
A su pedido, el Buddha dio la aprobación al joven Licchavi Ratnakara: "Bien, bien, joven!
Tu pregunta al Tathagata acerca de la purificación del campo de Buddha es de hecho buena.
Por consiguiente, joven, escucha bien y recuerda! Te explicaré la purificación del campo de
Buddha de los bodhisattvas".
"Muy bien, Señor", contestó Ratnakara y los quinientos jóvenes Licchavis, y se prepararon para
escuchar.
El Buddha dijo:
"Nobles hijos, un campo de Buddha de bodhisattvas es un campo de seres vivos. Por qué así?
Un bodhisattva abraza un campo de Buddha hasta la misma extensión en que él causa el
desarrollo de los seres vivos. Él abraza un campo de Buddha hasta la misma extensión en que
los seres vivos se vuelven disciplinados. Él abraza un campo de Buddha hasta la misma
extensión en que, a través del ingreso en un campo de Buddha, los seres vivos son
introducidos a la gnosis de Buddha. Él abraza un campo de Buddha hasta la misma extensión
en que, por medio de la entrada en ese campo de Buddha, los seres vivos incrementan sus
facultades espirituales santas. Por qué así? Noble hijo, un campo de Buddha de bodhisattvas
florece de los objetivos de los seres vivos.
"Por ejemplo, Ratnakara, uno desearía construir en el espacio vacío, uno podría ir adelante a
pesar del hecho de que no es posible construir o adornar nada en el espacio vacío.
Exactamente del mismo modo, un bodhisattva desearía, quien conoce perfectamente bien que
todas las cosas son como el espacio vacío, desearía construir un campo de Buddha en función
de desarrollar a todos los seres vivos, él podría seguir adelante, a pesar del hecho de que no
es posible construir o adornar un campo de Buddha en el espacio vacío."
"No obstante, Ratnakara, un campo de Buddha de bodhisattva es un campo de pensamiento
positivo. Cuando él alcanza la iluminación, los seres vivos libres de hipocresía y engaño
nacerán en un campo de Buddha".
"Noble hijo, un campo de Buddha de bodhisattva es un campo de gran resolución. Cuando él
obtiene la iluminación, los seres vivos que han cosechado los dos depósitos y han plantado las
raíces de virtud nacerán en su campo de Buddha."
"Un campo de Buddha de bodhisattva es un campo de aplicación virtuosa. Cuando él alcanza
la iluminación, los seres vivos que viven por todos los principios virtuosos nacerán en su campo
de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es la magnificencia de la concepción del espíritu de
iluminación. Cuando él alcanza la iluminación, los seres vivos que están participando realmente
en el Mahayana nacerán en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es un campo de generosidad. Cuando él alcanza la
iluminación, los seres vivos que abandonan todas sus posesiones nacerán en su campo de
Buddha".
"Un campo de Buda de bodhisattva es un campo de tolerancia. Cuando él alcanza la
iluminación, los seres vivos con las trascendencias de tolerancia, disciplina, y el trance superior
– por lo tanto con los treinta y dos signos auspiciosos- nacerán en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es un campo de meditación. Cuando él alcanza la
iluminación, los seres vivos que están uniformemente equilibrados a través de la plenitud
mental y conciencia nacerán en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es un campo de sabiduría. Cuando él alcanza la
iluminación, los seres vivos que están destinados a lo supremo nacerán en su campo de
Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva consiste en los cuatro inconmensurables. Cuando él
alcanza la iluminación, los seres vivos que viven por amor, compasión, gozo e imparcialidad,
nacerán en su campo de Buddha.
"Un campo de Buddha de bodhisattva consiste en los cuatro medios de unificación. Cuando él
alcanza la iluminación, los seres vivos que están mantenidos juntos por todas las liberaciones
nacerán en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es la habilidad en las técnicas de liberación. Cuando él
alcanza la iluminación, los seres vivos hábiles en todas las técnicas y actividades de liberación
nacerán en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva consiste en las treinta y siete ayudas para la iluminación.
Los seres vivos que dedican sus esfuerzos a los cuatro focos de plenitud mental, los cuatro
esfuerzos correctos, las cuatro bases del poder mágico, las cinco facultades espirituales, las
cinco fuerzas, los siete factores de iluminación, y las ocho ramas del camino santo nacerán en
su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es su mente de total dedicación. Cuando él alcanza la
iluminación, los ornamentos de todas las virtudes aparecerán en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es la doctrina que erradica las ocho adversidades.
Cuando él alcanza la iluminación, las tres malas migraciones cesarán, y no habrá tales cosas
como las ocho adversidades en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva consiste en su observancia personal de los preceptos
básicos y su restricción en culpar a otros por sus transgresiones. Cuando él alcanza la
iluminación, ni siquiera la palabra "crimen" jamás será mencionada en su campo de Buddha".
"Un campo de Buddha de bodhisattva es la pureza del camino de las diez virtudes. Cuando él
alcanza la iluminación, los seres vivos que están seguros en una larga vida, grandes en salud,
castos en conducta, perfeccionados por el habla verdadera, de habla suave, libres de las
intrigas divisorias y diestros en reconciliar a las facciones, iluminadores en sus conversaciones,
libres de envidia, libres de malicia, y adornados con puntos de vista perfectos nacerán en su
campo de Buddha".
"Así, noble hijo, así como es la producción del espíritu de iluminación de los bodhisattvas, así
es su pensamiento positivo. Y así como es su pensamiento positivo, así es su aplicación
virtuosa.
"Su aplicación virtuosa es equivalente a su resolución elevada, su resolución elevada es
equivalente a su determinación, su determinación es equivalente a su práctica, y su práctica es
equivalente a su dedicación total, su dedicación total es equivalente a su técnica de liberación,
su técnica de liberación es equivalente a su desarrollo de los seres vivos, y su desarrollo de los
seres vivos es equivalente a la pureza de su campo de Buddha."
"La pureza de su campo de Buddha refleja la pureza de los seres vivos; la pureza de los seres
vivos refleja la pureza de su gnosis; la pureza de su gnosis refleja la pureza de su doctrina; la
pureza de su doctrina refleja la pureza de su práctica trascendental; y la pureza de su práctica
trascendental refleja la pureza de su propia mente".
En esto, mágicamente influido por el Buddha, el Venerable Shariputra tuvo este pensamiento:
"Si el campo de Buddha es puro sólo hasta la extensión en que la mente del bodhisattva es
pura, entonces, cuando Shakyamuni Buddha estaba comprometido en la carrera de
bodhisattva, su mente debe haber sido impura. De otro modo, cómo podría este campo de
Buddha parecer ser tan impuro?"
El Buddha, conociendo telepáticamente el pensamiento del Venerable Shariputra, le dijo: "Qué
crees, Shariputra? Es porque el sol y la luna son impuros que los ciegos de nacimiento no los
ven?"
Shariputra respondió: "No, Señor. No es así. La falta yace en aquellos ciegos de nacimiento, y
no en el sol y la luna".
El Buddha declaró: "Del mismo modo, Shariputra, el hecho de que algunos seres vivos no
ostenten la espléndida manifestación de virtudes del campo de Buddha del Tathagata es
debido a su propia ignorancia. No es la falta del Tathagata. Shariputra, el campo de Buddha del
Tathagata es puro, pero tú no lo ves".
Entonces el Brahma Sikhin le dijo al Venerable Shariputra, "Reverendo Shariputra, no digas
que el campo de Buddha del Tathagata es impuro. Reverendo Shariputra, el campo de Buda
del Tathagata es puro. Yo veo la espléndida expansión del campo de Buddha del Señor
Shakyamuni como igual al esplendor de, por ejemplo, las residencias de las deidades más
altas".
Entonces el Venerable Shariputra dijo al Brama Sikhin, " Como para mí, Oh Brahma, yo veo
esta gran tierra, con sus altos y sus bajos, sus espinas, sus precipicios, sus picos y sus
abismos, como si estuviera llena enteramente con barro".
El Brama Sikhin contestó: "El hecho de que tú veas tal campo de Buddha como este como si
fuera tan impuro, reverendo Shariputra, es un signo claro de que hay altos y bajos en tu mente
y de que tu pensamiento positivo en consideración a la gnosis de Buddha tampoco es puro.
Reverendo Shariputra, aquellos cuyas mentes son imparciales hacia todos los seres vivos y
cuyos pensamientos positivos hacia la gnosis de Buddha son puros, ven a este campo de
Buddha como perfectamente puro".
En ese momento el Señor tocó el suelo de este universo galáctico de billones de mundos con
su gran dedo gordo, y repentinamente fue transformado en una masa inmensa de joyas
preciosas, un arreglo magnificente de varios cientos de miles de racimos de gemas preciosas,
hasta que se pareció al universo del Tathagata Ratnavyuha, llamado Anantagunaratnavyuha.
Todos en la asamblea completa fueron llenados de maravilla, cada uno percibiéndose a sí
mismo sentado en un trono de lotos enjoyados.
Luego, el Buddha dijo al venerable Shariputra: "Shariputra, ves este esplendor de las virtudes
del campo de Buddha?"
Shariputra respondió: " Lo veo, Señor! Aquí ante mí hay una exhibición de esplendor tal como
nunca antes he escuchado o contemplado!"
El Buddha dijo: "Shariputra, este campo de Buddha está siempre así de puro, pero el Tathagata
lo hace aparecer como manchado con varias faltas, para llevar a la madurez de los seres vivos
inferiores. Por ejemplo, Shariputra, los dioses del cielo Trayastrimsa todos toman su comida de
un solo vaso precioso, sin embargo el néctar, que nutre a cada uno, difiere de acuerdo a las
diferencias de méritos que cada cual ha acumulado. Exactamente así, Shariputra, los seres
vivos que nacen en el mismo campo de Buddha ven el esplendor de las virtudes de los campos
de Buddha de acuerdo a su propio grado de pureza."
Cuando este esplendor de la belleza de las virtudes el campo de Buddha brilló más, ochenta y
cuatro mil seres concibieron el espíritu de iluminación perfecta insuperable, y los quinientos
jóvenes Licchavi que acompañaban al joven Licchavi Ratnakara alcanzaron todos la tolerancia
de conformidad del supremo no nacimiento.
Entonces, el Señor retiró su poder milagroso y de una vez el campo de Buddha fue restaurado
a su apariencia usual. Luego, tanto hombres como dioses que suscribían al vehículo del
discípulo pensaron: "He aquí! Todas las cosas compuestas son impermanentes".
De este modo, treinta y dos mil seres vivos purificaron su inmaculado, no distorsionado ojo del
Dharma en consideración a todas las cosas. Los ocho mil Bhikkhus fueron liberados de sus
engaños mentales, obteniendo el estado de no-aferramiento. Y los ochenta y cuatro mil seres
vivos que estaban dedicados a la grandeza del campo de Buddha, habiendo comprendido que
todas las cosas no son por naturaleza más que creaciones mágicas, todos concibieron en sus
propias mentes el espíritu de la insuperable, totalmente perfecta iluminación.
*
2. Destreza inconcebible en la técnica de Liberación
En ese momento, vivía en la gran ciudad de Vaisali un cierto Licchavi, de nombre Vimalakirti.
Habiendo servido a los antiguos Buddhas, él había generado las raíces de virtud por honrarlos
y hacerles ofrendas. Él había obtenido tolerancia así como elocuencia. Él actuaba con el gran
súper conocimiento. Él había obtenido el poder de los encantamientos y de la no-temeridad.
Había conquistado a todos los demonios y oponentes. Había penetrado el profundo camino del
Dharma. Él fue liberado a través de la trascendencia de la sabiduría.
Habiendo integrado su realización con la habilidad en técnica de liberación, era experto en
conocer los pensamientos y acciones de los seres vivos. Conociendo la fuerza o debilidad de
sus facultades, y siendo dotado con elocuencia sin rival, enseñaba el Dharma apropiadamente
a cada uno. Habiéndose aplicado a sí mismo enérgicamente al Mahayana, lo comprendía y
completaba sus tareas con gran finura. Él vivía con el comportamiento de un Buddha, y su
inteligencia superior era tan vasta como un océano. Él era elogiado, honrado y recomendado
por todos los Buddhas y era respetado por Indra, Brahma, y todos los Lokapalas. Para
desarrollar a los seres vivos con su habilidad en técnica de liberación, vivía en la gran ciudad
de Vaisali.
Su riqueza era inagotable con el propósito de mantener a los pobres y los desamparados.
Observaba una moralidad pura para proteger a los inmorales. Mantenía la tolerancia y el auto
control para reconciliar a los seres que estaban enojados, crueles, violentos y brutales. Él
resplandecía con energía para inspirar a la gente que era perezosa. Mantenía la concentración,
presencia mental, y la meditación para apoyar a los mentalmente problemáticos. Él obtuvo la
sabiduría decisiva para apoyar a los tontos.
Él vestía las ropas blancas de los laicos, sin embargo vivía impecablemente como un devoto
religioso. Vivía en su hogar, pero permanecía apartado del reino del deseo, del reino de la
materia pura, y del reino de lo inmaterial. Tenía un hijo, una esposa, y asistentes femeninas, sin
embargo siempre mantenía la continencia. Parecía rodeado de sirvientes, sin embargo vivía en
soledad. Parecía estar adornado con ornamentos, sin embargo siempre estaba ornamentado
con los signos y marcas auspiciosos. Parecía comer y beber, sin embargo siempre tomaba
nutrientes del sabor de la meditación. Hacía su aparición en campos de deporte y casinos, pero
su meta era siempre madurar a aquella gente que estaba apegada al juego y al deporte.
Visitaba a los maestros heterodoxos de moda, sin embargo siempre mantenía lealtad
inmodificada hacia el Buddha. Comprendía las ciencias mundanas y trascendentales y las
prácticas esotéricas, sin embargo siempre obtenía placer en las delicias del Dharma. Se
mezclaba en todas las multitudes, sin embargo era respetado como el más distinguido de
todos.
Para estar en armonía con la gente, se asociaba con los ancianos, con aquellos de edad
mediana, y con los jóvenes, sin embargo siempre hablaba en armonía con el Dharma. Se
comprometía en toda clase de negocios, sin embargo no tenía interés en ganancias o
posesiones. Para entrenar a los seres vivos, aparecería en las encrucijadas o esquinas de la
calle, y para protegerlos participaba en el gobierno. Para alejar a la gente del Hinayana y
comprometerlos en el Mahayana, aparecía entre los oyentes y maestros del Dharma. Para
desarrollar a los niños, visitaba todas las escuelas. Para demostrar los males del deseo, incluso
entraba en los burdeles. Para establecer a los borrachos en la presencia mental correcta,
entraba en los cabarets.
Era honrado como hombre de negocios entre los hombres de negocio porque demostraba la
prioridad del Dharma. Era honrado como el terrateniente entre los terratenientes porque
renunciaba a la agresividad de ser propietario. Era honrado como guerrero entre los guerreros
porque cultivaba la resistencia, la determinación y la fortaleza. Era honrado como aristócrata
entre los aristócratas porque suprimía el orgullo, la vanidad y la arrogancia. Era honrado como
oficial entre los oficiales porque regulaba las funciones del gobierno de acuerdo al Dharma. Era
honrado como el príncipe de los príncipes porque revertía su apego a los placeres reales y al
poder soberano. Era honrado como eunuco en el harén real porque enseñaba a las mujeres
jóvenes de acuerdo al Dharma.
Era compatible con la gente ordinaria porque apreciaba la excelencia de los méritos ordinarios.
Era honrado como el Indra entre los Indras porque les mostraba la temporalidad de su señorío.
Era honrado como el Brahma entre los Bramas porque les mostraba la excelencia especial de
la gnosis. Era honrado como el Lokapala entre los Lokapalas porque fomentaba el desarrollo
de todos los seres vivos. Así vivía el Licchavi Vimalakirti en la gran ciudad de Vaisali, adornado
con un conocimiento infinito de destrezas en técnicas de liberación.
En ese momento, fuera de esta verdadera destreza en técnica de liberación, Vimalakirti se
manifestó a sí mismo como si estuviera enfermo. Para preguntar por su salud, el rey, los
oficiales, los señores, los jóvenes, los aristócratas, los dueños de casa, los hombres de
negocio, la gente de pueblo, y miles de otros seres vivos vinieron de la gran ciudad de Vaisali y
llamaron al inválido. Cuando llegaron, Vimalakirti les enseñó el Dharma, comenzando su
discurso desde la realidad de cuatro elementos principales:
"Amigos, este cuerpo es tan impermanente, frágil, inmerecedor de confianza, y endeble. Es tan
insustancial, perecedero, de corta vida, doloroso, lleno de enfermedades, y sujeto a cambios.
Entonces, mis amigos, como este cuerpo es sólo un recipiente de muchas enfermedades, los
hombres sabios no se fían de él. Este cuerpo es como una bola de espuma, incapaz de
soportar mucha presión. Es como una burbuja de agua, no permanece por mucho. Es como un
espejismo, nacido de los apetitos de las pasiones. Es como el tronco de un plátano, sin tener
esencia. He aquí! Este cuerpo es como una máquina, un nexo de huesos y tendones. Es como
una ilusión mágica, consistente en falsificaciones. Es como un sueño, siendo una visión irreal.
Es como un reflejo, siendo la imagen de acciones anteriores. Es como un eco, siendo
dependiente de los condicionamientos. Es como una nube, siendo caracterizada por la
turbulencia y la disolución. Es como un flash o un relámpago, siendo inestable, y decayendo a
cada momento. El cuerpo es sin dueño, siendo el producto de una variedad de condiciones".
"Este cuerpo es inerte, como la tierra; sin yo, como el agua; sin vida, como el fuego;
impersonal, como el viento; y no sustancial, como el espacio. Este cuerpo es irreal, siendo una
instalación de cuatro elementos principales. Es vacío, no existiendo como un yo o como auto
poseído. Es inanimado, siendo como la hierba, árboles, paredes, terrones de tierra, y como las
alucinaciones. Es insensato, siendo manejado como un molino de viento. Es mugriento, siendo
una aglomeración de pus y excrementos. Es falso, siendo destinado a ser roto y destruido, a
pesar de ser cuidado y masajeado. Es afligido por las cuatrocientas cuatro enfermedades. Es
como un anciano, constantemente abrumado por la edad. Su duración nunca es cierta – sólo
es cierto su final en la muerte-. Este cuerpo es una combinación de agregados, elementos, y
sentidos, que son comparables a criminales, serpientes venenosas, y a una ciudad vacía,
respectivamente.
Por consiguiente, tal cuerpo debería ser debería ser repulsivo para ti. Deberías perder la
esperanza en él y despertar tu admiración por el cuerpo del Tathagata".
"Amigos, el cuerpo de un Tathagata es el cuerpo del Dharma, nacido de la gnosis. El cuerpo de
un Tathagata es nacido de almacenes de mérito y sabiduría. Es nacido de moralidad, de
meditación, de sabiduría, de las liberaciones, y del conocimiento y visión de la liberación. Es
nacido del amor, la compasión, el gozo y la imparcialidad. Es nacido de la caridad, disciplina, y
auto control. Es nacido del camino de diez virtudes. Es nacido de la paciencia y suavidad. Es
nacido de las raíces de virtud plantada por esfuerzos sólidos. Es nacido de las
concentraciones, las liberaciones, las meditaciones, y las absorciones. Es nacido del
aprendizaje, la sabiduría, y la técnica liberadora. Es nacido de las treinta y siete ayudas para la
iluminación. Es nacido de la quiescencia mental y el análisis trascendental. Es nacido de los
diez poderes, las cuatro no temeridades, y las dieciocho cualidades especiales. Es nacido de
todas las trascendencias. Es nacido de las ciencias y el súper conocimiento. Es nacido del
abandono de las cualidades malas, y de la colección de todas las buenas cualidades. Es
nacido de la verdad. Es nacido de la realidad. Es nacido de la conciencia conocedora."
"Amigos, el cuerpo del Tathagata es nacido de innumerables buenos trabajos. Hacia semejante
cuerpo deberías tornar tus aspiraciones, y, en función de eliminar la enfermedad de las
pasiones de todos los seres vivos, deberías concebir el espíritu de Anuttara Samyak
Sambodhi".
Mientras Licchavi Vimalakirti así enseñaba el Dharma a aquellos que habían venido a
preguntar acerca de su enfermedad, muchos cientos de miles de seres vivos concibieron el
espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi.
*
3. La renuencia de los discípulos para visitar a Vimalakirti
Entonces, el Licchavi Vimalakirti pensó para sí mismo: "Estoy enfermo, yaciendo en mi cama
dolorido, sin embargo el Tathagata, el santo, el perfectamente completo Buddha, no considera
o tiene piedad de mí, y no envía a nadie para preguntar sobre mi enfermedad".
El Señor conocía este pensamiento en la mente de Vimalakirti y le dijo al venerable Shariputra:
"Shariputra, ve a preguntar sobre la enfermedad del Licchavi Vimalakirti".
Habiéndose dirigido así, el venerable Shariputra respondió al Buddha: "Señor, yo estoy de
hecho renuente en ir a preguntar al Licchavi Vimalakirti acerca de su enfermedad. Por qué? Yo
recuerdo un día, cuando yo estaba sentado al pie de un árbol en la selva, absorto en
contemplación, el Licchavi Vimalakirti vino al pie del árbol y me dijo: "Reverendo Shariputra,
este no es el modo para que te absorbas en contemplación. Debes absorberte en
contemplación de modo que ni cuerpo ni mente aparezcan en cualquier parte en el mundo
triple. Debes absorberte en contemplación de modo que puedas manifestar todo el
comportamiento ordinario sin abandonar la cesación. Debes absorberte en contemplación de
modo que puedas manifestar la naturaleza de una persona ordinaria sin abandonar tu
naturaleza espiritual cultivada. Debes absorberte en contemplación de modo que la mente ni se
asiente adentro ni se mueva hacia las formas externas. Debes absorberte en contemplación de
modo que las treinta y siete ayudas para la iluminación se manifiesten sin desvío hacia
cualquier convicción. Debes absorberte en contemplación de modo seas puesto en liberación
sin abandonar las pasiones que son la provincia del mundo".
"Reverendo Shariputra, aquellos que se absorben a sí mismos en contemplación de tal modo
son declarados por el Señor como los que son verdaderamente absortos en contemplación."
"Señor, cuando escuché esta enseñanza, yo era incapaz de responder y permanecí en silencio.
Por consiguiente, estoy renuente de ir a preguntar a ese buen hombre acerca de su
enfermedad".
Entonces, el Buddha dijo al venerable Maha Maudgalyayana: "Maudgalyayana, ve a preguntar
al Licchavi Vimalakirti acerca de su enfermedad". (Maha es un título que significa "Grande").
Maudgalyayana respondió: "Señor, yo estoy de hecho renuente a ir a preguntar al Licchavi
Vimalakirti sobre su enfermedad. Por qué? Recuerdo un día que yo estaba enseñando el
Dharma a los jefes de familia en una plaza en la gran ciudad de Vaisali, y el Licchavi Vimalakirti
vino y me dijo: "Reverendo Maudgalyayana, este no es el modo de enseñar el Dharma a los
jefes de familia con sus ropas blancas. El Dharma debe ser enseñado de acuerdo a la
realidad".
"Reverendo Maudgalyayana, el Dharma es sin seres vivos, porque es libre del polvo de los
seres vivos. Es sin yo, porque es libre del polvo del deseo. Es sin vida, porque es libre de
nacimiento y muerte. Es sin personalidad, porque se esparce con los orígenes pasados y los
futuros destinos. El Dharma es paz y pacificación, porque es libre del deseo. No se vuelve un
objeto, porque es libre de palabras y letras; es inexpresable, y trasciende todo movimiento de la
mente. El Dharma es omnipresente, porque es como el espacio infinito. Es sin color, marca, o
forma, porque es libre de todos los procesos. Es sin el concepto de "mío", porque es libre de la
noción habitual de posesión. Es sin ideación, porque es libre de mente, pensamiento, o
conciencia. Es incomparable, porque no tiene antítesis. Es sin presunción de condicionalidad,
porque no se conforma a las causas".
"Penetra parejamente todas las cosas, porque todas están incluidas en el reino supremo. Se
conforma a la realidad por los medios del proceso de no-conformidad. Reside en el límite de la
realidad, porque es expresamente sin fluctuación. Es inamovible, porque es independiente de
los seis objetos de los sentidos. Es sin ir ni venir, porque nunca permanece quieto. Es
comprimido por la vaciedad, es notable a través de la carencia de marcas, y es libre de
presunción y repudio, porque es sin deseo. Es sin establecimiento ni rechazo, sin nacimiento ni
destrucción. Es sin ninguna conciencia fundamental, trascendiendo el rango de ojo, oído, nariz,
lengua, cuerpo y pensamiento. Es sin altura ni bajeza. Reside sin movimiento o actividad".
"Reverendo Maha Maudgalyayana, cómo podría haber una enseñanza en consideración a
semejante Dharma? Reverendo Maha Maudgalyayana, aun la expresión "enseñar el Dharma"
es presuntuosa, y aquellos que la escuchan, escuchan presunción. Reverendo
Maudgalyayana, donde no hay palabras presuntuosas, no hay maestro del Dharma, nadie
escucha, y nadie comprende. Es como si una persona ilusoria fuera a enseñar el Dharma a
gente ilusoria."
"Por consiguiente, debes enseñar el Dharma manteniendo tu mente en esto. Debes ser adepto
en considerar las facultades espirituales de los seres vivos. Por los medios de la correcta visión
del ojo de la sabiduría, manifestar la gran compasión, reconociendo la benevolente actividad
del Buddha, purificando tus intenciones, comprendiendo las expresiones definitivas del
Dharma, debes enseñar el Dharma para que la continuidad de los Tres Tesoros no pueda
nunca ser interrumpida".
"Señor, cuando Vimalakirti había discurrido así, ochocientos jefes de familia en la multitud
concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi, y yo mismo quedé sin palabras. Por
consiguiente, Señor, estoy renuente a ir a preguntar a este buen hombre sobre su
enfermedad".
Entonces, el Buddha le dijo al venerable Mahakasyapa: "Mahakasyapa, ve a visitar al Licchavi
Vimalakirti para preguntar por su enfermedad".
"Señor, de hecho estoy renuente a ir donde Licchavi Vimalakirti para preguntar por su
enfermedad. Por qué? Recuerdo un día, cuando yo estaba en la calle de los pobres
mendigando mi alimento, el Licchavi Vimalakirti vino y me dijo:
"Reverendo Mahakasyapa, evitar la casa de los ricos, y favorecer la casa de los pobres, esto
es parcialidad en benevolencia. Reverendo Mahakasyapa, deberías vivir en el hecho de la
igualdad de las cosas, y debes buscar limosnas en consideración a todos los seres vivos en
todo momento. Debes mendigar tu alimento en la conciencia de la suprema no-existencia de la
comida. Deberías buscar limosnas por el bien de la eliminación del materialismo de los demás.
Cuando entras a una ciudad, debes mantener en mente su vaciedad real, sin embargo debes
proseguir en eso en función de desarrollar a los hombres y mujeres. Debes entrar en los
hogares como si entraras en la familia del Buddha. Debes aceptar limosnas sin tomar nada.
Debes ver la forma como un ciego de nacimiento, oír los sonidos como si fueran ecos, oler los
aromas como si fueran vientos, experimentar los sabores sin ninguna discriminación, tocar lo
tangible en conciencia de la suprema falta de contacto en gnosis, y conocer las cosas con la
conciencia de una criatura ilusoria. Eso que es sin sustancia intrínseca y sin sustancia
impartida no se quema. Y lo que no se quema no será extinguido.
"Anciano Mahakasyapa, si equipado (en estado de equilibrio) en las ocho liberaciones sin
trascender las ocho perversiones, puedes entrar en la ecuanimidad de la realidad por los
medios de la ecuanimidad de la perversión, y si puedes hacer un regalo a todos los seres vivos
y ofrendar a todos los santos y Budas con incluso una simple medida de limosnas, entonces
puedes comer tú mismo. Así, cuando comes, después de ofrendar, no deberías estar afectado
por las pasiones ni libre de las pasiones, ni involucrado en la concentración ni libre de la
concentración, ni vivir en el mundo ni residir en la liberación. Más aun, aquellos que dan tales
limosnas, reverendo, no tienen ni gran mérito ni pequeño mérito, ni ganan ni pierden. Ellos
deben seguir el camino de los Budas, no el camino de los discípulos. Sólo de este modo,
Anciano Mahakasyapa, es la práctica de comer por limosnas significativamente".
"Señor, cuando escuché esta enseñanza, fui asombrado y pensé: "Reverencia a todos los
bodhisattvas! Si un bodhisattva laico puede estar adornado con tal elocuencia, quien es aquel
que no concebiría el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi? Desde ese momento en
adelante, ya no recomendé más los vehículos de los discípulos y de los sabios solitarios, sino
que recomendé el Mahayana. Y así, Señor, estoy renuente de ir hacia ese buen hombre a
preguntar sobre su enfermedad".
Entonces, el Buddha dijo al venerable Subhuti: "Subhuti, ve a ver al Licchavi Vimalakirti para
preguntar sobre su enfermedad".
Subhuti respondió: "Señor, de hecho estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Mi Señor, recuerdo un día, cuando iba a mendigar mi
comida a la casa del Licchavi Vimalakirti en la gran ciudad de Vaisali, él tomó mi cuenco y lo
llenó con algo de comida excelente y me dijo: "Reverendo Subhuti, toma mi comida si
comprendes la igualdad de todas las cosas, por los medios de la igualdad de los objetos
material, y si comprendes la igualdad de todos los atributos del Buddha, por los medios de la
igualdad de todas las cosas. Toma esta comida si, sin abandonar el deseo, la ira y la
ignorancia, puedes evitar la asociación con ellos; si puedes seguir el sendero del camino único
sin siquiera perturbar los puntos de vista egoístas. Si puedes producir el conocimiento y las
liberaciones sin conquistar la ignorancia y el deseo por la existencia; si, por la igualdad de los
cinco pecados mortales, alcanzas la igualdad de la liberación; si no eres ni liberado ni atado; si
no ves las Cuatro Nobles Verdades, y sin embargo no eres el que "no ha visto la verdad"; si no
has alcanzado ningún fruto, y sin embargo no eres "el que no ha alcanzado"; si eres una
persona ordinaria, y aun sin las cualidades de una persona ordinaria; si no eres santo, sin
embargo no eres no santo; si eres responsable de todas las cosas, y aun eres libre de toda
noción concerniente a cualquier cosa. Toma esta comida, reverendo Subhuti, si, sin ver al
Buddha, escuchar el Dharma, o servir en la Sangha, emprendes la vida religiosa bajo los seis
maestros heterodoxos; llamados Purana Kasyapa, Maskarin Gosaliputra, Samjayin
Vairatuputra, Kakuda Katyayana, Ajita Kesakambala, y Nirgrantha Jnaniputra, y sigues los
caminos que ellos prescriben. Toma esta comida, reverendo Subhuti, si, entreteniendo todos
los puntos de vista falsos, no encuentras ni extremo ni medio; si, atado en las ocho
adversidades, no obtienes condiciones favorables; si, asimilando las pasiones, no obtienes
purificación; si el desapasionamiento de los seres vivos es tu desapasionamiento, reverendo; si
aquellos que te hacen ofrendas no están de ese modo purificados; si aquellos que te ofrecen
comida, reverendo, aun caen en las tres malas migraciones; si te asocias con todos los Maras;
si entretienes todas las pasiones; si la naturaleza de las pasiones es la naturaleza de un
reverendo; si tienes sentimientos hostiles hacia todos los seres vivos; si desprecias a todos los
Buddhas; si criticas todas las enseñanzas del Buddha; si no confías en la Sangha; y finalmente,
si nunca entras en la liberación suprema".
"Señor, cuando escuché estas palabras del Licchavi Vimalakirti, me pregunté qué debería decir
y qué debería hacer, pero estuve totalmente en tinieblas. Dejando el cuenco, estaba por irme
de la casa cuando el Licchavi Vimalakirti me dijo: "Reverendo Subhuti, no temas a estas
palabras, y lleva tu cuenco. Qué piensas, reverendo Subhuti? Si fuera una encarnación creada
por el Tathagata la que te habló así, tendrías miedo?"
"Yo respondí: "No, de hecho, noble señor!"
Luego él dijo: " Reverendo Subhuti, la naturaleza de todas las cosas es como la ilusión, como
una encarnación mágica. Así que no debes temerles. Por qué? Todas las palabras son también
de esa naturaleza, y así el sabio no está apegado a las palabras, ni les teme. Por qué? Todos
los idiomas no existen definitivamente, excepto como liberación. La naturaleza de todas las
cosas es la liberación".
"Cuando Vimalakirti hubo discurrido de este modo, doscientos dioses obtuvieron la visión
doctrinal pura en consideración a todas las cosas, sin oscuridad ni engaño, y quinientos dioses
obtuvieron la tolerancia de la conformidad. En cuanto a mí, quedé sin palabras e incapaz de
responderle. Por consiguiente, Señor, estoy renuente de ir a ver a este buen hombre para
preguntar sobre su enfermedad".
Entonces, el Buddha le dijo al venerable Purna-maitrayaniputra: "Purna, ve a visitar al Licchavi
Vimalakirti a preguntar sobre su enfermedad".
Purna respondió: "Señor, de hecho estoy renuente a ir a ver a este buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Señor, recuerdo cuando yo estaba enseñando el
Dharma a algunos monjes jóvenes en la gran selva, el Licchavi Vimalakirti fue allí y me dijo:
"Reverendo Purna, primero concéntrate tú mismo, considera la mente de estos jóvenes
Bhikkhus, y luego enséñales el Dharma! No pongas comida podrida en un cuenco enjoyado!
Primero comprende las inclinaciones de estos monjes, y no confundas zafiros invalorables con
cuentas de vidrio! Reverendo Purna, sin examinar las facultades espirituales de los seres vivos,
no presumas acerca de la unilateralidad de sus facultades; no hieras a aquellos que no tienen
heridas; no impongas un camino estrecho a quienes aspiran a un gran camino; no intentes
verter el gran océano en la huella de la pezuña de un buey; no intentes poner el Monte Sumeru
en un grano de mostaza; no confundas la brillantez del sol con la luz de una luciérnaga; y no
expongas ante quienes admiran el rugido de un león al aullido de un chacal!"
"Reverendo Purna, todos estos monjes estuvieron anteriormente comprometidos en el
Mahayana pero han olvidado el espíritu de la iluminación. Entonces no los instruyas en el
vehículo del discípulo. El vehículo del discípulo no es definitivamente válido, y ustedes
discípulos son como hombres ciegos de nacimiento, en cuanto al reconocimiento de los grados
de facultades espirituales de los seres vivos".
En ese momento, el Licchavi Vimalakirti entró en tal concentración que aquellos monjes fueron
causados a recordar sus varias existencias previas, en las cuales ellos habían producido las
raíces de virtud por servir a quinientos Budas por el bien de la iluminación perfecta. Tan pronto
como sus propios espíritus de iluminación se volvieron claros para ellos, se inclinaron a los pies
de ese buen hombre y presionaron sus palmas juntas en reverencia. Él les enseñó el Dharma,
y todos ellos alcanzaron el estado de irreversibilidad desde el espíritu de Anuttara Samyak
Sambodhi. Me vino a la mente entonces: "los discípulos, que no conocen los pensamientos o
las inclinaciones de otros, no son capaces de enseñar el Dharma a nadie. Por qué? Estos
discípulos no son expertos en discernir la superioridad e inferioridad de las facultades
espirituales de los seres vivos, y no siempre están en un estado de concentración como el
Tathagata, el Santo, el perfectamente realizado Buddha"
"Por esto, Señor, estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre a preguntarle sobre su salud".
El Buddha entonces le dijo al venerable Maha Katyayana: "Katyayana, ve a donde el Licchavi
Vimalakirti para preguntar por su enfermedad".
Katyayana respondió: "Señor, de hecho estoy renuente a ir hacia aquel buen hombre a
preguntar por su enfermedad. Por que? Recuerdo un día cuando, después de que el Señor
hubiera dado alguna instrucción breve a los monjes, yo estaba definiendo las expresiones de
ese discurso por la enseñanza del significado de la impermanencia, el sufrimiento, la carencia
de yo, y la paz; el Licchavi Vimalakirti llegó allí y me dijo: "Reverendo Maha Katyayana, no
enseñes la realidad suprema adornada con actividad, producción, y destrucción! Reverendo
Maha Katyayana, nada ha sido jamás destruido, es destruido o será jamás destruido. Tal es el
significado de "impermanencia". El significado de la realización del no-nacimiento, a través de
la realización de la vaciedad de los cinco agregados, es el significado de "sufrimiento". El
hecho de la no dualidad del yo y la carencia del yo es el significado de "no yo". Eso que no
tiene sustancia intrínseca y ninguna otra clase de sustancia no se quema, y lo que no se
quema no es extinguido; tal falta de extinción es el significado de "paz".
"Cuando hubo discurrido así, las mentes de los monjes fueron liberadas de sus engaños y
entraron al estado de no aferramiento. Por esto, Señor, soy renuente a ir a ver a ese buen
hombre para preguntar por su enfermedad".
El Buddha entonces dijo al venerable Aniruddha: "Aniruddha, ve a ver al Licchavi Vimalakirti
para preguntar por su enfermedad".
"Mi Señor, de hecho estoy renuente a ir a ver al buen hombre para preguntar por su
enfermedad. Por qué? Recuerdo, Señor, un día cuando yo estaba dando un paseo, el gran
Brahma llamado Subhavyuha y los diez mil otros Brahmas que lo acompañaban iluminaron el
lugar con su radiación y, habiendo inclinado sus cabezas a mis pies, se retiraron a un lado y
me preguntaron: "Reverendo Aniruddha, has sido proclamado por el Buddha como el más
sobresaliente entre aquellos que poseen el ojo divino. A qué distancia la divina visión del
venerable Aniruddha se extiende? Yo respondí : "Amigos, yo veo el universo galáctico de
billones de mundos del Buddha Shakyamuni tan llanamente como un hombre de visión
ordinaria ve una nuez de myrobalan en la palma de su mano". Cuando terminé de decir esto, el
Licchavi Vimalakirti llegó allí y, habiendo inclinado su cabeza a mis pies, me dijo: "Reverendo
Aniruddha, está tu ojo divino no compuesto en naturaleza? Si es compuesto en naturaleza, es
el mismo que el súper conocimiento del heterodoxo. Si es no compuesto en naturaleza,
entonces no es construido, y, como tal, es incapaz de ver. Entonces, cómo ves, Oh anciano?"
"Al oír esas palabras, quedé sin habla, y Brahma también se sorprendió al escuchar esta
enseñanza de ese buen hombre. Habiéndose inclinado ante él, él dijo: "Quién, entonces, en el
mundo, posee el ojo divino?"
"Vimalakirti respondió: "en el mundo, son los Buddhas quienes tienen el ojo divino. Ellos ven
todos los campos de Buddha sin siquiera dejar su estado de concentración y sin ser afectados
por la dualidad".
"Habiendo oído estas palabras, los diez mil Brahmas estuvieron inspirados con gran resolución
y concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Habiendo rendido homenaje y
respetado tanto a mí como a ese buen hombre, ellos desaparecieron. En cuanto a mí,
permanecí sin habla, y por consiguiente estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para
preguntar por su enfermedad."
El Buddha entonces dijo al venerable Upali: "Upali, ve a ver al Licchavi Vimalakirti para
preguntar sobre su enfermedad".
Upali respondió: "Señor, de hecho estoy renuente a ir a ver a aquel gran hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Señor, recuerdo un día en que había dos monjes que
habían cometido alguna infracción y estaban muy avergonzados de aparecer ante el Señor, así
que vinieron hacia mí y dijeron: "Reverendo Upali, hemos cometido ambos una infracción pero
estamos muy avergonzados de aparecer ante el Buddha. Venerable Upali, gentilmente quita
nuestras ansiedades mediante absolvernos de esas infracciones."
"Señor, mientras estaba dando a aquellos monjes algún discurso religioso, el Licchavi
Vimalakirti llegó allí y me dijo: "Reverendo Upali, no agraves de más los pecados de estos dos
monjes. Sin dejarlos perplejos, alivia su remordimiento. Reverendo Upali, el pecado no es para
ser aprehendido dentro o fuera, o entre los dos. Por qué? El Buddha ha dicho: "Los seres vivos
están afligidos por las pasiones del pensamiento y ellos son purificados por la purificación del
pensamiento". "Reverendo Upali, la mente no está ni dentro ni fuera, ni es para ser
aprehendida entre los dos. El pecado es exactamente igual que la mente, y todas las cosas son
iguales al pecado. Ellas no escapan a esta misma realidad. Reverendo Upali, esta naturaleza
de la mente, por virtud de la cual tu mente, reverendo, es liberada- se vuelve afligida alguna
vez?
"Nunca", respondí.
"Reverendo Upali , las mentes de todos los seres vivos tienen todas la misma naturaleza.
Reverendo Upali, las pasiones consisten en conceptualizaciones. La suprema no existencia de
esas conceptualizaciones y fabricaciones imaginarias – esa es la pureza que es la naturaleza
intrínseca de la mente. Los malentendidos son pasiones. La suprema ausencia del
malentendido es la naturaleza intrínseca de la mente. La presunción del yo es pasión. La
ausencia del yo es la naturaleza intrínseca de la mente. Reverendo Upali, todas las cosas son
sin producción, destrucción, y duración, como ilusiones mágicas, nubes, y relámpago; todas las
cosas son evanescentes, no permaneciendo ni aun un instante; todas las cosas son como
sueños, alucinaciones, y visiones irreales; son como el reflejo de la luna en el agua y como una
imagen de espejo; son nacidas de la construcción mental. Aquellos que saben esto son
llamados los verdaderos sostenes de la disciplina, y aquellos disciplinados de ese modo son de
hecho bien disciplinados".
"Entonces los dos monjes dijeron: "este dueño de casa está extremadamente bien adornado
con sabiduría. El reverendo Upali, que fue proclamado por el Señor como el más sobresaliente
de los sostenedores de la disciplina, no es su igual".
Luego le dije a los dos monjes: " "No entretengan la noción de que hay un mero dueño de casa!
Por qué? Con la excepción del Tathagata mismo, no hay discípulo o bodhisattva capaz de
competir con su elocuencia o rivalizar con la brillantez de su sabiduría".
"En esto, los dos monjes, liberados de sus ansiedades e inspirados con gran resolución,
concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Inclinándose ante este buen hombre,
ellos hicieron el voto: "puedan todos los seres vivos obtener la elocuencia tal como esta!" Por
consiguiente, yo estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para preguntar por su
enfermedad".
El Buddha luego dijo al venerable Rahula: "Rahula, ve a ver al Licchavi Vimalakirti para
preguntar por su enfermedad".
Rahula respondió: "Señor, yo estoy de hecho renuente a ir a ver a ese buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Señor, recuerdo que un día varios jóvenes caballeros
Licchavi vinieron al lugar donde yo estaba y me dijeron: "Reverendo Rahula, tú eres el hijo del
Señor, y, habiendo renunciado al reino de un monarca universal, has abandonado el mundo.
Cuáles son las virtudes y beneficios que veías en vivir en el mundo?"
"Mientras yo les enseñaba apropiadamente los beneficios y virtudes de renunciar al mundo, el
Licchavi Vimalakirti llegó allí y, habiéndome saludado, dijo: "Reverendo Rahula, no deberías
enseñar los beneficios y virtudes en consideración al modo en que lo haces. Por qué? La
renunciación en sí misma es la misma ausencia de virtudes y beneficios. Reverendo Rahula,
uno puede hablar de los beneficios y virtudes con relación a las cosas compuestas, pero la
renunciación es no compuesta, y allí no puede haber asunto de beneficios y virtudes en
consideración a lo no-compuesto. Reverendo Rahula, la renunciación no es material sino que
es libre de materia. Es libre de los puntos de vista extremos de comienzo y fin. Es el camino de
la liberación. Es elogiada por el sabio, abrazada por los santos, y causa la derrota de todos los
Maras. Libera de los cinco estados de existencia, purifica los cinco ojos, cultiva los cinco
poderes, y apoya las cinco facultades espirituales. La renunciación es totalmente inofensiva
para los demás, y no es adulterada con cosas malas. Su disciplina es heterodoxa,
trascendiendo todas las denominaciones. Es el puente sobre el pantano del deseo, sin aferrar,
y libre de los hábitos de "yo" y "mío". Es sin apego y sin perturbación, eliminando toda
conmoción. Disciplina la mente de uno y protege las mentes de los demás. Favorece la
quiescencia mental y estimula el análisis trascendental. Es irreprochable en todos los aspectos
y por eso es llamada renunciación. Aquellos que dejan lo mundano de este modo son llamados
"verdaderos renunciantes". Jóvenes, renuncien al mundo en la luz de esta clara enseñanza! La
apariencia del Buddha es extremadamente rara. La vida humana adornada con ocio y
oportunidad es verdaderamente difícil de obtener. Ser un ser humano es muy precioso"
"Los jóvenes hombres se quejaron: "pero, dueño de casa, hemos oído que el Tathagata
declara que uno no debería renunciar al mundo sin el permiso de los padres".
Vimalakirti respondió: " Jóvenes hombres, ustedes deberían cultivarse a sí mismos
intensamente para concebir el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Esto en sí mismo debe
ser vuestra renunciación y alta ordenación!"
En eso, treinta y dos de los jóvenes Licchavis concibieron el espíritu de anuttara Samyak
Sambodhi.
"Por esto, Señor, estoy renuente a ir a ver al buen hombre para preguntar por su enfermedad."
El Buddha luego dijo al venerable Ananda: "Ananda, ve a ver al Licchavi Vimalakirti para
preguntar por su enfermedad".
Ananda respondió: "Señor, yo estoy de hecho renuente a ir a ver al buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Señor, recuerdo un día cuando el cuerpo del Señor
manifestó cierta indisposición y solicitó algo de leche; tomé el cuenco y fui a la puerta de la
mansión de la familia de un gran Brahman. El Licchavi Vimalakirti fue allí, y, habiéndome
saludado, dijo: "reverendo Ananda, qué estás haciendo en el umbral de esta casa con tu
cuenco en la mano tan temprano en la mañana?"
"Yo respondí: "el cuerpo del Señor manifiesta cierta indisposición. Y necesita algo de leche. Por
consiguiente, he venido a buscar un poco".
"Vimalakirti luego me dijo: "Reverendo Ananda, no digas tal cosa! Reverendo Ananda, el
cuerpo del Tathagata es fuerte como el diamante, habiendo eliminado todos los trazos
instintivos del mal y siendo adornado con todo el bien. Cómo podría la enfermedad o el
disconfort afectar a tal cuerpo? Reverendo Ananda, ve en silencio, y no menosprecies al Señor.
No digas tales cosas a los demás, no sería bueno para los dioses poderosos o para los
bodhisattvas venir desde los varios campos de Buddha para escuchar tales palabras.
"Reverendo Ananda, un monarca universal, que está adornado sólo con una pequeña raíz de
virtud, está libre de las enfermedades. Cómo podría luego el Señor, quien tiene una infinita raíz
de virtud, tener alguna enfermedad? Es imposible. Reverendo Ananda, no traigas vergüenza
ante nosotros, sino ve en silencio, no sea que los sectarios heterodoxos pudieran escuchar tus
palabras. Ellos dirían: "Qué vergüenza! El maestro de esta gente no puede ni siquiera curar su
propia enfermedad. Cómo podría entonces curar la enfermedad de otros?" Reverendo Ananda,
ve discretamente para que nadie pueda observarte. Reverendo Ananda, los Tathagatas tienen
el cuerpo del Dharma, no un cuerpo que se mantiene con la comida material. Los Tathagatas
tienen un cuerpo trascendental que ha trascendido todas las cualidades mundanas. No hay
enfermedad para el cuerpo de un Tathagata, ya que está libre de todo engaño. El cuerpo de un
Tathagata es no compuesto y libre de toda actividad formativa. Reverendo Ananda, creer que
puede haber enfermedad en semejante cuerpo es irracional e impropio!"
Cuando escuché estas palabras, me pregunté si yo había previamente escuchado mal y
malentendido al Buddha, y quedé muy avergonzado. Luego escuché una voz del cielo:
"Ananda! El dueño de casa te habla verdaderamente. No obstante, dado que el Buddha ha
aparecido durante el periodo de las cinco corrupciones, él disciplina a los seres vivos mediante
el actuar baja y humildemente. Por consiguiente, Ananda, no estés avergonzado, y ve a buscar
la leche!"
"Señor, tal fue mi conversación con el Licchavi Vimalakirti, y por consiguiente yo estoy renuente
de ir a ve a ese buen hombre para preguntar por su enfermedad".
Del mismo modo, el resto de los quinientos discípulos estaban renuentes de ir a ver al Licchavi
Vimalakirti, y cada uno le contó al Buddha su propia aventura, recordando todas sus
conversaciones con el Licchavi Vimalakirti.
*
4. La renuencia de los Bodhisattvas
Luego, El Buddha dijo al bodhisattva Maitreya: "Maitreya, ve a ver al Licchavi Vimalakirti para
preguntar por su enfermedad".
Maitreya respondió: "Señor, de hecho estoy renuente de ir a ver a ese buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Señor, recuerdo un día cuando yo estaba
comprometido en una conversación con los dioses de cielo de Tusita, el dios Samtusita y su
comitiva, acerca del estadio de no-regresión de los grandes bodhisattvas. En ese momento, el
Licchavi Vimalakirti fue allí y se dirigió a mí así:
"Maitreya, el Buddha ha profetizado que sólo un nacimiento más queda entre tu y Anuttara
Samyak Sambodhi. A qué clase de nacimiento se refiere esa profecía, Maitreya? Es del
pasado? Es futuro? O es presente? Si es el nacimiento pasado, ya ha terminado. Si es un
nacimiento futuro, nunca llegará. Si es un nacimiento presente, no tiene residencia. Porque el
Buddha ha declarado, "Bhikkhus, en un solo momento, son nacidos, envejecen, mueren,
transmigran y renacen". Entonces puede la profecía referirse a la cualidad de no nacimiento?
Pero la cualidad de no-nacimiento se aplica al estado del destino de lo supremo, que ni es
profecía ni perfecta iluminación. Por consiguiente, Maitreya, es tu realidad del nacimiento? O es
de la cesación? Tu realidad como fue profetizada no es nacida y no cesa, ni será nacida ni
cesará. Más aun, tu realidad es exactamente la misma que la realidad de todos los seres vivos,
la realidad de todas las cosas, y la realidad de todos los santos. Si tu iluminación puede ser
profetizada de tal modo, así puede serlo de todos los seres vivos. Por qué, porque la realidad
no consiste en dualidad o diversidad. Maitreya, cuandoquiera que alcances la Buddheidad, la
cual es la perfección de la iluminación, al mismo tiempo todos los seres vivos también
obtendrán suprema liberación. Por qué? Los Tathagatas no entran en la suprema liberación
hasta que todos los seres vivos hayan entrado en la liberación suprema. Porque, dado que
todos los seres vivos están completamente liberados, los Tathagatas los ven como teniendo la
naturaleza de la suprema liberación. Por consiguiente, Maitreya, no juegues y engañes a estas
deidades! Nadie reside en, o regresa de, la iluminación.
Maitreya, deberías introducir a estas deidades al repudio de todas las construcciones
discriminativas concernientes a la iluminación.
La iluminación es perfectamente realizada ni por el cuerpo ni por la mente. La iluminación está
libre de presunciones concernientes a todos los objetos. La iluminación es libre del
funcionamiento de todos los pensamientos intencionales. La iluminación es la aniquilación de
todas las convicciones. La iluminación es libre de todas las construcciones discriminativas. La
iluminación es libre de toda vacilación, mentación y agitación. La iluminación no está
comprometida en ningún compromiso. La iluminación es la llegada al desapego, a través de la
libertad de todas las actitudes habituales. El suelo de la iluminación es el reino supremo. La
iluminación es la realización de la realidad. La iluminación reside en el límite de la realidad. La
iluminación es sin dualidad, dado que allí no hay mente y no hay cosas. La iluminación es
igualdad, dado que es igual al espacio infinito. La iluminación es no construida, porque ni es
nacida ni destruida, ni reside ni soporta ninguna transformación. La iluminación es el completo
conocimiento de los pensamientos, los hechos y las inclinaciones de todos los seres vivos. La
iluminación no es una puerta para los seis medios sensoriales. La iluminación es inadulterada,
dado que es libre de las pasiones de las sucesiones de vidas llevadas instintivamente. La
iluminación no está en sitio alguno, residiendo en ningún lugar o dimensión. La iluminación, no
siendo contenida en nada, no permanece en la realidad. La iluminación es meramente un
nombre y aun ese nombre es inamovible. La iluminación, libre de la abstención y
emprendimiento, es sin energía. No hay agitación en la iluminación, dado que es
completamente pura por naturaleza. La iluminación es radiancia, pura en esencia. La
iluminación es sin subjetividad y completamente sin objeto. La iluminación, la cual penetra la
igualdad de todas las cosas, es indiferenciada. La iluminación, la cual no es mostrada por
ningún ejemplo, es incomparable. La iluminación es sutil, dado que es extremadamente de
realizar. La iluminación es omnipenetrante, dado que tiene la naturaleza del espacio infinito. La
iluminación no puede ser realizada, ni físicamente ni mentalmente. Por qué? El cuerpo es como
la hierba, los árboles, las paredes, los caminos, y las alucinaciones. Y la mente es inmaterial,
invisible, sin base e inconsciente."
"Señor, cuando Vimalakirti hubo discurrido así, doscientas de las deidades en esa asamblea
obtuvieron la tolerancia del no nacimiento. En cuanto a mí, Señor, quedé rendido sin palabras.
Por consiguiente, estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para preguntar por su
enfermedad."
El Buddha luego dijo al joven Licchavi Prabhavyuha: "Prabhavyuha, ve a ver al Licchavi
Vimalakirti para preguntar por su enfermedad".
Prabhavyuha respondió: "Señor, de hecho estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Señor, recuerdo un día, cuando yo estaba saliendo de
la gran ciudad de Vaisali, encontré al Licchavi Viamalkirti viniendo. Él me saludó, y luego le dije:
"Dueño de casa, de dónde vienes?" Él respondió: "Vengo del asiento de la iluminación". Luego
le pregunté: "Qué se entiende por asiento de la iluminación? Luego él me dijo las siguientes
palabras: "Noble hijo, el asiento de la iluminación es el asiento del pensamiento positivo porque
es sin artificialidad. Es el asiento del esfuerzo, porque libera actividades energéticas. Es el
asiento del la gran resolución, porque su visión interna es superior. Es el asiento del gran
espíritu de la iluminación, porque no descuida nada. Es el asiento de la generosidad, porque no
tiene expectativas de recompensa. Es el asiento de la moralidad, porque completa todos sus
compromisos. Es el asiento de la tolerancia, porque es libre de la ira hacia cualquier ser vivo.
Es el asiento del esfuerzo, porque no retrocede. Es el asiento de la meditación, porque genera
capacidad de la mente. Es el asiento de la sabiduría, porque ve todo directamente. Es el
asiento del amor, porque es igual para todos los seres vivos. Es el asiento de la compasión,
porque tolera todas las ofensas. Es el asiento del gozo, porque está gozosamente dedicada a
la la bendición del Dharma. Es el asiento de la ecuanimidad, porque abandona todo afecto y
aversión. Es el asiento de la percepción paranormal, porque tiene los seis superconocimientos.
Es el asiento de la liberación, porque no intelectualiza. Es el asiento de la técnica liberadora,
porque desarrolla a los seres vivos. Es el asiento de los medios de unificación, porque une a
los seres vivos. Es el asiento del aprendizaje, porque hace práctica de la esencia. Es el asiento
de la decisión, a causa de su precisa discriminación. Es el asiento de las ayudas de la
iluminación, porque elimina la dualidad de lo compuesto y lo no-compuesto. Es el asiento de la
verdad, porque no engaña a nadie. Es el asiento de la originación interdependiente, porque
procede de la extinción de la ignorancia hasta la extinción del envejecimiento y la muerte. Es el
asiento de la erradicación de todas las pasiones, porque es perfectamente iluminada acerca de
la naturaleza de la realidad. Es el asiento de todos los seres vivos, porque todos los seres vivos
son sin identidad intrínseca. Es el asiento de todas las cosas, porque es perfectamente
iluminada en consideración al vacío. Es el asiento de la conquista de todos los demonios,
porque nunca retrocede. Es el asiento del triple mundo, porque es libre de involucramiento. Es
el asiento del heroísmo que hace sonar el rugido del león, porque es libre de temor y
estremecimiento. Es el asiento de las fuerzas, las no temeridades, y todas las cualidades
especiales del Buddha, porque es irreprochable en todos los respectos. Es el asiento de los
tres conocimientos, porque en ella ninguna pasión permanece. Es el asiento del conocimiento
instantáneo, total, de todas las cosas, porque realiza plenamente la gnosis de la omnisciencia.
Noble hijo, cuando los bodhisattvas son así adornados con las trascendencias, las raíces de
virtud, la habilidad de desarrollar a los seres vivos, y la incorporación del santo Dharma, ya sea
que ellos eleven sus pies o los bajen, todos ellos vienen del asiento de la iluminación. Ellos
vienen de las cualidades del Buddha, y se yerguen en las cualidades del Buddha".
"Señor, cuando Vimalakirti hubo explicado esta enseñanza, quinientos dioses y hombres
concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi, y yo quedé sin palabras. Por
consiguiente, Señor, estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para preguntar por su
enfermedad".
El Buddha dijo luego al bodhisattva Jagatimdhara: "Jagatimdhara, ve a ver al Licchavi
Vimalakirti para preguntar por su enfermedad".
Jagatimdhara respondió: "Mi Señor, estoy de hecho renuente a ir a ver a ese buen hombre
para preguntar por su enfermedad. Por qué?. Señor, recuerdo un día, cuando yo estaba en
casa, el retorcido Mara, disfrazado de Indra y rodeado de doce mil damas celestiales, se
acercó a mí con los sonidos de la música y el canto. Habiéndome saludado tocando mis pies
con su cabeza, se retiró con su comitiva a un lado. Luego yo, pensando que él era Sakra, el rey
de los dioses, le dije: "Bienvenido, Oh Kausika! Deberías permanecer conscientemente
despierto en medio de los placeres del deseo. Deberías pensar frecuentemente sobre la
impermanencia y esforzarte por usar lo esencial en cuerpo, vida y riqueza".
Luego Mara me dijo: "Buen señor, acepta de mí estas doce mil damas divinas y hazlas tus
sirvientas". Yo respondí: "Oh Kausika, no me ofrezcas a mí, que soy religioso e hijo del Shakya,
cosas que no son apropiadas. No es propio para mí tener esas damas".
No había terminado de decir esas palabras cuando el Licchavi Vimalakirti llegó allí y me dijo:
"Noble hijo, no creas que este es Indra! No es Indra sino el maligno Mara, que ha venido a
ridiculizarte".
Luego el Licchavi Vimalakirti le dijo a Mara: "maligno Mara, ya que esas damas celestiales no
son adecuadas para este devoto religioso, un hijo del Shakya, dámelas a mí".
"Entonces Mara fue aterrorizado y presionado, pensando que el Licchavi Vimalakirti había
venido a exponerlo. Él intentó hacerse invisible, pero intentando como él podía con todos sus
poderes mágicos, no pudo desvanecerse de la vista. Entonces una voz resonó en el cielo,
diciendo: "Maligno, dale estas damas celestiales al buen hombre Vimalakirti, y sólo entonces
serás capaz de regresar a tu propio reino".
"Entonces Mara estuvo aun más atemorizado y, muy contra su voluntad, le dio las damas
celestiales. El Licchavi Vimalakirti recibió a las diosas, y les dijo: "Ahora que me han sido dadas
a mí por Mara, deberían todas concebir el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi".
Luego él las exhortó con un discurso adecuado para su desarrollo hacia la iluminación, y pronto
ellas concibieron el espíritu de iluminación. Luego él les dijo: "Ustedes acaban de concebir el
espíritu de la iluminación. Desde ahora en adelante, deberían dedicarse a encontrar gozo en
los placeres del Dharma, y no deberían tomar ningún placer en los deseos".
Luego ellas le preguntaron: "Qué es gozo en los placeres del Dharma?"
Él declaró: "Es el gozo de la inquebrantable fe en el Buddha, de desear escuchar el Dharma,
de servir a la Sangha y de honrar a los benefactores espirituales sin orgullo. Es el gozo de la
renunciación de la totalidad del mundo, de no estar fijado en los objetos, de considerar los
cinco agregados como asesinos, de considerar a los elementos como serpientes venenosas, y
de considerar a los sentidos como si fueran una ciudad vacía. Es el gozo de guardar siempre el
espíritu de la iluminación, de ayudar a los seres vivos, de compartir a través de la generosidad,
de no disminuir en moralidad, de control y tolerancia en paciencia, del cultivo completo de la
virtud por el esfuerzo, de la total absorción en la meditación, y de la ausencia de las pasiones
en la sabiduría. Es el gozo de extender la iluminación, de conquistar a los Maras, de destruir
las pasiones, y de purificar el campo de Buddha. Es el gozo de acumular todas las virtudes,
para cultivar las marcas y signos auspiciosos. Es el gozo de la liberación de la no intimidación
cuando se escucha la profunda enseñanza. Es el gozo de la exploración de las tres puertas de
la liberación, y de la realización de la liberación. Es el gozo de ser un adorno del asiento de la
iluminación, y de no obtener la liberación en el momento equivocado. Es el gozo de servir a
aquellos de igual fortuna, de no odiar o resentirse con aquellos de fortuna superior, de servir a
los benefactores espirituales, y de evitar a los amigos pecaminosos. Es el gozo de la alegría
superior de la fe y la devoción hacia el Dharma. Es el gozo de adquirir las técnicas liberadoras
y de la cultivación consciente de las ayudas a la iluminación. Así, el bodhisattva admira y
encuentra gozo en las delicias del Dharma".
En eso, Mara les dijo a las diosas: "ahora vengan y regresemos a casa".
Ellas dijeron: "nos diste al dueño de casa. Ahora deberíamos gozar las delicias del Dharma y
no deberíamos gozar más los placeres de los deseos".
Entonces Mara dijo al Licchavi Vimalakirti: "Si es así que el bodhisattva, el héroe espiritual, no
tiene apego mental, y regala todas sus posesiones, entonces, dueño de casa, por favor dame a
estas diosas".
Vimalakirti respondió: "ellas son dadas, Mara. Ve a casa con tu comitiva. Puedan ustedes llenar
las aspiraciones religiosas de todos los seres vivos!"
Entonces las diosas, saludando a Vimalakirti, le dijeron: "Dueño de casa, cómo deberíamos
vivir en el reino de los Maras?"
Vimalakirti respondió: "hermanas, hay una puerta del Dharma llamada "La lámpara inagotable"
. Practíquenla! Qué es eso? Hermanas, una sola lámpara puede encender cientos de miles de
lámparas sin disminuir en sí misma. Así, hermanas, un solo bodhisattva puede establecer
varios cientos de miles de seres vivos en la iluminación sin que su plenitud mental sea
disminuida. De hecho, no sólo no disminuye, crece más fuerte. Así, cuanto más enseñas y
demuestras cualidades virtuosas a los demás, más creces con respecto a esas cualidades
virtuosas. Esta es la puerta del Dharma llamada "La lámpara inagotable". Cuando estén
viviendo en el reino del Dharma, inspiren a innumerables dioses y diosas con el espíritu de la
iluminación. De tal modo, ustedes devolverán la bondad del Tathagata, y se volverán los
benefactores de todos los seres vivos".
Entonces, aquellas diosas se inclinaron a los pies del Licchavi Viamalakirti y partieron en
compañía de Mara.
Así, Señor, vi la supremacía del poder mágico, sabiduría y elocuencia del Licchavi Vimalakirti, y
por consiguiente estoy renuente a ir a ver a ese buen hombre para preguntar por su
enfermedad".
El Buddha luego dijo al hijo del mercader, Sudatta: "Noble hijo, ve a ver al Licchavi Vimalakirti
para preguntar por su enfermedad".
Sudatta resondió, "Señor, de hecho estoy renuente a ir a ver a aquel buen hombre para
preguntar por su enfermedad. Por qué? Recuerdo, Señor, un día en la casa de mi padre
cuando, para celebrar un gran sacrificio, yo estaba otorgando regalos a los devotos religiosos,
Brahmas, los pobres, los infelices, los desafortunados, mendigos, y todos los necesitados. En
el séptimo día, final, de ese gran sacrificio, el Licchavi Vimalakirti llegó allí y dijo: "Hijo del
mercader, tu no deberías celebrar un sacrificio de este modo. Deberías celebrar un sacrificio
Dharma. Cuál es la utilidad del sacrificio de las cosas materiales?"
Luego yo le pregunté: "Cómo ofrece uno un sacrificio Dharma?"
Él respondió: "Un sacrificio Dharma es aquel que desarrolla a los seres vivos sin comienzo ni
fin, dándoles regalos a todos ellos simultáneamente. Qué es eso? Consiste en el gran amor
que es consumado en la iluminación; de la gran compasión que es consumada en la
concentración del santo Dharma en la liberación de todos los seres vivos; del gran gozo que es
consumado en la consciencia de la suprema felicidad de todos los seres vivos; y de la gran
ecuanimidad que es consumada en la concentración a través del conocimiento. El sacrificio
Dharma consiste en la trascendencia de la generosidad, que es consumada en la apacibilidad y
auto disciplina; en la trascendencia de la moralidad, que es consumada en el desarrollo moral
de los seres inmorales; en la trascendencia de la tolerancia, consumada a través del principio
de la carencia de yo; en la trascendencia del esfuerzo, consumado en la iniciativa hacia la
iluminación; en la trascendencia de la meditación, consumada en la gnosis omnisciente. El
sacrificio Dharma consiste en la meditación de la vaciedad, consumada en la efectividad en el
desarrollo de todos los seres vivos; en la meditación de la carencia de signos, consumada en la
purificación de todas las cosas compuestas; y en la meditación de la carencia del deseo,
consumada en la voluntaria asunción de los renacimientos. El sacrifico Dharma consiste en el
poder heroico, consumado en el sostenimiento del santo Dharma; en el poder de la vida,
consumado en los medios de unificación; en la ausencia de orgullo, consumada en volverse
esclavo y discípulo de todos los seres vivos; en la ganancia del cuerpo, salud y riqueza,
consumada por la extracción de la esencia desde la carencia de esencia; en la plenitud mental,
consumada por los seis recuerdos; en el pensamiento positivo, consumado a través del
verdaderamente disfrutable Dharma; en la pureza del medio de vida, consumada por la práctica
espiritual correcta; en el respeto de los santos, consumado por el servicio gozoso y leal; en la
soberanía de la mente, consumada por la ausencia de disgusto hacia la gente ordinaria; en
gran resolución, consumada por la renunciación; en la habilidad de la erudición, consumada
por la práctica religiosa; en el retiro a solitarios retiros, consumado por la comprensión de las
cosas libre de pasiones; en la meditación introspectiva, consumada por la obtención de la
gnosis de Buddha; en el estado de la práctica del yoga, consumado por el yoga de liberar a
todos los seres de sus pasiones. El sacrificio Dharma consiste en la acumulación de mérito que
es consumado por los signos y marcas auspiciosos, los ornamentos de los campos de Buddha,
y todos los otros medios de desarrollo de los seres vivos; de la acumulación de conocimiento
que es consumado en la habilidad de enseñar el Dharma de acuerdo a los pensamientos y
acciones de todos los seres vivos; de la acumulación de sabiduría, que es consumada en la
gnosis uniforme libre de la aceptación y el rechazo en consideración a todas las cosas; de la
acumulación de todas las raíces de virtud, consumadas en el abandono de todas las pasiones,
oscuridades, y cosas no virtuosas; y en la obtención de todas las ayudas de la iluminación,
consumada en la realización de la gnosis de omnisciencia así como de la consecución de toda
virtud.
"Ese, noble hijo, es el sacrificio Dharma. El bodhisattva que vive por estos sacrificios Dharma
es el mejor de los sacrificios, y, a través de un sacrificio extremo, él mismo es merecedor de
ofrendas de toda la gente, incluidos los dioses".
"Señor, tan pronto como el dueño de casa hubo discurrido así, doscientos Brahmanes entre la
multitud de Brahmanes presentes concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Y,
lleno de asombro, habiendo saludado a este dios hombre tocando sus pies con mi cabeza,
tomé un collar de perlas de mi cuello que vale cien mil piezas de oro y se lo ofrecí a él. Pero él
no lo aceptaría. Luego le dije: "Por favor acepte, buen hombre, este collar de perlas, lleno de
compasión por mí, y déselo a quienquiera que usted desee".
Entonces, Vimalakirti tomó las perlas y las dividió en dos mitades. Él dio una mitad de ellas al
pobre más pobre de la ciudad, quien había sido desdeñado por aquellos presentes en el
sacrificio. La otra mitad se la ofreció al Tathagata Dusprasaha. Y él realizó un milagro tal que
todos los presentes contemplaron el universo llamado Marici y al Tathagata Dusprasaha. Sobre
la cabeza del Tathagata Dusprasaha, el collar de perlas tomó la forma de un pabellón,
decorado con cuerdas de perlas, descansando sobre cuatro bases, con cuatro columnas,
simétricas, bien construidas, y encantadoras para contemplar. Habiendo mostrado tal milagro,
Vimalakirti dijo: " el dador que hace regalos a los más pobres de la ciudad, considerándolos tan
merecedores de ofrenda como al Tathagata en sí mismo, el dador que da sin ninguna
discriminación, imparcialmente, sin esperar recompensa, y con gran amor – ese dador, yo digo,
completa totalmente el sacrificio Dharma"
Luego el pobre de la ciudad, habiendo visto aquel milagro y habiendo escuchado aquellas
enseñanzas, concibió el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Por consiguiente, Señor,
estoy renuente de ir a ver a ese buen hombre para preguntar por su enfermedad".
Del mismo modo, todos los bodhisattvas, grandes héroes espirituales, contaron las historias de
sus conversaciones con Vimalakirti y declararon su renuencia a ir a verlo.
*
5. La consolidación del inválido
Entonces el Buddha dijo al príncipe coronado, Manjusri: "Manjusri, ve a ver al Licchavi
Vimalakirti para preguntar sobre su enfermedad".
Manjusri respondió: "Señor, es difícil asistir al Licchavi Vimalakirti. Él está dotado de elocuencia
maravillosa concerniente a la ley de lo profundo. Él es extremadamente hábil en expresiones
plenas y en la reconciliación de las dicotomías. Su elocuencia es inexorable, y nadie puede
resistir su intelecto imperturbable. Él cumple todas las tareas de los bodhisattvas. Él penetra
todos los secretos misterios de los bodhisattvas y de los Budas. Él es hábil en civilizar todos los
reinos de los demonios. Él actúa con el súper conocimiento. Él está consumado en sabiduría y
en técnicas liberadoras. Él ha obtenido la suprema excelencia de la indivisible, no dual esfera
del reino supremo. Él es hábil en enseñar el Dharma con sus infinitas modalidades dentro del
uniforme supremo. Él es hábil en conceder los medios de obtención de acuerdo a las
facultades espirituales de todos los seres vivos. Él ha integrado enteramente su realización con
habilidad en técnica liberadora. Él ha obtenido la decisión en consideración a todas las
preguntas. Así, si bien él no puede ser resistido por alguna de mis débiles defensas, aun,
sostenido por la gracia del Buddha, iré a verlo y conversaré con él tanto como pueda."
En esto, en aquella asamblea, los bodhisattvas, los grandes discípulos, los Sakras, los
Brahmas, los Lokapalas, y los dioses y diosas, todos tuvieron este pensamiento: "Seguramente
las conversaciones del joven príncipe Manjusri y aquel gran hombre resultarán en una profunda
enseñanza del Dharma."
Así, ocho mil bodhisattvas, quinientos discípulos, un gran número de Sakras, Bramas,
Lokapalas, dioses y diosas, entraron a la gran ciudad de Vaisali.
Mientras tanto, el Licchavi Vimalakirti pensó para sí mismo: "Manjusri, el príncipe coronado,
está viniendo aquí con numerosos asistentes. Ahora, que pueda esta casa ser transformada en
vaciedad!"
Entonces, mágicamente su casa se volvió vacía. Incluso el portero desapareció. Y, excepto por
el diván de inválido sobre el cual Vimalakirti yacía, ninguna cama o sillón o asiento podía ser
visto en ningún lado.
Entonces, el Licchavi Vimalakirti vio al príncipe coronado Manjusri y se dirigió a él así:
"Manjusri! Bienvenido, Manjusri! Eres verdaderamente bienvenido! Allí estás, sin ningún venir.
Apareces, sin nadie viendo. Eres escuchado, sin ninguno que escuche".
Manjusi declaró: "Dueño de casa, es como dices. Quien viene, finalmente no viene. Quien se
va, finalmente no se va. Por qué? Quien viene no es conocido por venir. Quien va no es
conocido por irse. Quien aparece finalmente no es visto. Buen señor, es tu condición tolerable?
Es llevadera? Están tus elementos físicos no perturbados? Está tu enfermedad disminuyendo?
No se está incrementando? El Buddha pregunta por ti – si tienes el menor problema, pequeña
incomodidad, ligera enfermedad, si tu aflicción es liviana, si te cuidas, estás fuerte, suelto, sin
auto reproche, y si estás viviendo en contacto con la felicidad suprema. Dueño de casa, de
donde viene esta enfermedad tuya? Cuánto tiempo continuará? Cómo se soporta? Cómo
puede ser aliviada?"
Vimalakirti respondió: "Manjusri, mi enfermedad proviene de la ignorancia y de la sed de
existencia, y durará tanto como duren las enfermedades de todos los seres vivos. Si todos los
seres vivos fueran a ser liberados de la enfermedad, yo también podría no estar enfermo. Por
qué? Manjusri, para el bodhisattva, el mundo consiste sólo en seres vivos, y la enfermedad es
inherente a vivir en el mundo. Si todos los seres vivos fueran liberados de la enfermedad, el
bodhisattva también sería libre de la enfermedad. Por ejemplo, Manjusri, cuando el único hijo
del mercader está enfermo, ambos padres se ponen enfermos con motivo de la enfermedad de
su hijo. Y los padres sufrirán hasta que el hijo único no se recupere e su enfermedad.
Exactamente así, Manjusri, el bodhisattva ama a todos los seres vivos como si cada uno fuera
su único hijo. Él se enferma cuando ellos están enfermos y se cura cuando ellos son curados.
Me preguntas, Manjusri, de dónde viene mi enfermedad; la enfermedad de los bodhisattvas
surge de la gran compasión".
Manjusri: Dueño de casa, por qué está vacía tu casa? Por qué no tienes sirvientes?
Vimalakirti: Manjusri, todos los campos de Buddha son así vacíos.
Manjusri: qué los hace vacíos?
Vimalakirti: son vacíos a causa de la vaciedad.
Manjusri: qué es "vacío" acerca de la vaciedad?
Vimalakirti: las construcciones son vacías, a causa de la vaciedad.
Manjusri: puede la vaciedad ser conceptualmente construida?
Vimalakirti: aun el concepto es en sí mismo vacío, y la vaciedad no puede construir vaciedad.
Manjusri: dueño de casa, dónde debería ser buscada la vaciedad?
Vimalakirti: Manjusri, la vaciedad debería ser buscada entre las sesenta y dos convicciones.
Manjusri: dónde deberían ser buscadas las sesenta y dos convicciones?
Vimalakirti: ellas deberían ser buscadas en la liberación de los Tathagatas.
Manjusri: dónde debería ser buscada la liberación de los Tathagatas?
Vimalakirti: debería ser buscada en la actividad mental primaria de todos los seres vivos.
Manjusri, me preguntas por qué estoy sin sirvientes, pero todos los Maras y oponentes son mis
sirvientes. Por qué? Los Maras abogan por esta vida de nacimiento y muerte y el bodhisattva
no evita la vida. Los oponentes heterodoxos abogan por las convicciones, y el bodhisattva no
es agobiado por las convicciones. Por consiguiente, todos los Maras y oponentes son mis
sirvientes.
Manjusri: dueño de casa, de qué tipo es tu enfermedad.
Vimalakirti: es inmaterial e invisible.
Manjusri: es física o mental?
Vimalakirti: no es física, dado que el cuerpo es insustancial en sí mismo. No es mental, dado
que la naturaleza de la mente es como ilusión.
Manjusri: dueño de casa, cuál de los cuatro elementos está perturbado? Tierra, agua, aire o
fuego?
Vimalakirti: Manjusri, estoy enfermo sólo porque los elementos de los seres vivos están
perturbados por enfermedades.
Manjusri: dueño de casa, cómo debería un bodhisattva consolar a otro bodhisattva que está
enfermo?
Vimalakirti: él debería decirle que el cuerpo es impermanente, pero no debería exhortarlo a la
renunciación o disgusto. Él debería decirle que el cuerpo es miserable, pero no debería
alentarlo a encontrar solaz en la liberación; que el cuerpo es sin yo, pero que los seres vivos
deberían ser desarrollados; que el cuerpo es apacible, pero no buscar ninguna calma suprema.
Él debería urgirlo a confesar sus malos actos, pero no por el bien de la absolución. Él debería
alentar su empatía por todos los seres vivos a cuenta de su propia enfermedad, su recuerdo
del sufrimiento experimentado desde el tiempo sin comienzo, y su conciencia de trabajar por el
bienestar de los seres vivos. Él debería alentarlo a no estar angustiado, sino a manifestar las
raíces de virtud, para mantener la pureza primaria y la falta de aferramiento, y así para siempre
luchar para convertirse en el rey de los sanadores, quien puede curar toda enfermedad. Así
debería un bodhisattva consolar a un bodhisattva enfermo, de tal modo como para hacerlo feliz.
Manjusri preguntó: "Noble señor, cómo debería un bodhisattva enfermo controlar su propia
mente?"
Vimalakirti respondió: "Manjusri, un bodhisattva enfermo debería controlar su propia mente con
la siguiente consideración: la enfermedad surge del involucramiento total en el proceso de
malentendido desde el tiempo sin principio. Surge de las pasiones que resultan de
construcciones mentales irreales, y por lo tanto finalmente nada es percibido de lo que pueda
decirse que está enfermo. Por qué? El cuerpo es el resultado de los cuatro elementos
principales, y en esos elementos no hay propietario ni agente. No hay yo en este cuerpo, y
excepto por la insistencia arbitraria en el yo, finalmente ningún "yo" del cual pueda decirse
estar enfermo puede ser aprehendido. Por lo tanto, el "yo" pensante no debería adherirse a
ningún yo, y el "yo" debería descansar en el conocimiento dela raíz de la enfermedad, él
debería abandonar la concepción de sí mismo como una personalidad y producir la concepción
de sí mismo como una cosa, pensando:"este cuerpo es un agregado de varias cosas; cuando
nace, sólo cosas son nacidas; cuando cesa, sólo cosas cesan; estas cosas no tienen
conciencia o sensación de cada una; cuando ellas nacen, no piensan "estoy naciendo".
Cuando cesan, no piensan "yo ceso". Más aun, él debería comprender plenamente la
concepción de sí mismo como una cosa por la cultivación de la siguiente consideración: "así
como en el caso de la concepción de "yo", así la concepción de "cosa" es también un
malentendido, y este malentendido es también una enfermedad grave; debería liberarme de
esta enfermedad y debería luchar para abandonarla."
"Cuál es la eliminación de esta enfermedad? Es la eliminación del egoísmo y la posesividad.
Cuál es la eliminación del egoísmo y la posesividad? Es la libertad del dualismo. Cuál es la
liberación del dualismo? Es la ausencia del involucramiento ya sea con lo externo como con lo
interno. Cuál es la ausencia del involucramiento con lo externo así como con lo interno? Es la
no-desviación, no-fluctuación, y no-distracción de la ecuanimidad. Qué es la ecuanimidad? Es
la igualdad de todo desde el yo hasta la liberación. Por qué? Porque tanto el yo como la
liberación son vacíos. Cómo pueden ser vacíos? Como designaciones verbales, ellos dos son
vacíos, y ninguno está establecido en la realidad. Por tanto, uno que ve tal igualdad no hace
diferencia entre enfermedad y vaciedad; su enfermedad es en sí misma vaciedad, y esa
enfermedad como vaciedad es en sí misma vacía.
El bodhisattva enfermo debería reconocer que sensación es definitivamente no-sensación, pero
él no debería realizar la cesación de la sensación. Si bien ambos, placer y dolor, son
abandonados cuando las cualidades de Buddha son plenamente completadas, no hay
entonces sacrificio de la gran compasión por todos los seres vivos viviendo en las malas
migraciones. Así, reconociendo en su propio sufrimiento los infinitos sufrimientos de esos seres
vivos, el bodhisattva contempla correctamente a esos seres vivos y resuelve curar toda
enfermedad. Como para esos seres vivos, no hay nada a ser aplicado, y no hay nada para ser
quitado; uno sólo tiene que enseñarles el Dharma a ellos para que realicen las bases de las
cuales surge la enfermedad. Cuáles son esas bases? Es la percepción del objeto. Tan pronto
como los objetos son percibidos, ellos son la base de la enfermedad. Qué cosas son percibidas
como objetos? Los tres reinos de la existencia son percibidos como objetos. Cuál es la
comprensión completa del objeto básico aparente? Es la no-percepción, ya que ningún objeto
existe finalmente. Qué es la no-percepción? El sujeto interno y el objeto externo no son
percibidos dualísticamente. Por lo tanto, es llamada no-percepción. Manjusri, así debería un
bodhisattva enfermo controlar su propia mente para vencer la vejez, la enfermedad, la muerte y
el nacimiento. Tal, Manjusri, es la enfermedad del bodhisattva. Si la toma de otro modo, todos
sus esfuerzos serán en vano. Por ejemplo, uno es llamado "héroe" cuando uno conquista las
miserias del envejecer, enfermar y morir. El bodhisattva enfermo debe decirse a sí mismo: " así
como mi enfermedad es irreal y no existente, así la enfermedad de todos los seres vivos es
irreal y no existente". A través de tales consideraciones, él hace surgir la gran compasión hacia
todos los seres vivos sin caer en ninguna compasión sentimental. La gran compasión que
intenta eliminar las pasiones accidentales no concibe ninguna vida en los seres vivos. Por qué?
Porque la gran compasión que cae en puntos de vista de propósitos sentimentales sólo agota
al bodhisattva en sus reencarnaciones. Pero la gran compasión, que es libre de estar
involucrada con los puntos de vista de propósitos sentimentales, no agota al bodhisattva en
todas sus reencarnaciones. Él no reencarna a través del involucrarse con tales puntos de vista
sino que reencarna con su mente libre de involucrarse. Por tanto, aun su reencarnación es
como la liberación. Siendo reencarnado como si fuera liberado, él tiene el poder y la habilidad
de enseñar el Dharma, el cual libera a los seres vivos de sus ataduras. Como el Señor declara:
"no es posible para uno que está atado él mismo liberar a otros de sus ataduras. Pero uno que
está liberado es capaz de liberar a otros e sus ataduras". Por consiguiente, el bodhisattva
debería participar en la liberación y no debería participar de las ataduras. Qué es atadura? Y
qué es liberación? Ser indulgente en liberación del mundo sin emplear la técnica de liberación
es atadura para el bodhisattva. Engancharse en la vida del mundo con pleno empleo de técnica
de liberación es liberación para el bodhisattva. Experimentar el sabor de la contemplación,
meditación, y concentración sin habilidad en técnica liberadora es atadura. Experimentar el
sabor de la contemplación y meditación con habilidad en técnica liberadora es liberación. La
sabiduría no integrada con la técnica liberadora es atadura, pero sabiduría integrada con la
técnica liberadora es liberación. La técnica liberadora no integrada con sabiduría es atadura,
pero técnica liberadora integrada con sabiduría es liberación. Cómo es que la sabiduría no
integrada con la técnica liberadora es una atadura? La sabiduría no integrada con la técnica
liberadora consiste en concentración sobre la vaciedad, la carencia de marca, y la carencia de
deseo, y aun, siendo motivado por la compasión sentimental, el fracaso en concentrarse en la
cultivación de los signos y marcas auspiciosos, en el adornamiento del campo de Buddha y en
el trabajo de desarrollo de todos los seres vivos es atadura. Cómo es que la sabiduría
integrada con la técnica liberadora es liberación? La sabiduría integrada con la técnica
liberadora consiste en ser motivado por la gran compasión y así la concentración sobre la
cultivación de las marcas y signos auspiciosos, en el adornamiento del campo de Buddha, y en
el trabajo de desarrollo de los seres vivos, todo el tiempo concentrado en la profunda
investigación de la vaciedad, carencia de signos y carencia de deseos, - y eso es liberación.
Qué es la atadura de la técnica liberadora no integrada con la sabiduría? La atadura de la
técnica liberadora no integrada con la sabiduría consiste en la plantación de bodhisattva de
raíces de virtud sin dedicarlas al bien de la iluminación, mientras vive aferrado a las
convicciones dogmáticas, pasiones, apegos, resentimientos, y sus instintos subconscientes.
Qué es la liberación de la técnica liberadora integrada con la sabiduría? La liberación de la
técnica liberadora integrada con la sabiduría consiste en la dedicación de los bodhisattvas de
sus raíces de virtud al bien de la iluminación, sin tomar ningún orgullo de ello, mientras se
desprende de toda convicción, pasión, apego, resentimiento, y sus instintos subconscientes.
Manjusri, así debería el bodhisattva enfermo considerar las cosas. Su sabiduría es la
consideración del cuerpo, mente y enfermedad como impermanentes, miserables, vacíos, y sin
yo. Su técnica liberadora consiste en no agotarse a sí mismo por intentar evitar todas las
enfermedades físicas, y en aplicarse a sí mismo al completamiento del beneficio de los seres
vivos, sin interrumpir el ciclo de reencarnaciones. Más aun, su sabiduría yace en la
comprensión de que el cuerpo, la mente y la enfermedad no son ni nuevas ni viejas, al mismo
tiempo simultáneas y secuenciales. Y su técnica liberadora yace en no buscar la cesación del
cuerpo, la mente o la enfermedad. Esta es, Manjusri, la forma en que el bodhisattva debe
concentrar su mente; él debe vivir ni en control de su mente, ni en indulgencia de su mente. Por
qué? Vivir en la indulgencia de la mente es propio de tontos y vivir en control de la mente es
propio de los discípulos. Por tanto, el bodhisattva debe vivir ni en control ni en indulgencia de
su mente. No viviendo en ninguno de los dos extremos es el dominio del bodhisattva. No el
domino del individuo ordinario y no el dominio del santo, tal es el dominio del bodhisattva. El
dominio del mundo sin embargo no el dominio de las pasiones, tal es el dominio del
bodhisattva. Donde uno comprende la liberación, aun no entra en la liberación final y completa,
allí es el dominio del bodhisattva. Donde los cuatro Maras se manifiestan, aun donde todos los
trabajos de Mara son trascendidos, allí es el dominio del bodhisattva. Donde uno busca la
gnosis de la omnisciencia, aun no alcanza esas gnosis en el momento equivocado, allí es el
dominio del bodhisattva. Donde uno conoce las Cuatro Verdades Santas, aun no realiza esas
verdades en el momento equivocado, allí es el dominio del bodhisattva. Un dominio de
comprensión introspectiva, en el cual uno no detiene la reencarnación voluntaria en el mundo,
tal es el dominio del bodhisattva. Un dominio donde uno realiza el no-nacimiento, y aun no se
vuelve destinado a lo supremo, tal es el dominio del bodhisattva. Donde uno ve la relatividad
sin entretener ninguna convicción, allí es el dominio del bodhisattva. Donde uno se asocia con
todos los seres, y aun se mantiene libre de todos los instintos aflictivos, allí es el dominio del
bodhisattva. Un dominio de soledad sin lugar para la extinción del cuerpo y la mente, tal es el
dominio del bodhisattva. El dominio del triple mundo, aun indivisible del reino supremo, tal es el
dominio del bodhisattva. El dominio de vaciedad, aun uno cultiva todo tipo de virtudes, tal es el
dominio del bodhisattva. El dominio de la carencia de signos, donde uno se mantiene en
búsqueda de la liberación de todos los seres vivos, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio
del no deseo, donde uno voluntariamente manifiesta las vidas en el mundo, tal es el dominio
del bodhisattva. Un dominio esencialmente sin emprendimiento, aun donde todas las raíces de
virtud son emprendidas sin interrupción, tal es el dominio del bodhhisattva. El dominio de las
seis trascendencias, donde uno alcanza la trascendencia de pensamientos y acciones de todos
los seres vivos, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de los seis súper conocimientos,
donde las ilusiones no son agotadas, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de vivir por el
santo Dharma, sin siquiera percibir ningún camino malo, tal es el dominio del bodhisattva. El
dominio de los cuatro inconmensurables, donde uno no acepta renacer en el cielo de Brama,
tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de las seis recordaciones, inafectadas por ninguna
clase de engaño, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de la contemplación, meditación,
y concentración, donde uno no reencarna en los reinos sin forma por la fuerza de esas
meditaciones y concentraciones, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de los cuatro
esfuerzos correctos, donde la dualidad de bien y mal no es aprehendida, tal es dominio del
bodhisattva. El dominio de las cuatro bases de los poderes mágicos, donde ellos son
amaestrados sin esfuerzo, tal es el dominio el bodhisattva. El dominio de las cinco facultades
espirituales, donde uno conoce los grados de las facultades espirituales de los seres vivos, tal
es el dominio del bodhisattva. El dominio de vivir con los cinco poderes, donde uno se deleita
en los diez poderes del Tathagata, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de la perfección
de los siete factores de iluminación, donde uno es hábil en el conocimiento de las distinciones
intelectuales finas, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio del Santo Óctuple camino,
donde uno de deleita en el ilimitado camino del Buddha, tal es el dominio del bodhisattva. El
dominio de la cultivación de la aptitud para la quiescencia mental y el análisis trascendental,
donde uno no cae en el quietismo extremo, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de la
realización de la naturaleza no nacida de todas las cosas, aun de la perfección del cuerpo, los
signos y marcas auspiciosas, y los ornamentos del Buddha, tal es el dominio del bodhisattva. El
dominio de manifestar las actitudes de los discípulos y los sabios solitarios sin sacrificar las
cualidades del Buddha, tal es el dominio del bodhisattva. El dominio de conformidad para todas
las cosas expresamente puras en naturaleza mientras se manifiesta el comportamiento que se
ajusta a las inclinaciones de todos los seres vivos, tal es el dominio del bodhisattva. Un dominio
donde uno realiza que todos los campos de Buddha son indestructibles y no creables, teniendo
la naturaleza del espacio infinito, aun donde uno manifiesta el establecimiento de las
cualidades de los campos de Buddha en toda su variedad y magnitud, tal es el dominio del
bodhisattva. El dominio donde uno hace girar la rueda del santo Dharma y manifiesta la
magnificencia de la suprema liberación, aun nunca descuidando la carrera del bodhisattva, tal
es el dominio del bodhisattva!"
Cuando Vimalakirti hubo hablado este discurso, ocho mil de los dioses en compañía del
príncipe coronado Manjusri concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi.
*
6. La Liberación Inconcebible
En esto, el venerable Shariputra tuvo este pensamiento: "No hay ni siquiera una sola silla en
esta casa. Dónde irán a sentarse estos discípulos y bodhisattvas?"
El Licchavi Vimalakirti leyó el pensamiento del venerable Shariputra y dijo: "reverendo
Shariputra, vino usted por el bien del Dharma? O vino por el bien de una silla?"
Shariputra respondió: "Vine por el bien del Dharma, no por el bien de una silla".
Vimalakirti continuó: "Reverendo Shariputra, aquel que está interesado en el Dharma no está
interesado ni siquiera en su propio cuerpo, mucho menos en una silla. Reverendo Shariputra,
aquel que está interesado en el Dharma no tiene interés en la forma, sensación, intelecto,
motivación o conciencia. Él no tiene interés en esos agregados, o en los elementos, o en los
sentidos. Interesado en el Dharma, él no tiene interés en el reino del deseo, el reino de la
forma, o el reino inmaterial. Interesado en el Dharma, él no tiene interés en el apego al Buddha,
apego al Dharma, o apego a la Sangha. Reverendo Shariputra, aquel que está interesado en el
Dharma no está interesado en reconocer el sufrimiento, abandonar su origen, comprender su
cesación, o practicar el camino. Por qué? El Dharma es finalmente sin formulación ni
verbalización. Quien verbaliza: "el sufrimiento debe ser reconocido, la originación debe ser
eliminada, la cesación debe ser comprendida, el camino debe ser practicado" no está
interesado en el Dharma sino que está interesado en la verbalización. Reverendo Shariputra, el
Dharma es calmo y apacible. Aquellos que están enganchados en producción y destrucción no
están interesados en el Dharma, no están interesados en la soledad, sino que están
interesados en producción y destrucción. Más aun, reverendo Shariputra, el Dharma es sin
mancha y libre de impureza. Aquel que está interesado en algo, aun en la liberación, no está
interesado en el Dharma, sino que está interesado en la mancha del deseo. El Dharma no es
un objeto. Aquel que persigue objetos no está interesado en el Dharma, sino que está
interesado en los objetos. El Dharma es sin aceptación ni rechazo. Aquel que se mantiene en
las cosas o deja ir las cosas no está interesado en el Dharma, sino que está interesado en
mantener y dejar ir. El Dharma no es un refugio seguro. Aquel que disfruta de un refugio seguro
no está interesado en el Dharma, sino que está interesado en un refugio seguro. El Dharma es
sin signos. Aquel cuya conciencia persigue signos no está interesado en el Dharma, sino que
está interesado en signos. El Dharma no es una sociedad. Aquel que busca asociarse con el
Dharma no está interesado en el Dharma, sino que está interesado en la asociación. El
Dharma no es una visión, un sonido, una categoría, o una idea. Aquel que está involucrado en
visiones, sonidos, categorías o ideas no está interesado en el Dharma, sino que está
interesado en visiones, sonidos, categorías e ideas. Reverendo Shariputra, el Dharma es libre
de cosas compuestas y cosas no compuestas. Aquel que adhiere a las cosas compuestas y a
las cosas no compuestas no está interesado en el Dharma, sino que está interesado en adherir
a cosas compuestas y cosas no compuestas. Por lo tanto, reverendo Shariputra, si estás
interesado en el Dharma, no debes tener interés en nada".
Cuando Vimalakirti hubo hablado este discurso, quinientos dioses obtuvieron la pureza del ojo
del Dharma en el ver todas las cosas. Luego, el Licchavi Vimalakirti dijo al príncipe coronado
Manjusri: "Manjusri, tu ya has estado en innumerables cientos de miles de campos de Buddha
a través de los universos en las diez direcciones. En qué campo de Buddha viste los mejores
tronos de león de las cualidades más finas?
Manjusri respondió: "Noble señor, si uno cruza los campos de Buddha hacia el este, los cuales
son más numerosos que todos los granos de arena de treinta y dos ríos Ganges, uno
descubrirá un universo llamado Merudhvaja. Allí reside un Tathagata llamado Merupradiparaja.
Su cuerpo mide ochenta y cuatro mil leguas de alto, y la altura de su trono es de seis mil
ochocientos miles de leguas. Los bodhisattvas allí miden cuatro mil doscientos miles de leguas
de alto y sus propios tronos miden tres mil cuatrocientos miles de leguas de altura. Noble
señor, el más fino y más soberbio trono existe en aquel universo Merudhvaja, el cual es el
campo de Buddha del Tathagata Merupradiparaja".
En ese momento, el Licchavi Vimalakirti, habiéndose enfocado a sí mismo en la concentración,
practicó un hecho milagroso tal que el Señor Tathagata Merupradiparaja, en el universo
Merudhvaja, envió a ese universo tres mil doscientos miles de tronos. Esos tronos eran tan
altos, espaciosos y hermosos que los bodhisattvas, grandes discípulos, Sakras, Bramas,
Lokapalas, y otros dioses nunca antes habían visto así. Los tronos descendían del cielo y
llegaban a descansar en la casa del Licchavi Vimalakirti. Los tresmil doscientos tronos se
acomodaron a sí mismos sin amontonarse y la casa parecía agrandarse a sí misma de acuerdo
a eso. La gran ciudad de Vaisali no se volvió oscura; ni la tierra de Jambudvipa (o "tierra de los
árboles jambu", esta es una tierra poblada por gente con muy mal karma) ni el mundo de cuatro
continentes. Todo lo demás aparecía exactamente como era antes. Entonces, el Licchavi
Vimalakirti dijo al joven príncipe Manjusri: "Manjusri, permite que los bodhisattvas se sienten
sobre estos tronos, habiendo transformado sus cuerpos a un tamaño acorde!"
Entonces, aquellos bodhisattvas, quienes habían obtenido el super conocimiento,
transformaron sus cuerpos a una altura de cuatro mil doscientas leguas y se sentaron sobre los
tronos. Pero los bodhisattvas principiantes no eran capaces de transformarse a sí mismos para
sentarse sobre los tronos. Entonces, el Licchavi Vimalakirti enseñó a esos principiantes
bodhisattvas una enseñanza que les permitió obtener los cinco super conocimientos y,
habiéndolos obtenido, ellos transformaron sus cuerpos a una altura de cuatro mil doscientas
leguas y se sentaron sobre los tronos. Pero aun los grandes discípulos no podían sentarse
sobre los tronos.
El Licchavi Vimalakirti dijo al reverendo Shariputra: "Reverendo Shariputra, tome asiento en un
trono".
Él respondió: "Buen señor, los tronos son demasiado altos y grandes, y yo no puedo sentarme
sobre ellos".
Vimalakirti dijo: " Reverendo Shariputra, inclínese ante el Tathagata Merupradiparaja, y usted
podrá tomar su asiento."
Entonces, los grandes discípulos se inclinaron ante el Tathagata Merupradiparaja y se sentaron
sobre los tronos.
Luego, el venerable Shariputra dijo al Licchavi Vimalakirti: "Noble señor, es asombroso que
estos miles de tronos, tan grandes y tan altos, debieran ajustarse a una casa tan pequeña y
que la gran ciudad de Vaisali, las villas, ciudades, reinados, capitales de Jambudvipa, los otros
tres continentes, las residencias de los dioses, los nagas, los yakshas, los gandharvas, los
asuras, los garudas, los kimnaras y los mahoragas – que todos ellos aparecieran sin ningún
obstáculo, así como eran antes!"
El Licchavi Viamalakirti respondió: "Reverendo Shariputra, para los Tathagatas y los
bodhisattvas, hay una liberación llamada inconcebible. El bodhisattva que vive en la liberación
inconcebible puede poner al rey de las montañas, Sumeru, que es tan grande, tan noble, y tan
vasto, dentro de una semilla de mostaza. Él puede realizar este acto sin agrandar la semilla de
mostaza y sin encoger la Monte Sumeru. Y las deidades de la asamblea de los cuatro
Maharajas y de los cielos Trayastrimsa ni siquiera saben dónde están. Sólo aquellos seres que
están destinados a ser disciplinados por milagros ven y comprenden el colocar al rey de las
montañas, Sumeru, dentro de un grano de mostaza; esta, reverendo Shariputra, es una
entrada al dominio de la liberación inconcebible de los bodhisattvas. Más aun, reverendo
Shariputra, el bodhisattva que vive en la liberación inconcebible pueden verter en un solo poro
de su piel todas las aguas de los cuatro grandes océanos, sin dañar a los animales acuáticos
tales como el pez, las tortugas, los cocodrilos, las ranas, y otras criaturas, y sin que los nagas,
yakshas, gandharvas y asuras sean siquiera concientes de dónde están ellos. Y toda la
operación es visible sin ningún daño o perturbación hacia aquellos seres vivos. Tal bodhisattva
puede sacar con su mano derecha este universo galáctico de billones de mundos como si fuera
una rueda de alfarero, y, haciéndola girar, echarla más allá de los universos tan numerosos
como las arenas del Ganges, sin que los seres vivos incluidos conozcan su movimiento o el
origen del mismo, y él puede tomarlo y ponerlo de nuevo en su lugar, sin que los seres vivos
sospechen su ir y venir; y aun la operación total es visible. Más aun, reverendo Shariputra, hay
seres que se vuelven disciplinados después de un inmenso periodo de evolución, y también
están los que son disciplinados luego de un breve periodo de evolución. El bodhisattva que vive
en la liberación inconcebible, por el bien de disciplinar a aquellos seres vivos que son
disciplinados a través de innumerables periodos de evolución, puede hacer el paso de una
semana como el paso de un eon, y él puede hacer el paso de un eon parecerse a una semana
para aquellos que son disciplinados a través de un breve periodo de evolución. Los seres vivos
que son disciplinados a través de un inconmensurable periodo de evolución realmente perciben
una semana como el paso de un eon, y aquellos disciplinados por un breve periodo de
evolución realmente perciben un eon como el paso de una semana. Así, un bodhisattva que
vive en la liberación inconcebible puede manifestar todos los esplendores de las virtudes de
todos los campos de Buddha en un solo campo de Buddha. Del mismo modo, él puede colocar
a todos los seres vivos en la palma de su mano derecha y puede mostrarlos con la velocidad
súper natural de pensamiento de todos los campos de Buddha sin dejar nunca su propio
campo de Buddha. Él puede exhibir en un solo poro todas las ofrendas jamás ofrecidas a todos
los Budas de las diez direcciones, y las órbitas de todos los soles, lunas y estrellas de las diez
direcciones. Él puede inhalar todos los huracanes de las atmósferas del viento cósmico de las
diez direcciones en su boca sin dañar su propio cuerpo y sin dejar que sean aplastados los
bosques y las hierbas de los campos de Buddha. Él puede tomar todas las masas de fuego de
todas las supernovas que finalmente consumen todos los universos de todos los campos de
Buddha en su estómago sin interferir con sus funciones. Habiendo cruzado campos de Buddha
tan numerosos como las arenas del Ganges hacia abajo, y habiendo levantado un campo de
Buddha, él puede alzar a través de campos de Buddha tan numerosos como las arenas del
Ganges y colocarlos en la altura, así como un hombre fuerte puede levantar una hoja de jojoba
en la punta de una aguja. Así, el bodhisattva que vive en la liberación inconcebible puede
mágicamente transformar cualquier clase de ser vivo en un monarca universal, un Lokapala, un
Sakra, un Brama, un discípulo, un sabio solitario, un bodhisattva, e incluso en un Buddha. El
bodhisattva puede transformar milagrosamente todos los gritos y ruidos, superiores, mediocres,
e inferiores, de todos los seres vivos de las diez direcciones, en la voz del Buddha, el Dharma y
la Sangha, habiéndoles proclamado: "impermanente! Miserable! Vacío! Sin yo! " Y él puede
causarles que reciten las palabras y sonidos de todas las enseñanzas enseñadas por todos los
Buddhas de las diez direcciones. Reverendo Shariputra, te he mostrado sólo una pequeña
parte de la entrada al dominio del bodhisattva que vive en la liberación inconcebible.
Reverendo Shariputra, explicarte la enseñanza de la plena entrada en el dominio del
bodhisattva que vive en la liberación inconcebible requeriría más de un eon, y aun más que
eso."
Luego, el patriarca Maha Kasyapa, habiendo escuchado esta enseñanza de la liberación
inconcebible de los bodhisattvas, fue maravillado, y le dijo al venerable Shariputra: "venerable
Shariputra, si uno fuera a mostrar una variedad de cosas a una persona ciega de nacimiento, él
no podría ser capaz de ver ni una cosa. De este modo, venerable Shariputra, cuando esta
puerta de la liberación inconcebible es enseñada, todos los discípulos y sabios solitarios están
sin visión, como el hombre ciego de nacimiento, y no pueden comprender ni siquiera una sola
causa de liberación inconcebible. Quién entre los sabios es el que, escuchando acerca de esta
inconcebible liberación, no concibe el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi? Como para
nosotros, aquellas facultades están deterioradas, como una semilla podrida y quemada, qué
más podemos hacer si no nos volvemos receptivos a este gran vehículo? Nosotros, todos los
discípulos y sabios solitarios, al escuchar esta enseñanza del Dharma, deberíamos expresar un
grito de arrepentimiento que pudiera sacudir esta universo galáctico de billones de mundos! Y
como para los bodhisattvas, cuando ellos escuchan acerca de esta inconcebible liberación ellos
deben estar tan gozosos como un joven príncipe coronado cuando él toma la diadema y es
ungido, y ellos deben incrementar hasta el máximo su devoción hacia esta liberación
inconcebible. De hecho, qué podría hacerle jamás el ejército entero de Maras a uno que está
dedicado a esta liberación inconcebible?"
Cuando el patriarca Maha Kasyapa hubo expresado este discurso, treinta y dos mil dioses
concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi.
Entonces el Licchavi Vimalakirti dijo al patriarca Maha Kasyapa: "Reverendo Maha Kasyapa,
los Maras que hacen el mal en los innumerables universos de las diez direcciones son todos
bodhisattvas residiendo en la liberación inconcebible, quienes están haciendo el mal en función
de desarrollar a los seres vivos a través de su habilidad en técnica liberadora. Reverendo Maha
Kasyapa, todos los mendigos miserables que acuden a los bodhisattvas de los innumerables
universos de las diez direcciones a pedir una mano, un pie, una oreja, una nariz, algo de
sangre, músculos, huesos, médula, un ojo, un torso, una cabeza, un miembro, un trono, un
reinado, un país, una mujer, un hijo, una hija, un esclavo, una esclava, un caballo, un elefante,
una carruaje, un carro, oro, plata, joyas, perlas, conchas, cristal, coral, berilio, tesoros, comida,
bebida, elixires, y ropas – esos mendigos demandantes son usualmente bodhisattvas viviendo
en la liberación inconcebible quienes, a través de sus habilidades en técnicas liberadoras,
desean probar y así demostrar la firmeza de la gran resolución de los bodhisattvas. Por qué?
Reverendo Maha Kasyapa, los bodhisattvas demuestran esa firmeza por medio de
austeridades terribles. Las personas ordinarias no tiene poder para ser así demandantes de los
bodhisattvas, a menos que se les conceda la oportunidad. Ellos no son capaces de matar y
privar de tal manera sin que se les de libremente la oportunidad. Reverendo Maha Kasyapa,
así como una luciérnaga no puede eclipsar la luz del sol, así reverendo Maha Kasyapa, no es
posible sin permiso especial que una persona ordinaria pueda atacar así y privar a un
bodhisattva. Reverendo Maha Kasyapa, así como un burro no podría lograr un ataque sobre un
elefante salvaje, aun así, reverendo Maha Kasyapa, uno que no es él mismo un bodhisattva no
puede atacar a otro bodhisattva, y sólo un bodhisattva puede tolerar el ataque de otro
bodhisattva. Reverendo Maha Kasyapa, tal es la introducción al poder del conocimiento de la
técnica liberadora de los bodhisattvas que viven en la liberación inconcebible".
*
7. La Diosa
En esto, Manjusri, el príncipe coronado, se dirigió al Licchavi Vimalakirti: "Buen señor, cómo
debe un bodhisattva considerar a todos los seres vivos?"
Vimalakirti respondió: "Manjusri, un bodhisattva debe considerar a todos los seres vivos como
un hombre sabio considera el reflejo de la luna en el agua, o como los magos consideran a los
hombres creados por magia. Él debería considerarlos como si fueran como un rostro en un
espejo; como el agua de un espejismo; como el sonido de un eco; como una masa de nubes en
el cielo; como el momento previo de una bola de espuma; como la aparición y desaparición de
una burbuja en el agua; como el núcleo de un árbol de plátano; como un flash o relámpago;
como el quinto gran elemento; como el séptimo sentido; como la aparición de la materia en un
reino inmaterial; como el brote de una semilla podrida; como un abrigo de pelo de tortuga;
como la diversión de los juegos para uno que desea morir; como los puntos de vista egoístas
de un vencedor de la corriente; como el tercer renacimiento de uno que regresa una vez; como
el descenso de uno que no regresa al vientre; como la existencia del deseo, odio e ignorancia
en un santo; como los pensamientos de avaricia, inmoralidad, retorcimiento y hostilidad en un
bodhisattva que ha alcanzado la tolerancia; como los instintos de las pasiones en un
Tathagata; como la percepción del color en un ciego de nacimiento; como la inhalación y la
exhalación de un asceta absorto en la meditación de la cesación; como la huella de un pájaro
en el cielo; como la erección de un eunuco; como el embarazo de una mujer estéril; como las
pasiones no producidas de una encarnación emanada de un Tathagata; como las visiones de
sueño vistas después de despertar; como las pasiones de uno que está libre de las
conceptualizaciónes; como el fuego ardiendo sin combustible; como la reencarnación de uno
que ha obtenido la suprema liberación. Precisamente así, Manjusri, un bodhisattva que
comprende la suprema carencia de yo considera a todos los seres".
Manjusri luego preguntó más: "Noble señor, si un bodhisattva considera a todos los seres vivos
de tal modo, cómo genera él el gran amor hacia ellos?"
Vimalakirti respondió: "Manjusri, cuando un bodhisattva considera a todos los seres vivos de
este modo, él piensa: "así como he realizado el Dharma, así debería yo enseñarlo a todos los
seres vivos". Por lo tanto, él genera el amor que es verdaderamente un refugio para todos los
seres vivos; el amor que es apacible porque está libre de apego; el amor que no es febril,
porque es libre de pasiones; el amor que está e acuerdo con la realidad porque es ecuánime
en todos los tres tiempos; el amor que es sin conflicto porque es libre de la violencia de las
pasiones; el amor que es no dual porque no está involucrado ni con lo externo ni con lo interno;
el amor que es imperturbable porque es totalmente supremo. Por lo tanto él genera el amor
que es firme, es alta resolución indestructible, como un diamante; el amor que es puro,
purificado en su naturaleza intrínseca; el amor que es parejo, siendo sus aspiraciones iguales;
el santo amor que ha eliminado a su enemigo; el amor del bodhisattva que continuamente
desarrolla a los seres vivos; el amor de los Tathagatas que comprende la realidad; el amor de
Buddha que causa a los seres vivos despertar de su sueño; el amor que es espontáneo porque
es plenamente iluminada espontaneidad; el amor que es iluminación porque es unidad de
experiencia; el amor que no tiene presunción porque ha eliminado el apego y la aversión; el
amor que es gran compasión porque infunde al Mahayana con radiantez; el amor que nunca es
agotado porque conoce la vaciedad y la carencia de yo; el amor que es dar porque otorga el
regalo del Dharma libre del puño apretado de un mal maestro; el amor que es moralidad
porque mejora a los seres inmorales; el amor que es tolerancia porque protege tanto a sí
mismo como a los demás; el amor que es esfuerzo porque toma responsabilidad por todos los
seres vivos; el amor que es contemplación porque se abstiene de la indulgencia en los gustos;
el amor que es sabiduría porque causa el logro en el momento apropiado; el amor que es
técnica liberadora porque muestra el camino en todo sitio; el amor que es sin formalidad porque
es puro en motivación; el amor que es sin desviación porque actúa desde la motivación
decisiva; el amor que es gran resolución porque es sin pasiones; el amor que es sin engaño
porque no es artificial; el amor que es felicidad porque introduce a los seres vivos a la felicidad
del Buddha. Tal, Manjusri, es el gran amor de un bodhisattva."
Manjusri: Cuál es la gran compasión del bodhisattva?
Vimalakirti: Es el dar de todas las raíces acumuladas de virtud a todos los seres vivos.
Manjusri: Cuál es el gran gozo del bodhisattva?
Vimalakirti: es estar gozoso y sin arrepentimiento en el dar.
Manjusri: Cuál es la ecuanimidad del bodhisattva?
Vimalakirti: Es lo que beneficia a uno mismo y a los demás.
Manjusri: A qué debería recurrir uno cuando está aterrorizado por el temor de vivir?
Vimalakirti: Manjusri, un bodhisattva que está aterrorizado por la vida debería recurrir a la
magnanimidad del Buddha.
Manjusri: Dónde debería él que desea recurrir a la magnanimidad del Buddha tomar su apoyo?
Vimalakirti: Él debería apoyarse en la ecuanimidad hacia todos los seres vivos.
Manjusri: Dónde debería aquel que desea apoyarse en la ecuanimidad hacia todos los seres
vivos tomar su apoyo?
Vimalakirti: Él debería vivir por la liberación de todos los seres vivos.
Manjusri: Qué debería hacer aquel que desea liberar a todos los seres vivos?
Vimalakirti: Él debería liberarlos de sus pasiones.
Manjusri: Cómo debería aquel que desea eliminar las pasiones aplicarse a sí mismo?
Vimalakirti: Él debería aplicarse a sí mismo apropiadamente.
Manjusri: Cómo debería él aplicarse a sí mismo para "aplicarse apropiadamente?"
Vimalakirti: Él debería aplicarse a sí mismo a la no-producción y la no-destrucción.
Manjusri: Qué es no producido? Y qué es no destruido?
Vimalakirti: El mal no es producido y el bien no es destruido.
Manjusri: Cuál es la raíz de bien y mal?
Vimalakirti: La materialidad es la raíz del bien y del mal.
Manjusri: Cuál es la raíz de la materialidad?
Vimalakirti: El deseo es la raíz de la materialidad.
Manjusri: Cuál es la raíz del deseo y el apego?
Vimalakirti: La construcción irreal es la raíz del deseo.
Manjusri: Cuál es la raíz de la construcción irreal?
Vimalakirti: El falso concepto es su raíz.
Manjusri: Cuál es la raíz del falso concepto?
Vimalakirti: la carencia de base.
Manjusri: Cuál es la raíz de la carencia de base?
Vimalakirti: Manjusri, cuando algo es sin base, cómo puede eso tener alguna raíz? Por lo tanto,
todas las cosas se yerguen sobre la raíz, que es sin base.
En esto, una cierta diosa quien vivía en aquella casa, habiendo escuchado esta enseñanza del
Dharma de los grandes bodhisattvas heroicos, y siendo deleitada, complacida, gozado en
demasía, se manifestó a sí misma en un cuerpo material y roció a los grandes héroes
espirituales, los bodhisattvas, y los grandes discípulos con flores celestiales. Cuando las flores
cayeron sobre los cuerpos de los bodhisattvas, ellas cayeron sobre el suelo, pero cuando
cayeron sobre los cuerpos de los grandes discípulos, ellas se adhirieron a ellos y no cayeron.
Los grandes discípulos sacudieron las flores e incluso intentaron usar sus poderes mágicos,
pero aun las flores no se sacudían. Entonces, la diosa dijo al venerable Shariputra, "reverendo
Shariputra, por qué sacudes estas flores?"
Shariputra respondió, "Diosa, estas flores no son propias para personas religiosas y entonces
estamos intentando sacudírnoslas".
La diosa dijo: "No digas eso, reverendo Shariputra. Por qué? Estas flores son propias de
hecho! Por qué? Tales flores no tienen ni pensamiento constructivo ni discriminación. Pero el
anciano Shariputra tiene tanto pensamiento constructivo como discriminación.
Reverendo Shariputra, la impropiedad para uno que ha renunciado al mundo por la disciplina
del correctamente enseñado Dharma consiste en el pensamiento constructivo y en la
discriminación, y aun los ancianos están llenos de esos pensamientos. Uno que es sin tales
pensamientos es siempre propio.
Reverendo Shariputra, mira cómo estas flores no se adhieren a los cuerpos de esos grandes
héroes espirituales, los bodhisattvas! Esto es porque ellos han eliminado los pensamientos
constructivos y las discriminaciones. Por ejemplo, los espíritus malos tienen poder sobre el
hombre temeroso pero no pueden perturbar la no-temeridad. De este modo, aquellos
intimidados por el temor del mundo están bajo el poder de formas, sonidos, olores, gustos, y
texturas, que no perturban a aquellos que están libres de las pasiones inherentes al mundo
constructivo. Así, esas flores se adhieren a los cuerpos de aquellos que no han eliminado sus
instintos por las pasiones y no se adhieren a los cuerpos de aquellos que han eliminado sus
instintos. Por lo tanto, las flores no se adhieren a los cuerpos de estos bodhisattvas, que han
abandonado todos los instintos."
Entonces el venerable Shariputra dijo a la diosa: "Diosa, cuánto tiempo has estado en esta
casa?"
La diosa respondió: "He estado aquí tanto tiempo como el anciano ha estado en liberación".
Shariputra dijo: "Entonces, has estado en esta casa por bastante tiempo?"
La diosa dijo: "Ha estado el anciano en liberación por bastante tiempo?"
En ese momento, Shariputra quedó en silencio.
La diosa continuó: "Anciano, tú eres el "más destacado de los sabios!" Por qué no hablas?
Ahora, cuando es tu turno, no respondes la pregunta."
Shariputra: Dado que la liberación es inexpresable, diosa, yo no sé qué decir.
Diosa: Todas las sílabas pronunciadas por el anciano tienen la naturaleza de la liberación. Por
qué? La liberación no es ni interna ni externa, ni puede ser aprehendida aparte de estos. De
este modo, sílabas no son ni internas ni externas, ni pueden ser ellas aprehendidas en ningún
otro sitio. Por lo tanto, reverendo Shariputra, no apuntes hacia la liberación por abandonar el
habla! La santa liberación es la igualdad de todas las cosas!
Shariputra: Diosa, no es la liberación la libertad del deseo, odio e ignorancia?
Diosa: "La liberación es la libertad del deseo, odio, e ignorancia" esta es la enseñanza del
excesivamente orgulloso. Pero aquellos libres de orgullo son enseñados en que la verdadera
naturaleza del deseo, odio e ignorancia es en sí misma liberación.
Shariputra: Excelente! Excelente, diosa! Dinos, qué has obtenido, qué has comprendido, que
tienes semejante elocuencia?
Diosa: No he obtenido nada, reverendo Shariputra. Yo no tengo comprensión. Por lo tanto
tengo semejante elocuencia. Cualquiera que piense "he obtenido! He comprendido!! Es
demasiado orgulloso en la disciplina del bien enseñado Dharma.
Shariputra: Diosa, perteneces al vehículo del discípulo, al vehículo solitario, o al gran vehículo?
Diosa: Yo pertenezco al vehículo del discípulo cuando lo enseño a aquellos que lo necesitan.
Yo pertenezco al vehículo solitario cuando enseño los doce eslabones de la originación
dependiente a aquellos que los necesitan. Y, dado que nunca abandono la gran compasión,
pertenezco al gran vehículo, ya que todos necesitan esa enseñanza para obtener la liberación
suprema. Sin embargo, reverendo Shariputra, así como uno no puede oler la planta de castor
en un árbol de magnolia, sino sólo las flores de magnolia, así, reverendo Shariputra, viviendo
en esta casa, la cual está exultante con el perfume de las virtudes de las cualidades del
Buddha, uno no huele el perfume de los discípulos y los sabios solitarios. Reverendo
Shariputra, los Sakras, los Brahmas, los Lokapalas, los devas, nagas, yakshas, gandharvas,
asuras, garudas, kimnaras y mahoragas que viven en esta casa escuchan el Dharma de la
boca de este santo hombre y, seducidos por el perfume de las virtudes de las cualidades del
Buddha, prosiguen hasta concebir el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Reverendo
Shariputra, he estado en esta casa durante doce años, y no he escuchado discursos
concernientes a los discípulos y a los sabios solitarios sino que he escuchado sólo aquellos
concernientes al gran amor, la gran compasión, y las inconcebibles cualidades del Buddha.
Reverendo Shariputra, ocho cosas extrañas y maravillosas se manifiestas a sí mismas
constantemente en esta casa. Cuáles son esas ocho? Una luz de matiz dorado brilla aquí
constantemente, tan brillante que es difícil distinguir el día de la noche; y ni la luna ni el sol
brillan aquí con claridad. Esta es la primera maravilla de esta casa. Más aun, reverendo
Shariputra, quienquiera que entre en esta casa no es más agobiado por sus pasiones desde el
momento en que está adentro. Esta es la segunda cosa extraña y maravillosa. Más aun,
reverendo Shariputra, esta casa nunca es abandonada por Sakra, Brama, los Lokapalas y los
bodhisattvas de todos los otros campos de Buddha. Esta es la tercera cosa extraña y
maravillosa. Más aun, reverendo Shariputra, esta casa nunca está vacía de los sonidos del
Dharma, el discurso sobre las seis trascendencias, y los discursos de la irreversible rueda del
Dharma. Esta es la cuarta cosa extraña y maravillosa. Más aun, reverendo Shariputra, en esta
casa uno siempre oye los ritmos, canciones, y música de dioses y hombres, y desde esta
música constantemente resuena el sonido del infinito Dharma de Buddha. Esta es la quinta
cosa extraña y maravillosa. Más aun, reverendo Sahriputra, en esta casa hay siempre cuatro
inagotables tesoros, repletos de toda clase de joyas, que nunca decrecen, si bien todos los
pobres y miserables pueden participar a su satisfacción. Esta es la sexta cosa extraña y
maravillosa. Más aun, reverendo Shariputra, a voluntad de este buen hombre, a esta casa
llegan innumerables Tathagatas de las diez direcciones, tales como los Tathagatas
Shakyamuni, Amitabha, Aksobhya, Ratnasri, Ratnarcis, Ratnacandra, Ratnavyuha,
Dusprasaha, Sarvarthasiddha, Ratnabahula, Simhakirti, Simhasvara, y así en más; y cuando
ellos llegan enseñan la puerta del Dharma llamada "Los secretos de los Tathagatas" y luego
parten. Esta es la séptima cosa extraña y maravillosa. Más aun, reverendo Shariputra, todos
los esplendores de las residencias de los dioses y todos los esplendores de los campos de los
Budas brillan sucesivamente en esta casa. Esta es la octava cosa extraña y maravillosa.
Reverendo Shariputra, esas ocho cosas extrañas y maravillosas son vistas en esta casa. Quién
entonces, viendo tales cosas inconcebibles, creería en las enseñanzas de los discípulos?
Shariputra: Diosa, qué te impide transformarte a ti misma fuera de tu estado femenino?
Diosa: Si bien he buscado mi "estado femenino" por estos doce años, aun no lo he encontrado.
Reverendo Shariputra, si un mago fuera a encarnar una mujer por arte de magia, le
preguntarías "qué te impide transformarte a ti misma uera de tu estado femenino?"
Shariputra: No! Tal mujer no existiría realmente, así que qué habría que transformar?
Diosa: Exactamente así, reverendo Shariputra, todas las cosas no existen realmente. Ahora,
pensarías "qué le impide a uno cuya naturaleza es aquella de una encarnación mágica
transformarse a sí misma fuera de su estado femenino?"
En esto, la diosa empleó su poder mágico para causar que el anciano Shariputra apareciera en
la forma de ella y causarle a ella aparecer en la forma de él. Entonces la diosa, transformada
en Shariputra, dijo a Shariputra transformado en la diosa: "reverendo Shariputra, qué te impide
transformarte a ti mismo fuera de tu estado femenino?"
Y Shariputra, transformado en la diosa, respondió "ya no aparezco en la forma de un hombre!
Mi cuerpo ha cambiado en el cuerpo de una mujer! No sé qué transformar!"
La diosa continuó: "Si el anciano pudiera de nuevo cambiar fuera del estado femenino,
entonces todas las mujeres podrían también cambiar fuera de su estado femenino. Todas las
mujeres aparecen en la forma de mujeres del mismo modo en que el anciano aparece en la
forma de una mujer. Mientras ellas no son mujeres en realidad, ellas aparecen en la forma de
mujeres. Con esto en mente, el Buddha dijo: "en todas las cosas, no hay ni hombre ni mujer".
Entonces la diosa liberó su poder mágico y cada uno regresó a su forma ordinaria. Ella
entonces le dijo a él:
Reverendo Shariputra, qué has hecho con tu forma femenina?
Shariputra: Ni la hice ni la cambié.
Diosa: exactamente así, todas las cosas son ni hechas ni cambiadas, y el que ellas no sean ni
hechas ni cambiadas, ésa es la enseñanza del Buddha.
Shariputra: Diosa, dónde nacerás cuando trasmigres después de la muerte?
Diosa: Yo naceré donde todas las mágicas encarnaciones del Tathagata son nacidas.
Shariputra: Pero las emanaciones encarnadas del Tathagata no trasmigran ni son nacidas.
Diosa: Todas las cosas y seres vivos son exactamente así; ellos no trasmigran ni son nacidos!
Shariputra: Diosa, qué tan pronto obtendrás la perfecta iluminación de la Buddheidad?
Diosa: En ese momento tú, anciano, te volverás adornado una vez más con las cualidades de
un individuo ordinario, entonces yo obtendré la iluminación perfecta de la Buddheidad.
Shariputra: Diosa, es imposible que yo me vuelva adornado una vez más con las cualidades de
un individuo ordinario.
Diosa: justo así, reverendo Shariputra, es imposible que yo deba obtener la perfecta
iluminación de la Buddheidad! Por qué? Porque la perfecta iluminación se yergue sobre lo
imposible. Porque es imposible, nadie obtiene la perfecta iluminación de la Buddheidad.
Shariputra: Pero el Tathagata ha declarado: " Los Tathagatas, quienes son tan numerosos
como las arenas del Ganges, han obtenido la perfecta Buddheidad, están obteniendo la
perfecta Buddheidad, y seguirán obteniendo la perfecta Buddheidad."
Diosa: Reverendo Shariputra, la expresión: "los Budas del pasado, presente y futuro" es una
expresión convencional hecha de cierto número de sílabas. Los Buddhas no son ni pasado, ni
presente ni futuro. Su iluminación trasciende los tres tiempos! Pero dime, anciano, has obtenido
la santidad?
Shariputra: Es obtenida, porque no hay obtención.
Diosa: exactamente así, hay perfecta iluminación porque no hay obtención de la iluminación
perfecta.
Entonces el Licchavi Vimalakirti dijo al venerable anciano Shariputra: "reverendo Shariputra,
esta diosa ya ha servido a noventa y dos millones de Budas. Ella actúa con el super
conocimiento. Ella verdaderamente ha tenido éxito en todos sus votos. Ha ganado la tolerancia
del no-nacimiento de las cosas. Ella ha obtenido realmente irreversibilidad. Ella puede vivir
dondequiera que desee sobre la fuerza de su voto de desarrollar a todos los seres vivos".
*
8. La familia de los Tathagatas
Entonces, el príncipe coronado Manjusri dijo al Licchavi Vimalakirti: "Noble señor, cómo sigue
el bodhisattva el camino para obtener las cualidades del Buddha?"
Vimalakirti respondió: "Manjusri, cuando el bodhisattva sigue el camino equivocado, él sigue el
camino para obtener las cualidades del Buddha".
Manjusri continuó: "Cómo sigue el bodhisattva el camino equivocado?"
Vimalakirti respondió: "Aunque él practique los cinco pecados mortales, él no siente malicia,
violencia u odio. Aunque caiga en los infiernos, él permanece libre de toda mancha de
pasiones. Aunque él vaya a los estados de animales, permanece libre de la oscuridad y la
ignorancia. Cuando él va a los estados de los asuras, permanece libre de orgullo, engaño, y
arrogancia. Cuando él va al reino del señor de la muerte, acumula los almacenes de mérito y
sabiduría. Cuando él va a los estados de inmovilidad e inmaterialidad, no se disuelve allí. Él
puede seguir los caminos del deseo, y aun permanece libre del apego a los goces del deseo. Él
puede seguir los caminos del odio, y aun no siente rabia hacia cualquier ser vivo. Él puede
seguir los caminos de la locura, y aun estar siempre conciente con la sabiduría de la
comprensión firme. Él puede seguir los caminos de la avaricia, y aun devolver todas las cosas
internas y externas sin considerar incluso su propia vida. Él puede seguir los caminos de la
inmoralidad, y aun, viendo el horror de incluso la mínima transgresión, él vive mediante las
prácticas ascéticas y austeridades. Él puede seguir los caminos de la perversión y la rabia, y
aun permanecer completamente libre de malicia y vivir por amor. Él puede seguir los caminos
de la pereza, y aun sus esfuerzos son ininterrumpidos mientras se esfuerza en la cultivación de
raíces de virtud. Él puede seguir los caminos de las distracciones sensuales, y aun,
naturalmente concentrado su contemplación no es disipada. Él puede seguir los caminos de la
falsa sabiduría, y aun, habiendo alcanzado la trascendencia de la sabiduría, es experto en
todas las ciencias mundanas y trascendentales. Él puede mostrar los caminos de sofistería y
contención, y aun está siempre conciente del significado supremo y ha perfeccionado el uso de
las técnicas liberadoras. Él puede mostrar los caminos de orgullo, y aun sirve de puente y de
balsa para toda la gente. Él puede mostrar los caminos de las pasiones, y aun es
completamente desapasionado y naturalmente puro. Él puede seguir los caminos de Mara, y
aun no acepta realmente su autoridad en consideración a su conocimiento de las cualidades de
Buddha. Él puede seguir los caminos de los discípulos, y aun permite que los seres vivos
escuchen las enseñanzas que ellos no han oído antes. Él puede seguir los caminos de los
sabios solitarios, y aun inspirado con gran compasión en función de desarrollar a todos los
seres vivos. Él puede seguir los caminos del pobre, y aun mantiene en su mano una joya de
inagotable riqueza. Él puede seguir los caminos de los tullidos, y aun está bien y bellamente
adornado con los signos y marcas auspiciosas. Él puede seguir los caminos de aquellos de
nacimiento bajo, y aun, a través de su acumulación de almacenes de mérito y sabiduría, nace
en la familia de los Tathagatas. Él puede seguir los caminos del débil, el feo, y el miserable, y
aun es bello al mirarlo, y su cuerpo es como aquel de Narayana. Él puede manifestar a los
seres vivos los caminos del enfermo y el infeliz, y aun ha conquistado enteramente y
trascendido el temor de la muerte. Él puede seguir los caminos del rico, y aun ser sin
adquisividad y reflexionar frecuentemente acerca de la noción de la impermanencia. Él puede
mostrarse a sí mismo comprometido en bailar con mujeres de harén, y aun de hiende en la
soledad, habiendo cruzado el pantano del deseo. Él sigue los caminos del tonto y el
incoherente, y aun, habiendo adquirido el poder de los encantamientos, es adornado con una
variada elocuencia. Él sigue los caminos del heterodoxo sin jamás volverse heterodoxo. Él
sigue los caminos del mundo entero, y aun invierte todos los estado de existencia. Él sigue el
camino de liberación sin jamás abandonar el progreso del mundo. Manjusri, así sigue el
bodhisattva los caminos erróneos, por consiguiente siguiendo las cualidades del Buddha".
Entonces, el Licchavi Vimalakirti dijo al príncipe coronado Manjusri: " Manjusri, qué es la
"familia de los Tathagatas"?
Manjusri respondió: "Noble señor, la familia de los Tathagatas consiste en todo el egoísmo
básico; en la ignorancia y la sed por la existencia; en lujuria, odio, y locura; en los cuatro
malentendidos, las cinco oscuridades, los seis sentidos, las siete residencias de la conciencia,
los ocho falsos caminos, las nueve causas de irritación, en los caminos de los diez pecados.
Tal es la familia de los Tathagatas. En suma, noble señor, las sesenta y dos clases de
convicciones constituyen la familia de los Tathagatas!"
Vimalakirti: Manjusri, con qué en mente dices eso?
Manjusri: Noble señor, uno que está en la determinación fijada de la visión de lo no creado no
es capaz de concebir el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Sin embargo, uno que vive
entre las cosas creadas, en las mimas de las pasiones, sin ver ninguna verdad, es de hecho
capaz de concebir el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Noble señor, las flores como el
loto azul, el loto rojo, el loto blanco, el lirio de agua, y el lirio de luna no crecen sobre la tierra
seca en lo salvaje, sino que crecen en estanques y riberas de fango. Exactamente así, las
cualidades de Buddha no crecen en los seres vivos ciertamente destinados para lo increado
sino que crecen en aquellos seres vivos que son como estanques y riberas de fango de las
pasiones. De este modo, como las semillas no crecen en el cielo sino que crecen en la tierra,
así las cualidades de Buddha no crecen en aquellos determinados para lo absoluto sino que
crecen en aquellos que conciben el espíritu de iluminación, después de haber producido una
montaña como el Sumeru de puntos de vista egoístas. Noble señor, a través de estas
consideraciones uno puede comprender que todas las pasiones constituyen la familia de los
Tathagatas. Por ejemplo, noble señor, sin salir al gran océano es imposible encontrar perlas
preciosas, invalorables. De este modo, sin salir al océano de las pasiones, es imposible
obtener la mente de omnisciencia. Entonces, el anciano Mahakasyapa aplaudió al príncipe
coronado Manjusri: "Bien! Bien Manjusri! Esto es de hecho bien dicho! Esto es correcto! Las
pasiones de hecho constituyen la familia de los Tathagatas. Cómo pueden aquellos como
nosotros, los discípulos, concebir el espíritu de iluminación, o volverse plenamente iluminados
en consideración a las cualidades del Buddha? Sólo aquellos culpables de los cinco pecados
mortales pueden concebir el espíritu de iluminación y pueden obtener la Buddheidad, la cual es
el pleno completamiento de las cualidades del Buddha! Así como, por ejemplo, los cinco
objetos del deseo no tienen efecto o impresión sobre aquellos privados de facultades, aun así
todas las cualidades del Buddha no tienen impresión o efecto sobre los discípulos, quienes han
abandonado todas las adherencias. Así, los discípulos nunca pueden apreciar aquellas
cualidades. Por lo tanto, Manjusri, el individuo ordinario es agradecido al Tathagata, pero los
discípulos no son agradecidos. Por qué? Los individuos ordinarios, al aprender de las virtudes
del Buddha, conciben el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi, para asegurar la continuidad
ininterrumpida de la herencia de los Tres Tesoros; pero los discípulos, si bien ellos pueden
escuchar de las cualidades, poderes y no-temeridad del Buddha hasta el fin de sus días, no
son capaces de concebir el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. En esto, el bodhisattva
Sarvarupasamdarsana, quien estaba presente en aquella asamblea, se dirigió al Licchavi
Vimalakirti: "Dueño de casa, dónde están su padre y su madre, sus hijos, su mujer, sus siervos,
sus amas de llave, sus trabajadores, y sus asistentes? Dónde están sus amigos, sus parientes,
y sus familiares? Dónde están sus sirvientes, sus caballos, sus elefantes, sus carruajes, sus
guardaespaldas y sus mensajeros?"
Así preguntado, el Licchavi Vimalakirti dijo los siguientes versos al bodhisattva
Sarvarupasamdarsana:
De los verdaderos bodhisattvas,
La madre es la trascendencia de la sabiduría,
El padre es la habilidad en técnica liberadora;
Los Guías son nacidos de tales padres.
Su esposa es el gozo en el Dharma,
Amor y compasión son sus hijas,
El Dharma y la verdad son sus hijos;
Y su hogar es el profundo pensamiento sobre el significado de la vaciedad.
Todas las pasiones son sus discípulos,
Controladas a voluntad.
Sus amigos son las ayudas para la iluminación;
De ese modo ellos realizan la suprema iluminación.
Sus compañeros, siempre con ellos,
Son las seis trascendencias.
Sus consortes son los medios de unificación,
Su música es la enseñanza del Dharma.
Los encantamientos hacen su jardín,
El cual florece con las flores de los factores de iluminación,
Con árboles de la gran riqueza del Dharma,
Y frutos de la gnosis de liberación.
Su piscina consiste en las ocho liberaciones,
Llena con el agua de la concentración,
Cubierta con los lotos de las siete impurezas-
Quienes se bañan allí se vuelven inmaculados.
Sus mensajeros son los seis súper conocimientos.
Su vehículo es el insuperable Mahayana,
su conductor es el espíritu de iluminación,
y su camino es la paz óctuplo.
Sus ornamentos son los signos auspiciosos,
Y las ocho marcas;
Su guirnalda es la aspiración virtuosa,
Y su vestimenta es la buena conciencia y la consideración.
Su riqueza es el santo Dharma,
Y su negocio es su enseñanza.
Su gran ingreso es la práctica pura,
Y está dedicada a la suprema iluminación.
Su cama consiste en las cuatro contemplaciones,
Y su sobrecama es el medio de vida puro.
Y su despertar consiste en la gnosis,
La cual es constante aprendizaje y meditación.
Su comida es la ambrosia de las enseñanzas,
Y su bebida es el jugo de la liberación.
Su baño es la aspiración pura,
Y la moralidad su ungüento y perfume.
Habiendo conquistado las pasiones enemigas,
Ellos son héroes invencibles.
Habiendo sometido a los cuatro Maras,
Ellos elevan su estandarte sobre el campo de la iluminación.
Ellos manifiestan el nacimiento voluntariamente,
Y aun no son nacidos, si son originados.
Ellos brillan en todos los campos de los Budas,
Así como el sol naciente.
Si bien ellos adoran a los Budas por millones,
Con cada ofrenda concebible,
Ellos nunca residen en la mínima diferencia
Entre los Budas y ellos mismos.
Ellos viajan a través de todos los campos de Buddha
Para traer beneficio a los seres vivos,
Y aun ven esos campos como sólo espacio vacío,
Libres de cualquier noción conceptual de "seres vivos".
Los bodhisattvas sin temor pueden manifestar,
Todos en un solo instante,
Las formas, sonidos y maneras de comportamiento
De todos los seres vivos.
Si bien ellos reconocen los actos de Mara,
Ellos pueden llevarse bien aun con esos Maras
Porque aun tales actividades pueden ser manifestadas
Por aquellos perfeccionados en técnica liberadora.
Ellos actúan con manifestaciones ilusorias
Para desarrollar a los seres vivos,
Mostrándose a sí mismos como viejos o enfermos,
Y aun manifestando sus propias muertes.
Ellos demuestran el ardor de la tierra
En las llamas consumidoras del fin del mundo,
Para demostrar la impermanencia
A los seres vivos con la noción de permanencia.
Invitados por cientos de miles de seres vivos,
Todos en el mismo país,
Ellos toman parte de las ofrendas en las casas de todos,
Y lo dedican todo al bien de la iluminación.
Ellos son excelentes en todas las ciencias esotéricas,
Y en las varias artesanías diferentes,
Y producen la felicidad
De todos los seres vivos.
Dedicándose ellos mismos como monjes,
Para todas las sectas extrañas del mundo,
Ellos desarrollan a todos los seres vivos
Que se han apegado a puntos de vista dogmáticos.
Ellos pueden volverse soles o lunas,
Indras o Brahmas, o señores de criaturas,
Ellos pueden volverse fuego o agua
O tierra o viento.
Durante los cortos eones de enfermedades,
Ellos se vuelven la mejor medicina santa;
Ellos hacen a los seres buenos y felices,
Y les traen su liberación.
Durante los cortos eones de hambre,
Elles se vuelven comida y bebida.
Habiendo primero aliviado la sed y el hambre,
Ellos enseñan el Dharma a los seres vivos.
Durante los cortos eones de espadas,
Ellos meditan sobre el amor,
Introduciendo a la no-violencia
A cientos de millones de seres vivos.
En medio de grandes batallas
Ellos permanecen imparciales a ambos lados;
Porque los bodhisattvas de gran fuerza
Se deleitan en la reconciliación del conflicto.
Para ayudar a los seres vivos,
Voluntariamente descienden a los infiernos,
Que están adheridos a todos los inconcebibles campos de Buddha.
Ellos manifiestan sus vidas
En todas las especies del reino animal,
Enseñando el Dharma en todo sitio.
Así ellos son llamados "líderes".
Ellos exhiben gozo sensual a los mundanos,
Y trances al meditativo.
Ellos conquistan completamente a los Maras,
Y no les dan oportunidad de prevalecer.
Así como puede ser demostrado que un loto
No puede existir en el centro de un fuego,
Así ellos muestran la realidad suprema
Tanto de placeres como de trances.
Ellos se vuelven cortesanas intencionalmente
Para ganar a los hombres,
Y, habiéndolos atrapado con el anzuelo del deseo,
Ellos los establecen en la gnosis del Buddha.
Para ayudar a los seres vivos,
Ellos siempre se vuelven jefes,
Capitanes, sacerdotes y ministros
O incluso primeros ministros.
Por el bien de los pobres,
Ellos se vuelven tesoros inagotables,
Causando que aquellos a quienes ellos dieron sus regalos
Conciban el espíritu de iluminación.
Ellos se vuelven campeones invencibles,
Por el bien del orgullo y la vanidad,
Y habiendo conquistado todo su orgullo,
Ellos comienzan su búsqueda de iluminación.
Ellos siempre se ubican a la cabeza
De aquellos aterrorizados por el miedo,
Y, habiendo otorgado la no-temeridad a ellos,
Los desarrollan hacia la iluminación.
Ellos se vuelven grandes hombres santos,
Con el súper conocimiento y la continencia pura,
Y así inducen a los seres vivos a la moralidad
De la tolerancia, amabilidad y disciplina.
Aquí en el mundo, ellos sin temor sostienen
A aquellos que son maestros para ser servidos,
Y se vuelven sus sirvientes o esclavos,
O sirven como sus discípulos.
Bien entrenados en técnica liberadora,
Ellos demuestran todas las actividades,
Cualquiera que posiblemente pueda ser un medio
Para hacer que los seres se deleiten en el Dharma.
Sus prácticas son infinitas;
Y sus esferas de influencia son infinitas;
Habiendo perfeccionado una sabiduría infinita,
Ellos liberan una infinidad de seres vivos.
Aun para los Budas en sí mismos,
Durante un millón de eones,
O incluso cien millones de eones,
Sería difícil de expresar todas sus virtudes.
Excepto para algunos seres vivos inferiores,
Sin ninguna inteligencia en absoluto,
Hay alguien con algún discernimiento
Que, habiendo escuchado esta enseñanza,
No desearía la suprema iluminación?
*
9. La Puerta del Dharma de la No Dualidad
Entonces, el Licchavi Vimalakirti preguntó a esos bodhisattvas: "Buenos señores, por favor
expliquen cómo entran los bodhisattvas en la puerta del Dharma de la no dualidad!"
El bodhisattva Dharmavikurvana declaró: "Noble señor, producción y destrucción son dos, pero
lo que no es producido y no ocurre no puede ser destruido. Así la obtención de la tolerancia del
no-nacimiento de las cosas es la entrada a la no-dualidad."
El bodhisatvva Srigandha declaró: "Yo y mío son dos. Si no hay presunción de un yo, no habrá
posesividad. Así, la ausencia de presunción es la entrada a la no dualidad".
El bodhisattva Srikuta declaró: "Engaño y purificación son dos. Cuando hay completo
conocimiento del engaño, no habrá engaño acerca de la purificación. El camino que lleva a la
conquista completa de todos los engaños es la entrada a la no dualidad".
El bodhisattva Bhadrajyotis declaró: "Distracción y atención son dos. Cuando no hay
distracción, no habrá atención, ni mentación, ni intensidad mental. Así, la ausencia de la
intensidad mental es la entrada a la no dualidad".
El bodhisattva Subahu declaró: "Espíritu de bodhisattva y espíritu de discípulo son dos. Cuando
ambos son vistos como semejantes a un espíritu ilusorio, no hay espíritu de bodhisattva, ni
ningún espíritu de discípulo. Así, la igualdad de naturalezas de espíritus es la entrada en la no
dualidad".
El bodhisattva Animiza declaró: "Aferrar y no aferrar son dos. Lo que no es aferrado no es
percibido, y lo que no es percibido no es tampoco presumido ni repudiado. Así, la inacción y no
involucramiento de todas las cosas es la entrada en la no dualidad".
El bodhisattva Sunetra declaró: "Unicidad y carencia de carácter son dos. No presumir o
construir algo es ni establecer su unicidad ni establecer su carencia de carácter. Penetrar la
igualdad de estos dos es entrar la no dualidad".
El bodhisattva Tisya declaró: "Bien y mal son dos. No buscar ni el bien ni el mal, la
comprensión de la no dualidad de lo significante y lo sin sentido es la entrada en la no
dualidad".
El bodhisattva Simha declaró: "Pecaminosidad y carencia de pecado son dos. Por medio de la
sabiduría de diamante que penetra hasta lo vivo, no estar atado o liberado es la entrada a la no
dualidad".
El bodhisattva Simhamati declaró: "Decir esto es impuro y esto es inmaculado hacen la
dualidad. Uno que, obteniendo la ecuanimidad, no forma concepción de impureza o
inmaculación , e incluso no completamente sin concepción, tiene ecuanimidad sin ningún logro
de ecuanimidad – él entra en la ausencia de nudos conceptuales. Así, él entra en la no
dualidad".
El bodhisattva Suddhadhimukti declaró: "Decir esto es felicidad y esto es miseria es dualismo.
Uno que está libre de todas las calculaciones, a través de la extrema pureza de la gnosis –su
mente es apartada, como el espacio vacío; y así él entra en la no-dualidad".
El bodhisattva Narayana declaró: "Decir esto es mundano y esto es trascendental es dualismo.
Este mundo tiene la naturaleza de la vaciedad, así que no hay ni trascendencia ni
involucramiento, ni progreso ni quedarse quieto. Así, ni trascender ni estar involucrado, ni
avanzar ni detenerse – esta es la entrada a la no dualidad".
El bodhisattva Dantamati declaró: "Vida y liberación son dualísticos. Habiendo visto la
naturaleza de la vida, uno ni pertenece a ella ni está completamente liberado de ella. Tal
comprensión es la entrada a la no-dualidad".
El bodhisattva Pratyaksadarsana declaró: "Destructible e indestructible son dualísticos. Lo que
es destruido es finalmente destruido. Lo que es finalmente destruido no se vuelve destruido;
así, es llamado indestructible. Lo que es indestructible es instantáneo, y lo que es instantáneo
es indestructible. La experiencia e tal es llamada la entrada al principio de no dualidad".
El bodhisattva Parigudha declaró: "Yo y carencia de yo son dualísticos. Dado que la existencia
del yo no puede ser percibida, que hay para ser llamado sin yo? Así, el no-dualismo de la visión
de su naturaleza es la entrada en la no-dualidad".
El bodhisattva Vidyuddeva declaró: "Conocimiento e ignorancia son dualísticos. Las
naturalezas de ignorancia y conocimiento son las mismas, porque la ignorancia es indefinida,
incalculable, y más allá de la esfera del pensamiento. La realización de esto es la entrada en la
no-dualidad".
El bodhisattva Priyadarsana declaró: " Materia en sí misma es vacía. La vaciedad no resulta de
la destrucción de la materia, sino que la naturaleza de la materia es en sí misma vaciedad. Por
lo tanto, hablar de la vaciedad por un lado, y de la materia, o de la sensación, o del intelecto, o
de la motivación, o de la conciencia por el otro, es enteramente dualístico. La conciencia en sí
misma es vacía. La vaciedad no resulta de la destrucción de la conciencia, sino que la
naturaleza de la conciencia en sí misma es vaciedad. Tal comprensión de los cinco agregados
compulsivos y del conocimiento de ellos como tales por medio de la gnosis es la entrada en la
no-dualidad".
El bodhisattva Prahaketu declaró: "Decir que los cuatro elementos principales son una cosa y el
elemento etéreo del espacio es otra , es dualístico. Los cuatro elementos principales son en sí
mismos la naturaleza del espacio. El pasado en sí mismo es también la naturaleza del espacio.
El futuro en sí mismo es también la naturaleza del espacio. Del mismo modo, el presente en sí
mismo es también la naturaleza del espacio. La gnosis que penetra los elementos de tal modo
es la entrada a la no-dualidad".
El bodhisattva Pramati declaró: " Ojo y forma son dualísticos. Comprender el ojo
correctamente, y no tener apego, aversión, o confusión en consideración a la forma – eso es
llamado paz. Del mismo modo, "oreja" y "sonido", "nariz" y "olor", "lengua" y "gusto", "cuerpo" y
"textura", y "mente" y "fenómenos" – todos son dualísticos. Pero conocer la mente, y no estar ni
apegado, ni con aversión, ni confundido con relación a los fenómenos – eso es llamado paz.
Vivir en tal paz es entrar en la no-dualidad."
El bodhisattva Aksayamati declaró: "La dedicación de la generosidad por el bien de la
obtención de la omnisciencia es dualística. La naturaleza de la generosidad es en sí misma
omnisciencia, y la naturaleza de la omnisciencia en sí misma es total dedicación. Del mismo
modo, es dualístico dedicar la moralidad, la tolerancia, el esfuerzo, la meditación, y la sabiduría
al bien de la omnisciencia. La omnisciencia es la naturaleza de la sabiduría, y la total
dedicación es la naturaleza de la omnisciencia. Así, la entrada en este principio de singularidad
es la entrada en la no-dualidad".
El bodhisattva Gambhiramati declaró: " Es dualístico decir que la vaciedad es una cosa, la
carencia de signos otra, y la carencia de deseos aun otra. Lo que es vacío no tiene signo. Lo
que no tiene signo no tiene deseo. Donde no hay deseo no hay proceso de pensamiento,
mente o conciencia. Ver las puertas de todas las liberaciones en la puerta de una liberación es
la entrada a la no dualidad".
El bodhisattva Santendriya declaró: " Es dualístico decir Buddha, Dharma, y Sangha. El
Dharma en sí mismo es la naturaleza de Buddha, la Sangha en sí misma es la naturaleza del
Dharma, y todos ellos son no compuestos. Lo no-compuesto es espacio infinito, y los procesos
de todas las cosas son equivalentes al infinito espacio. Adaptarse a esto es la entrada en la nodualidad".
El bodhisattva Apratihatanetra declaró: " Es dualístico referirse a agregados y a la cesación de
los agregados. Los agregados en sí mismos son cesación. Por qué? Los puntos de vista
egoístas de los agregados, siendo no producidos ellos mismos, no existen finalmente. Por lo
tanto tales puntos de vista realmente no conceptualizan "estos son agregados" o "esos
agregados cesan". Finalmente, ellos no tienen tales construcciones discriminativas ni tales
conceptualizaciones. Por lo tanto, tales puntos de vista tienen en sí mismos la naturaleza de la
cesación. No-ocurrencia y no-destrucción son la entrada en la no-dualidad".
El bodhisattva Suvinita declaró: " Los votos físicos, verbales y mentales no existen
dualísticamente. Por qué? Estas cosas tienen la naturaleza de la inactividad. La naturaleza de
la inactividad del cuerpo es la misma que la naturaleza de inactividad de la mente. Es
necesario conocer y comprender este hecho de la suprema inactividad de todas las cosas,
porque este conocimiento es la entrada en la no-dualidad".
El bodhisattva Punyaksetra declaró: " Es dualístico considerar a las acciones meritorias,
pecaminosas, o neutrales. El no-emprendimiento de acciones meritorias, pecaminosas o
neutrales es no dualístico. La naturaleza intrínseca de todas esas acciones es vaciedad, donde
finalmente no hay ni mérito, ni pecado, ni neutralidad ni acción en sí misma. El no
completamiento de tales acciones es la entrada a la no-dualidad".
El bodhisattva Padmavyuha declaró: "El dualismo es producido desde la obsesión con el yo,
pero la verdadera comprensión del yo no resulta en dualismo. Quien así reside en la no
dualidad es sin ideación, y esa ausencia de ideación es la entrada en la no dualidad".
El bodhisattva Srigarbha declaró: "La dualidad está constituida por la manifestación perceptiva.
La no dualidad es no objetividad. Por lo tanto, no aferrar y no rechazar en la entrada en la no
dualidad".
El bodhisattva Candrottara declaró: " Oscuridad y luz son dualísticos, pero la ausencia de tanto
oscuridad como de luz es no dualidad. Por qué? En el momento de absorción en la cesación,
no hay ni oscuridad ni luz, y del mismo modo con la naturaleza de todas las cosas. La entrada
en esta ecuanimidad es la entrada en la no dualidad.
El bodhisattva Ratnamudrahasta declaró: "Es dualístico detestar el mundo y regocijarse en la
liberación, y ni detestar el mundo ni regocijarse en la liberación es no dualidad. Por qué? La
liberación puede ser encontrada donde hay atadura, pero donde no hay finalmente atadura,
dónde hay necesidad para la liberación? El mendicante que no está ni atado ni liberado no
experimenta ningún gusto o disgusto y así él entra en la no dualidad".
El bodhisattva Manikutajara declaró: "Es dualístico hablar de buenos caminos y malos caminos.
Uno que está en el camino no está preocupado con buenos o malos caminos. Viviendo en tal
despreocupación, él no entretiene conceptos de "camino" o "no camino". Comprendiendo la
naturaleza de los conceptos, su mente no se engancha en la dualidad. Tal es la entrada en la
no dualidad".
El bodhisattva Satyarata declaró: Es dualístico hablar de "verdadero" y "falso". Cuando uno ve
verdaderamente, uno no ve siquiera una verdad, entonces cómo podría uno ver la falsedad?
Por qué? Uno no ve con el ojo físico, uno ve con el ojo de la sabiduría. Y con el ojo de la
sabiduría uno ve sólo en la medida en que no hay visión ni no visión. Allí, donde no hay ni
visión ni no visión, es la entrada en la no dualidad".
Cuando los bodhisattvas hubieron dado sus explicaciones, todos ellos se dirigieron al príncipe
coronado Manjusri: "Manjusri, cuál es la entrada de los bodhisattvas a la no dualidad?"
Manjusri respondió: "Buenos señores, todos ustedes han hablado bien. Sin embargo, todas sus
explicaciones en sí mismas son dualísticas. No conocer ninguna enseñanza, no expresar nada,
no decir nada, no explicar nada, no anunciar nada, no indicar nada, y no designar nada – esa
es la entrada en la no-dualidad".
Entonces el príncipe coronado Manjusri dijo al Licchavi Vimalakirti: "Todos nosotros hemos
dado nuestras propias enseñanzas, noble señor. Ahora, pueda usted aclarar la enseñanza de
la entrada en el principio de la no-dualidad!"
En esto, el Licchavi Vimalakirti mantuvo su silencio, no diciendo nada en absoluto.
El príncipe coronado Manjusri aplaudió al Licchavi Vimalakirti: "Excelente! Excelente, noble
señor! Esta es de hecho la entrada en la no-dualidad de los bodhisattvas. Aquí no hay utilidad
para las sílabas, sonidos e ideas".
Cuando estas enseñanzas hubieron sido declaradas, cinco mil bodhisattvas entraron la puerta
del Dharma de la no-dualidad y obtuvieron la tolerancia del no-nacimiento de las cosas.
*
10. La Fiesta traída por la Encarnación Emanada
En esto, el venerable Shariputra pensó para sí: "Si estos grandes bodhisattvas no se levantan
antes del mediodía, cuándo van a comer?"
El Licchavi Vimalakirti, conociendo telepáticamente el pensamiento del venerable Shariputra, le
dijo:
"Reverendo Shariputra, el Tathagata ha enseñado las ocho liberaciones. Debes concentrarte
en esas liberaciones, escuchando el Dharma con una mente libre de preocupaciones por las
cosas materiales. Espera un minuto, reverendo Shariputra, y comerás una comida tal como
nunca antes has probado".
Entonces, el Licchavi Vimalakirti se estableció en tal concentración y practicó un hecho
milagroso tal que aquellos bodhisattvas y aquellos grandes discípulos fueron capaces de ver el
universo llamado Sarvagandhasugandha, el cual está localizado en la dirección del cenit, más
allá de tantos campos de Buddha como arenas hay en los cuarenta y dos ríos Ganges. Allí
reside, vive y se manifiesta el Tathagata llamado Sugandhakuta. En ese universo, los árboles
emiten una fragancia que sobrepasa por lejos todas las fragancias, humanas y divinas, de
todos los campos de Buddha de las diez direcciones. En aquel universo, incluso los nombres
"discípulo" y "sabio solitario" no existen, y el Tathagata Sugandhakuta enseña el Dharma a una
reunión de bodhisattvas solamente. En ese universo, todas las casas, las avenidas, los
parques y los palacios están hechos de varios perfumes, y la fragancia del alimento comido por
aquellos bodhisattvas penetra universos inconmensurables. En ese momento, el Tathagata
Sugandhakuta se sentó con sus bodhisattvas a comer esa comida, y las deidades llamadas
Gandhavyuhahara, quienes estaban dedicados todos al Mahayana, sirvieron y atendieron al
Buddha y a sus bodhisattvas. Cada uno en la reunión en la casa de Vimalakirti era capaz de
ver claramente ese universo donde el Tathagata Suganhakuta y sus bodhisattvas estaban
tomando su comida. El Licchavi Vimalakirti se dirigió a la asamblea entera de bodhisattvas:
"Buenos señores, hay entre ustedes alguno a quien le gustaría ir a aquel campo de Buddha a
traer algo de comida?"
Pero, contenidos por el poder supernatural de Manjusri, ninguno de ellos se ofreció a ir.
El Licchavi Vimalakirti dijo al príncipe coronado Manjusri: "Manjusri, no estás avergonzado de
tal asamblea?"
Manjusri respondió: "Noble señor, no declaró el Tathagata "aquellos que son menos educados
no deben ser despreciados?"
Entonces el Licchavi Vimalakirti, sin levantarse de su diván, mágicamente emanó un
bodhisattva-encarnación, cuyo cuerpo era de color dorado, adornado con los signos y marcas
auspiciosas, y de tal apariencia que eclipsó a toda la asamblea. El Licchavi Vimalakirti se dirigió
a aquel bodhisattva encarnado: "Noble hijo, ve en la dirección del cenit y cuando hayas cruzado
tantos campos de Buddha como arenas en los cuarenta y dos ríos Ganges, alcanzarás un
universo llamado Sarvagandhasugandha, donde encontrarás al Tathagata Sugadahkuta
tomando su comida. Ve a él y, habiéndote inclinado ante sus pies, hazle el siguiente pedido: "El
Licchavi Vimalakirti se inclina cien mil veces a tus pies, Oh Señor, y pregunta por tu salud – si
tienes algún pequeño problema, pequeña incomodidad, pequeña inquietud; si estás fuerte,
bien, sin quejas, y viviendo en contacto con la suprema felicidad".
"Habiendo así preguntado sobre su salud, deberás pedirle: "Vimalakirti le pide al Señor que me
dé los restos de su comida, con la cual él completará el trabajo de Buddha en el universo
llamado Saha". (saha significa resistencia, y siempre se refiere a nuestro sistema de mundo
actual). Así, aquellos seres vivos con aspiraciones inferiores serán inspirados con aspiraciones
elevadas, y el buen nombre del Tathagata será celebrado ampliamente y lejos."
En eso, el bodhisattva encarnado dijo: "Muy bien!" al Licchavi Vimalakirti y obedeció sus
instrucciones. A la vista de todos los bodhisattvas, él giró su rostro hacia arriba y se fue, y ellos
no lo vieron más. Cuando él alcanzó el universo Sarvagandhasugandha, se inclinó ante los
pies del Tathagata Sugandhakuta y dijo: "Señor, el bodhisattva Vimalakirti, inclinándose ante
los pies del Señor, lo saluda, diciendo: "tiene usted algún problema, pequeña incomodidad, y
pequeña inquietud? Está usted fuerte, bien, sin quejas, y viviendo en contacto con la suprema
felicidad?" Él luego le pidió, habiéndose inclinado cien mil veces a los pies del Señor: "pueda el
Señor tener gracia y darme los restos de su comida para completar el trabajo de Buddha en el
universo llamado Saha. Luego, aquellos seres vivos que aspiran a caminos inferiores puedan
ganar la inteligencia para aspirar al gran Dharma del Buddha, y el nombre del Buddha será
celebrado ampliamente y lejos".
En eso los bodhisattvas del campo de Buddha del Tathagata Sugandhakuta quedaron atónitos
y preguntaron al Tathagata Sungandhakuta: "Señor, dónde hay semejante gran ser como este?
Dónde está el universo Saha? Qué quiere decir él con "aquellos que aspiran a caminos
inferiores?"
Habiendo sido así interrogado por aquellos bodhisattvas, el Tathagata Sugandhakuta dijo:
"Nobles hijos, el universo Saha existe más allá de varios campos de Buddha en la dirección del
nadir como tantas arenas hay en los cuarenta y dos ríos Ganges. Allí el Tathagata Shakyamuni
enseña el Dharma a los seres vivos que aspiran a los caminos inferiores, en ese campo de
Buddha manchado con las cinco corrupciones. Allí el bodhisattva Vimalakirti, quien vive en la
liberación inconcebible, enseña el Dharma a los bodhisattvas. Él envía a este bodhisattva
encarnación aquí para celebrar mi nombre, para mostrar las ventajas de este universo, y para
incrementar las virtudes de aquellos bodhisattvas."
Los bodhisattvas exclamaron: "Cuán grande debe ser aquel bodhisattva si su encarnación
mágica es así dotada con el poder supernatural, fuerza y no temeridad!"
El Tathagata dijo: "La grandeza de aquel bodhisattva es tal que él envía encarnaciones
mágicas a todos los campos de Buddha de la diez direcciones, y todas esas encarnaciones
completan el trabajo de Buddha para todos los seres vivos en todos aquellos campos de
Buddha".
Entonces, el Tathagata Sungadhakuta virtió algo de su comida, impregnada con todos los
perfumes, en un recipiente fragante y se lo dio al bodhisattva encarnación. Y los noventa
millones de bodhisattvas de aquel universo fueron voluntariamente con él: "Señor, nosotros
también quisiéramos ir a aquel universo Saha, para ver, honrar, y servir al Buddha Shakyamuni
y ver a Vimalakirti y a aquellos bodhisattvas."
El Tathagata declaró: "Nobles hijos, vayan adelante si ustedes creen que es el momento
correcto. Pero, temiendo que aquellos seres vivos se vuelvan locos e intoxicados, vayan sin
sus perfumes. Y, temiendo que aquellos seres vivos del universo Saha se vuelvan celosos de
ustedes, cambien sus cuerpos para esconder su belleza. Y con conciban ideas de contento o
aversión para ese universo. Por qué? Nobles hijos, un campo de Buddha es un campo de
espacio puro, pero los señores Budddhas , para desarrollar a los seres vivos, no revelan todo
de una vez el reino puro de Buddha".
Entonces el bodhisattva encarnación tomó el alimento y partió con los noventa millones de
bodhisattvas y por el poder del Buddha y la operación supernatural de Vimalakirti, desapareció
de aquel universo Sarvagandhasugandha y apareció de nuevo en la casa de Vimalakirti en una
fracción de segundo. El Licchavi Vimalakirti creó noventa millones de tronos de león
exactamente como aquellos que ya estaban allí, y los bodhisattvas se sentaron. Luego, el
bodhisattva encarnación dio el recipiente lleno de comida a Vimalakirti, y la fragancia de
aquella comida penetró enteramente la gran ciudad de Vaisali y su dulce perfume se esparció a
través de cien universos.
En la ciudad de Vaisali, los Brahmanes, dueños de casa, y aun el Licchavi cacique
Candracchattra, habiendo notado esta fragancia, quedaron asombrados y llenos de maravilla.
Ellos estaban tan limpios en cuerpo y mente que fueron de una vez a la casa de Vimalakirti,
junto con todos los ochenta y cuatro mil de los Licchavis. Viendo allí a los bodhisattvas
sentados en los altos, amplios y hermosos tronos de león, fueron llenados de admiración y gran
gozo. Todos ellos se inclinaron ante aquellos grandes discípulos y bodhisattvas y luego se
sentaron a un lado. Y los dioses de la tierra, los dioses del mundo del deseo, y los dioses del
mundo material, atraídos por el perfume, también llegaron a la casa de Vimalakirti. Entonces, el
Licchavi Vimalakirti habló al anciano Shariputra y a los grandes discípulos: "reverendos, coman
la comida del Tathagata! Es ambrosia perfumada por la gran compasión. Pero no fijen sus
mentes en actitudes mentales estrechas, temiendo ser incapaces de recibir este regalo".
Pero algunos de los discípulos ya habían tenido el pensamiento: "Cómo puede tan gran
multitud comer tan poca cantidad de comida?"
Entonces el bodhisattva encarnación dijo a aquellos discípulos: "No comparen, venerables, su
propia sabiduría y méritos con la sabiduría y los méritos del Tathagata! Por qué? Por ejemplo,
los cuatro grandes océanos podrían secarse, pero esta comida nunca sería agotada. Si todos
los seres vivos fueran a comer durante un eon una cantidad de esta comida igual al Monte
Sumeru en tamaño, no sería agotada. Por qué? Surgida de la moralidad inagotable,
concentración y sabiduría, los restos de la comida del Tathagata contenidos en este recipiente
no pueden ser agotados".
De hecho, la asamblea entera fue satisfecha por esa comida, y la comida no fue agotada del
todo. Habiendo comido esa comida, surgió en los cuerpos de aquellos bodhisattvas, discípulos,
Sakras, Bramas, Lokapalas, y otros seres vivos, bendición así como la bendición de los
bodhisattvas del universo Sarvasukhamandita. Y de todos los poros de su piel emanó un
perfume como aquel de los árboles que crecen en el universo Sarvagandhasugandha.
Entonces, el Licchavi Vimalakirti adrede se dirigió a aquellos bodhisattvas que habían venido
del campo de Buddha del Señor Tathagata Sugandhakuta: Nobles señores, cómo enseña el
Tathagata Sugandhakuta su Dharma?"
Ellos respondieron: "El Tathagata no enseña el Dharma por medio de sonidos y lenguaje. Él
disciplina a los bodhisattvas sólo por medio de perfumes. A los pies de cada árbol de perfume
se sienta un bodhisattva, y los árboles emiten perfumes como este. Desde el momento en que
ellos huelen ese perfume, los bodhisattvas obtienen la concentración llamada "fuente de todas
las virtudes del bodhisattva". Desde el momento en que ellos obtienen esa concentración,
todas las virtudes de los bodhisattvas son producidas en ellos".
Aquellos bodhisattvas entonces preguntaron al Licchavi Vimalakirti: "Cómo enseña el Dharma
el Buddha Shakyamuni?"
Vimalakirti respondió: "Buenos señores, estos seres vivos aquí son difíciles de disciplinar. Por
consiguiente, él les enseña con discursos apropiados para disciplinar a los salvajes e
incivilizados. Cómo disciplina él a los salvajes e incivilizados? Qué discursos son apropiados?
Aquí están:
"Esto es el infierno. Este es el mundo animal. Este es el mundo del señor de la muerte. Estas
son las adversidades. Estos son los renacimientos con facultades estropeadas. Estos son
malos actos físicos, y éstas son las retribuciones por los malos actos físicos.
Estos son malos actos verbales, y éstas son las retribuciones por los malos actos verbales.
Estos son malos actos mentales, y éstas son las retribuciones por los malos actos mentales.
Esto es matar. Esto es robar. Esto es mala conducta sexual. Esto es mentir. Esto chismorrear.
Esto es habla crítica. Esto es codicia. Esto es malicia. Esto es falsos puntos de vista. Estas son
sus retribuciones. Esto es avaricia, y este es su efecto. Esto es inmoralidad. Esto es odio. Esto
es pereza. Este es el fruto de la pereza. Esta es falsa sabiduría y este es el fruto de la falsa
sabiduría. Estas son transgresiones de los preceptos. Este es el voto de la liberación personal.
Esto debería ser hecho y aquello no debería ser hecho. Esto es propio y aquello debería ser
abandonado. Esto es una oscuridad y aquello es sin oscuridad. Esto es pecado y aquello surge
sobre el pecado. Este es el camino y aquel es el camino erróneo. Esto es virtud y aquello es el
mal. Esto es culpabilidad y aquello es sin culpa. Esto es contaminado y aquello es sin mancha.
Esto es mundano y aquello es trascendental. Esto es compuesto y aquello es no compuesto.
Esto es pasión y aquello es purificación. Esto es vida y aquello es liberación."
"Así, por medio de estas variadas explicaciones del Dharma, el Buddha entrena las mentes de
aquellos seres vivos que son exactamente como los caballos salvajes. Así como los caballos
salvajes o los elefantes salvajes no serán domados a menos que el látigo los penetre hasta la
médula, así los seres vivos que son salvajes y difíciles de civilizar son disciplinados por medio
de discursos acerca de toda clase de miserias."
Los bodhisattvas dijeron: "Así es establecida la grandeza del Buddha Shakyamuni! Es
maravilloso cómo, escondiendo su poder milagroso, él civiliza a los seres vivos salvajes que
son pobres e inferiores. Y los bodhisattvas que se asientan en el campo de Buddha de tan
intensos trabajos deben tener inconcebiblemente gran compasión!"
El Licchavi Vimalakirti declaró: "Así es esto, buenos señores! Es como ustedes dicen. La gran
compasión de los bodhisattvas que reencarnan aquí es extremadamente firme. En una sola
vida en este universo, ellos completan tanto beneficio para los seres vivos. Tanto beneficio
para los seres vivos no podría ser completado en el universo Sarvagandhasugandha ni aun en
cien mil eones. Por qué? Buenos señores, en este universo Saha, hay diez prácticas virtuosas,
las cuales no existen en ningún otro campo de Buddha. Cuáles son esas diez? Aquí están:
ganar al pobre por la generosidad; ganar al inmoral por la moralidad; ganar al odioso por medio
de la tolerancia; ganar al perezoso por medio del esfuerzo; ganar al mentalmente perturbado
por medio de la concentración; ganar al falso sabio por medio de la verdadera sabiduría;
mostrar a aquellos que sufren por las ocho adversidades cómo levantarse sobre ellas; enseñar
el Mahayana a aquellos de comportamiento de mente estrecha; ganar a aquellos que no han
producido las raíces de virtud por medio de las raíces de virtud; y desarrollar a los seres vivos
sin interrupción a través de los cuatro medios de unificación. Aquellos que se comprometen en
esas diez prácticas virtuosas no existen en ningún otro campo de Buddha".
Nuevamente los bodhisattvas preguntaron: " Cuántas cualidades debe tener un bodhisattva,
para ir seguro e ileso a un campo de Buddha puro después de trasmigrar en la muerte desde
este universo Saha?"
Vimalakirti respondió: "Después de transmigrar en la muerte desde este universo Saha, un
bodhisattva debe tener ocho cualidades para alcanzar un campo de Buddha puro seguro e
ileso. Cuáles son las ocho? Él debe resolverse a sí mismo: "Debo beneficiar a todos los seres
vivos, sin buscar ni siquiera el mínimo beneficio para mí. Debo soportar todas las miserias de
todos los seres vivos y dar todas mis raíces acumuladas de virtud a todos los seres vivos. No
debo tener resentimiento hacia ningún ser vivo. Debo regocijarme en todos los bodhisattvas
como si fueran el Maestro. No debo descuidar ninguna enseñanza, ya sea que las hubiera
escuchado o no anteriormente. Debo controlar mi mente, sin codiciar las ganancias de otros, y
sin tener orgullo de las mías propias. Debo examinar mis propias faltas y no culpar a otros por
sus faltas. Debo obtener placer en estar concientemente atento y debo emprender todas las
virtudes."
"Si un bodhisattva tiene estas ocho cualidades, cuando él trasmigre en la muerte desde este
universo Saha, él irá seguro e ileso a un campo de Buddha puro."
Cuando el Licchavi Vimalakirti y el príncipe coronado Manjusri vieron así enseñado el Dharma
a la multitud reunida allí, cien mil seres vivos concibieron el espíritu de Anuttara Samyak
Sambodhi, y diez mil bodhisattvas obtuvieron la tolerancia del no nacimiento de las cosas.
*
11. Lección de lo Destructible y lo Indestructible
Mientras tanto, el área en la cual el Señor estaba enseñando el Dharma en el jardín de
Amrapali se expandió y se volvió más grande, y la totalidad de la asamblea apareció teñida de
un matiz dorado. En eso, el venerable Ananda preguntó al Buddha: "Señor, esta expansión y
agrandamiento del jardín de Amrapali y este matiz dorado de la asamblea – qué presagian
estos signos auspiciosos?"
El Buddha declaró: "Ananda, estos signos auspiciosos presagian que el Licchavi Vimalakirti y el
príncipe coronado Manjusri, asistidos por una gran multitud, están llegando a la presencia del
Tathagata".
En ese momento el Licchavi Vimalakirti dijo al príncipe coronado Manjusi: "Manjusri, llevemos a
estos muchos seres vivos ante la presencia del Señor, así ellos pueden ver al Tathagata e
inclinarse ante él!"
Manjusri respondió: "Noble señor, envíelos si usted siente que es el momento apropiado!"
En eso el Licchavi Vimalakirti realizó el hecho milagroso de ubicar a la asamblea entera, repleta
de tronos, en su mano derecha y luego, habiéndose transportado él mismo mágicamente ante
la presencia del Buddha, los colocó en el suelo. Él se inclinó ante los pies del Buddha,
rodeándolo por la derecha siete veces con las palmas juntas, y se retiró a un lado. Los
bodhisattvas que habían venido desde el campo de Buddha del Tathagata Sugandhakuta
descendieron de sus tronos de león y, inclinándose a los pies del Buddha, colocaron sus
palmas juntas en reverencia y se retiraron a un lado. Y los otros bodhisattvas, grandes héroes
espirituales, y los grandes discípulos descendieron de sus tronos igualmente y, habiéndose
inclinado a los pies del Buddha, se retiraron a un lado. Del mismo modo todos aquellos Indras,
Brahmas, Lokapalas, y dioses se inclinaron a los pies del Buddha, pusieron sus palmas juntas
en reverencia y se retiraron a un lado.
Entonces, el Buddha, habiendo deleitado a aquellos bodhisattvas con saludos, declaró: "Nobles
hijos, siéntense sobre sus tronos!"
Así comandados por el Buddha, tomaron sus tronos.
El Buddha dijo a Shariputra: "Shariputra, viste las prácticas milagrosas de los bodhisattvas,
aquellos mejores seres?"
"Las he visto, Señor".
"Qué concepto tuviste hacia ellas?"
"Señor, yo produje el concepto de inconcebibilidad hacia ellas. Sus actividades aparecieron
inconcebibles para mí al punto en que era incapaz de pensar en ellas, juzgarlas, o incluso
imaginarlas".
Entonces el venerable Ananda preguntó al Buddha: "Señor, qué es este perfume, los gustos de
los cuales jamás he olido antes?"
El Buddha respondió: "Ananda, este perfume emana desde todos los poros de todos esos
bodhisattvas".
Shariputra agregó: "Venerable Ananda, este mismo perfume emana desde todos nuestros
poros también!"
Ananda: De dónde viene el perfume?
Shariputra: " El Licchavi Vimalakirti obtuvo algo de comida del universo llamado
Sarvagandhasugandha, el campo de Buddha del Tathagata Sugandhakuta, y este perfume
emana desde los cuerpos de todos quienes tomaron parte de esa comida".
Entonces el venerable Ananda se dirigió al Licchavi Viamalakirti: "Cuánto tiempo permanecerá
este perfume".
Vimalakirti: Hasta que sea digerido.
Ananda: Cuándo será digerido?
Vimalakirti: Será digerido en cuarenta y nueve días, y su perfume emanará durante siete días
más después de eso, pero no habrá problema de indigestión durante ese tiempo. Más aun,
reverendo Ananda, si los monjes que no han entrado a la última determinación comen esta
comida, será digerida cuando ellos entren en esa determinación, no será digerida hasta que
sus mentes estén totalmente liberadas. Si los seres vivos que no han concebido el espíritu de
Anuttara Samyak Samodhi comen esta comida, será digerida cuando ellos conciban el espíritu
de Anuttara Samyak Sambodhi. Si aquellos que han concebido el espíritu de Anuttara Samyak
Sambodhi comen esta comida, no será digerida hasta que ellos hayan obtenido tolerancia. Y si
aquellos quienes han obtenido tolerancia comen esta comida, será digerida cuando ellos se
hayan vuelto bodhisattvas a una vida de la Buddheidad. Reverendo Ananda, es como la
medicina llamada "deliciosa", que alcanza el estómago pero no es digerida hasta que todos los
venenos han sido eliminados, sólo entonces es digerida. Así, reverendo Ananda, esta comida
no es digerida hasta que todos lo venenos de las pasiones hayan sido eliminadas, sólo
entonces es digerida."
Entonces, el venerable Ananda dijo al Buddha: " Señor, es maravilloso que esta comida
complete el trabajo del Buddha!"
"Así es, Ananda! Es como dices, Ananda! Hay campos de Buddha que completan el trabajo de
Buddha por medio de los bodhisattvas; aquellos que lo hacen por medio de luces; aquellos que
lo hacen por medio del árbol de la iluminación; aquellos que lo hacen por medio de la belleza
física y las marcas de Tathagata; aquellos que lo hacen por medio de mantos religiosos;
aquellos que lo hacen por medio del bien; aquellos que lo hacen por medio del agua; aquellos
que lo hacen por medio de los jardines; aquellos que lo hacen por medio de palacios; aquellos
que lo hacen por medio de mansiones; aquellos que lo hacen por medio de encarnaciones
mágicas; aquellos que lo hacen por medio del espacio vacío; y aquellos que lo hacen por
medio de luces en el cielo. Por qué es esto así, Ananda? Porque por estos varios medios, los
seres vivos se vuelven disciplinados. Igualmente, Ananda, hay campos de Buddha que
completan el trabajo de Buddha por medio de enseñar a los seres vivos palabras, definiciones,
y ejemplos, tales como "sueños", "imágenes", "el reflejo de la luna en el agua", "ecos",
"ilusiones", y "espejismos"; y aquellos que completan el trabajo de Buddha haciendo las
palabras comprensibles. También, Ananda, hay campos de Buddha completos que completan
el trabajo de Buddha para los seres vivos sin habla, en silencio, inexpresibilidad, y inenseñabilidad.
Ananda, entre todas las actividades, disfrutes, y prácticas de los Budas, no hay
ninguna que no complete el trabajo de Buddha, porque todas disciplinan a los seres vivos.
Finalmente, Ananda, los Buddhas completan el trabajo de Buddha por medio de los cuatro
Maras y todos los ochenta y cuatro mil tipos de pasión que afligen a los seres vivos. Ananda,
esta es una puerta del Dharma llamada "Introducción a todas las cualidades de Buddha". El
bodhisattva que entra en esta puerta del Dharma no experimenta ni gozo ni orgullo cuando se
confronta con un campo de Buddha adornado con el esplendor de todas las cualidades nobles,
y no experimenta ni tristeza ni aversión cuando se confronta con un campo de Buddha
aparentemente sin tal esplendor, pero en todos los casos produce una profunda reverencia
hacia todos los Tathagatas. De hecho, es maravilloso cómo todos los Señores Budas, quienes
comprenden la igualdad de todas las cosas, manifiestan toda clase de campos de Buddha para
desarrollar a los seres vivos! Ananda, así como los campos de Buddha son diversos en cuanto
a sus cualidades específicas pero no tienen diferencia en cuanto al cielo que los cubre, así,
Ananda, los Tathagatas son diversos en cuanto a sus cuerpos físicos pero no difieren en
cuanto a su gnosis sin impedimento. Ananda, todos los Budas son lo mismo en cuanto a la
perfección de las cualidades de Buddha, esto es: sus formas, sus colores, su radiantez, sus
cuerpos, sus marcas, su nobleza, su moralidad, su concentración, su sabiduría, su liberación,
la gnosis y la visión de la liberación, sus fuerzas, su no-temeridad, sus cualidades de Buddha
especiales, su gran amor, su gran compasión, sus intenciones de ayuda, sus actitudes, sus
prácticas, sus caminos, la extensión de sus vidas, sus enseñanzas del Dharma, su desarrollo y
liberación de los seres vivos, y su purificación de los campos de Buddha. Por consiguiente,
ellos son llamados "Samyaksambuddhas!, "Tathagatas", y "Buddhas". Ananda, si tu vida durara
un eon entero, no sería fácil para ti comprender completamente el significado extensivo y la
significancia verbal precisa de estos tres nombres. También, Ananda, si todos los seres vivos
de este universo galáctico de billones de mundos fueran como tú los más sobresalientes de los
enseñados y los más sobresalientes de aquellos dotados con memoria y encantamientos – y
fueran a dedicarse durante un eon entero, ellos aun serían incapaces de comprender el
significado exacto y extensivo de las tres palabras "Samyaksambuddha", "Tathagata", y
"Buddha". Así, Ananda, la iluminación de los Buddhas es inconmensurable, y la sabiduría y
elocuencia de los Tathagatas son inconcebibles."
Entonces, el venerable Ananda se dirigió al Buddha: "Señor, desde este día en adelante, ya no
me declararé como el más sobresaliente de los enseñados".
El Buddha dijo: "No te desanimes, Ananda! Por qué? Yo te nombro, Ananda, el más
sobresaliente de los enseñados, con los discípulos en mente, sin considerar a los bodhisattvas.
Mira, Ananda, mira a los bodhisattvas. Ellos no pueden ser sondeados ni aun por el más sabio
de los hombres. Ananda, uno puede sondear las profundidades del océano, pero uno no puede
sondear las profundidades de la sabiduría, gnosis, memoria, encantamientos, o elocuencia de
los bodhisattvas. Ananda, tú deberías permanecer en ecuanimdad en consideración a los
hechos de los bodhisattvas. Por qué? Ananda, esas maravillas exhibidas en una sola mañana
por el Licchavi Vimalakirti no podrían ser practicadas por los discípulos y los sabios solitarios
quienes han obtenido poderes milagrosos, si ellos fueran a dedicar todos sus poderes de
encarnación y transformación durante cien mil millones de eones."
Entonces, todos los bodhisattvas desde el campo de Buddha del Tathagata Sugandhakuta
unieron sus palmas en reverencia y, saludando al Tathagata Shakyamuni, se dirigieron a él
como sigue: "Señor, cuando recién llegamos a este campo de Buddha, concebimos una idea
negativa, pero ahora abandonamos esta idea errónea. Por qué? Señor, los reinos de los Budas
y sus habilidades en técnica de liberación son inconcebibles. Para desarrollar a los seres vivos,
ellos manifiestan tal y tal campo para adaptarse a tal y tal ser vivo. Señor, por favor denos una
enseñanza por la cual podamos recordarlo, cuando hayamos regresado a
Sarvagandhasugandha".
Siendo así solicitado, el Buddha declaró: "Nobles hijos, hay una liberación de bodhisattvas
llamada "destructible e indestructible". Ustedes deben entrenarse en esta liberación. Qué es
esto? "Destructible" se refiere a las cosas compuestas. "Indestructible" se refiere a lo nocompuesto.
Pero el bodhisattva no debería ni destruir lo compuesto ni residir en lo nocompuesto.
No destruir las cosas compuestas consiste en no perder el gran amor; no
abandonar la gran compasión; no olvidar la mente omnisciente generada por la gran
resolución; no cansarse en el desarrollo positivo de los seres vivos; no abandonar los medios
de unificación; abandonar cuerpo y mente para sostener el santo Dharma; nunca estar
satisfecho con las raíces de virtud ya acumuladas; obtener placer en la dedicación habilidosa;
no tener pereza en buscar el Dharma; estar sin reticencia egoísta en enseñar el Dharma; no
ahorrar esfuerzos en ver y venerar a los Tathagatas; estar sin temor en las reencarnaciones
voluntarias; no estar ni orgulloso en el éxito ni deprimido en el fracaso; no despreciar a los mal
enseñados, y respetar a los enseñados como si fueran el Maestro en sí mismo; hacer
razonables a aquellos cuyas pasiones son excesivas; obtener placer en la soledad, sin ser
apegado a ella; no anhelar la propia felicidad de uno sino anhelar la felicidad de los otros;
concebir el trance, la meditación, y la ecuanimidad como si fueran el infierno Avici; concebir el
mundo como un jardín de liberación; considerar a los mendigos como maestros espirituales;
considerar el abandonar todas las posesiones como el medio de realizar la Buddheidad;
considerar a los seres inmorales como salvadores; considerar las trascendencias como padres;
considerar las ayudas de la iluminación como sirvientes; nunca cesar la acumulación de raíces
de virtud; establecer las virtudes de todos los campos de Buddha en su propio campo de
Buddha; ofrecer sacrificios puros ilimitados a la plenitud de las marcas y signos auspiciosos;
adornar el cuerpo, habla y mente por medio de la abstención de todos los pecados; continuar
en las reencarnaciones durante innumerables eones, mientras se purifica el cuerpo habla y
mente; evitar el desánimo, a través del heroísmo espiritual, cuando se aprenden las
inconmensurables virtudes del Buddha; esgrimir la afilada espada de sabiduría para castigar a
las pasiones enemigas; conocer bien los agregados, los elementos, y los sentidos para
soportar las cargas de todos los seres vivos; arder con energía para conquistar a los ejércitos
de demonios; buscar el conocimiento para evitar el orgullo; estar contento con el poco deseo
para deleitar a toda la gente; estar sin faltas en todas las actividades para conformar a toda la
gente; producir el súper conocimiento para completar realmente todas las tareas de beneficiar
a los seres vivos; Adquirir encantamientos, memoria y conocimiento para retener todo
aprendizaje; comprender los grados de las facultades espirituales de la gente para dispersar
las dudas de todos los seres vivos; exhibir hechos milagrosos invencibles para enseñar el
Dharma; tener habla irresistible por medio de adquirir la elocuencia sin impedimento; saborear
el éxito humano y divino por medio de purificar el sendero de las diez virtudes; establecer el
camino de los estados puros de Brahma por medio de cultivar los cuatro inconmensurables;
invitar a los Buddhas a enseñar el Dharma, regocijándose en ellos, y aplaudiéndolos, así
entonces obtener la voz melodiosa de un Buddha; disciplinar el cuerpo, habla y mente,
manteniendo así el progreso espiritual constante; estar sin apego a nada y adquirir así el
comportamiento de un Buddha; reunir a la orden de los bodhisattvas para atraer a los seres al
Mahayana; y ser concientemente atento todo el tiempo sin descuidar ninguna buena cualidad.
Nobles hijos, un bodhisattva que así se aplique a sí mismo al Dharma es un bodhisattva que no
destruye el reino compuesto. Qué es no residir en lo no compuesto? El bodhisattva practica la
vaciedad, pero él no realiza la vaciedad. Él practica la carencia de signos pero no realiza la
carencia de signos. Él practica la carencia de deseos pero no realiza la carencia de deseos. Él
practica la no acción pero no realiza la no acción. Él conoce la impermanencia pero no es
complaciente acerca de sus raíces de virtud. Él considera la miseria, pero reencarna
voluntariamente. Él conoce la carencia de yo pero no se desperdicia a sí mismo. Él considera a
apacibilidad pero no busca la paz extrema. Él atesora la soledad pero no evita los esfuerzos
físicos y mentales. Él considera la carencia de lugar pero no abandona el lugar de las buenas
acciones. Él considera la carencia de ocurrencia pero emprende para soportar las cargas de
todos los seres vivos. Él considera la inmaculación, y aun él sigue el proceso del mundo. Él
considera la carencia de movimiento, y aun se mueve para desarrollar a todos los seres vivos.
Él considera la carencia de yo y aun no abandona la gran compasión hacia todos los seres
vivos. Él considera el no nacimiento, y aun no cae en la última determinación de los discípulos.
Él considera la vanidad, futilidad, insustancialidad, dependencia, y carencia de lugar, y aun se
establece a sí mismo sobre los méritos que no son vanos, sobre el conocimiento que no es
fútil, sobre las reflexiones que son sustanciales, sobre el esforzarse para la consagración de la
gnosis independiente, y sobre la familia de Buddha en su significado definitivo. Así, nobles
hijos, un bodhisattva que aspira a tal Dharma ni descansa en lo no-compuesto ni destruye lo
compuesto. Más aun, nobles hijos, para completar el almacén de mérito, un bodhisattva no
descansa en lo no-compuesto, y, para completar el almacén de sabiduría, él no destruye lo
compuesto. Para completar el gran amor, él no descansa en lo no-compuesto, y, para
completar la gran compasión, él no destruye las cosas compuestas. Para desarrollar a los
seres vivos, él no descansa en lo no-compuesto, y para aspirar a las cualidades de Buddha, él
no destruye las cosas compuestas. Para perfeccionar las marcas de la Buddheidad, él no
descansa en lo no-compuesto, y, para perfeccionar la gnosis de omnisciencia, él no destruye
las cosas compuestas. Fuera de la habilidad en técnica liberadora, él no descansa en lo nocompuesto,
y, a través del completo análisis con su sabiduría; él no destruye las cosas
compuestas. Para purificar el campo de Buddha, él no descansa en lo no-compuesto, y, por el
poder de la gracia del Buddha, él no destruye las cosas compuestas. Porque él siente las
necesidades de los seres vivos, él no descansa en lo no-compuesto, y, para mostrar
verdaderamente el significado del Dharma, él no destruye las cosas compuestas. A causa de
su acumulación de raíces de virtud, él no descansa en lo no-compuesto, y a causa de su
entusiasmo instintivo hacia esas raíces de virtud, él no destruye las cosas compuestas. Para
completar sus plegarias, él no descansa en lo no-compuesto, y, a causa de que no tiene
deseos, él no destruye las cosas compuestas. A causa de que su pensamiento positivo es
puro, él no descansa en lo no-compuesto, y, porque su gran resolución es pura, él no destruye
las cosas compuestas. Para actuar con los cinco súper conocimientos, él no descansa en lo
no-compuesto, y, a causa de los seis súper conocimientos de la gnosis de Buddha, él no
destruye las cosas compuestas. Para completar las seis trascendencias, él no descansa en lo
no-compuesto, y, para completar el tiempo, él no destruye las cosas compuestas. Para reunir
los tesoros del Dharma, él no descansa en lo no-compuesto, y, a causa de que no gusta de
enseñanzas de mente estrecha, él no destruye las cosas compuestas. Porque él reúne todas
las medicinas del Dharma, él no descansa en lo no-compuesto, y, para aplicar la medicina del
Dharma apropiadamente, él no destruye las cosas compuestas. Para confirmar sus
compromisos, él no descansa en lo no-compuesto, y, para reparar cualquier falla de esos
compromisos, él no destruye las cosas compuestas. Para preparar todos los elixires del
Dharma, él no descansa en lo no-compuesto, y, para dar el néctar de ese Dharma sutil, él no
destruye las cosas compuestas. Porque él conoce completamente todas las enfermedades
debidas a las pasiones, él no descansa en lo no-compuesto, y, para curar todas las
enfermedades de todos los seres vivos, él no destruye las cosas compuestas. Así, nobles hijos,
el bodhisattva no destruye las cosas compuestas ni descansa en lo no-compuesto, y esa es la
liberación de los bodhisattvas llamada "destructible e indestructible". Nobles señores, ustedes
deberían también esforzarse en esto".
Entonces, aquellos bodhisattvas, habiendo escuchado esta enseñanza, fueron satisfechos,
deleitados, y reverentes. Ellos fueron llenados con regocijo y felicidad de la mente. Para
venerar al Buddha Shakyamuni y a los bodhisattvas del universo Saha, así como a sus
enseñanzas, ellos cubrieron la totalidad de la tierra de este universo de billones de mundos con
un polvo fragante, incienso, perfumes y flores hasta la altura delas rodillas. Habiendo
agasajado así a toda la comitiva del Tathagata, inclinaron sus cabezas a los pies del Buddha, y
rodéandolo por la derecha tres veces, ellos cantaron un himno a él. Luego desaparecieron del
universo y en un instante estuvieron de nuevo en el universo Sarvagandhasugandha.
*
12. Visión del Universo Abhirati y del Tathagata Aksobhya
En esto, el Buddha dijo al Licchavi Vimalakirti: "Noble hijo, cuando vieras al Tathagata, cómo lo
verías?"
Así preguntado, el Licchavi Vimalakirti dijo al Buddha: "Señor, cuando yo viera al Tathagata, lo
vería no viendo a ningún Tathagata. Por qué? Lo veo como no nacido del pasado, no pasando
hacia el futuro, y no residiendo en el presente. Por qué? Él es la esencia, la cual es la realidad
de la materia, pero él no es materia. Él es la esencia, la cual es la realidad de la sensación,
pero él no es la sensación. Él es la esencia, la cual es la realidad del intelecto, pero él no es el
intelecto. Él es la esencia, la cual es la realidad de la motivación, y aun él no es la motivación.
Él es la esencia, la cual es la realidad de la conciencia, y aun él no es la conciencia. Como el
elemento del espacio, él no reside en ninguno de los cuatro elementos. Trascendiendo el
alcance de ojo, oído, nariz, lengua, cuerpo y mente, él no es producido en los seis sentidos. Él
no está involucrado en los tres mundos, está libre de los tres engaños, está asociado con la
triple liberación, está dotado con los tres conocimientos, y verdaderamente ha obtenido lo in
obtenible. El Tathagata al alcanzado el extremo de desapego en consideración a todas las
cosas, y aun él no es un límite-realidad. Él reside en la realidad última, y aun no hay relación
entre eso y él. Él no es producido desde las causas, ni depende de las condiciones. Él no es
sin ninguna característica, ni tiene ninguna característica. Él no tiene naturaleza individual ni
ninguna diversidad de naturalezas. Él no es una concepción, ni una construcción mental, ni es
una no-concepción. Él no es ni la otra orilla, ni esta orilla, ni el medio. Él no está aquí, ni allí, ni
en ninguna otra parte. Él no es esto ni aquello. Él no puede ser descubierto por la conciencia,
ni es inherente a la conciencia. Él no es ni oscuridad ni luz. Él no es nombre ni signo. Él no es
ni débil ni fuerte. Él no vive en ningún país o dirección. Él no es bueno ni malo. Él no es
compuesto ni no-compuesto. Él no puede ser explicado como teniendo algún significado
cualquiera. El Tathagata no es ni generosidad ni avaricia, ni moralidad ni inmoralidad, ni
tolerancia ni malicia, ni esfuerzo ni pereza, ni concentración ni distracción, ni sabiduría ni
ignorancia. Él es inexpresable. Él no es ni verdad ni falsedad; ni escape del mundo ni fracaso
en escapar del mundo; ni causa e involucramiento en el mundo ni no causa de involucramiento
en el mundo; él es la cesación de toda teoría y toda práctica. Él no es ni un campo de mérito ni
un no campo de mérito; él es ni merecedor de ofrendas ni no merecedor de ofrendas. Él no es
un objeto, y no puede ser contactado. Él no es una totalidad, ni una conglomeración. Él
sobrepasa todos los cálculos. Él es completamente inigualado, y aun igual a la última realidad
de las cosas. Él es sin par, especialmente en esfuerzo. Él sobrepasa toda medida. Él no va, no
se queda, y no pasa más allá. Él no es ni visto, escuchado, distinguido ni conocido. Él es sin
ninguna complejidad, habiendo obtenido la ecuanimidad de la gnosis omnisciente. Igual hacia
todas las cosas, él no discrimina entre ellas. Él es sin reproche, sin exceso, sin corrupción, sin
concepción, y sin intelectualización. Él es sin actividad, sin nacimiento, sin ocurrencia, sin
origen, sin producción, y sin no producción. Él es sin miedo y sin subconciencia; sin tristeza, sin
gozo, y sin violencia. Ninguna enseñanza verbal puede expresarlo. Tal es el cuerpo del
Tathagata y así debería él ser visto. Quien lo ve así, ve verdaderamente. Quien lo ve de otro
modo, ve falsamente".
El venerable Shariputra entonces le preguntó al Buddha: "Señor, en qué campo de Buddha
murió el noble Vimalakirtim antes de reencarnar en este campo de Buddha?"
El Buddha dijo: "Shariputra, pregúntale a este buen hombre directamente dónde murió para
reencarnar aquí".
Entonces el venerable Shariputra preguntó al Licchavi Vimalakirti: "Noble señor, dónde murió
usted para reencarnar aquí?"
Vimalakirti declaró: " Hay algo entre las cosas que ves, anciano, que muera o renazca".
Shariputra: No hay nada que muera o sea renacido.
Vimalakirti: del mismo modo, reverendo Shariputra, como todas las cosas n mueren ni son
renacidas, por qué preguntas "dónde moriste para reencarnar aquí?". Reverendo Shariputra, si
uno fuera a preguntar a un hombre o a una mujer creada por un mago dónde él o ella han
muerto para reencarnar aquí, qué crees que él o ella responderían?"
Shariputra: Noble señor, una creación mágica no muere, ni es renacida.
Vimalakirti: Reverendo Shariputra, no declaró el Tathagata que todas las cosas tienen la
naturaleza de una creación mágica?
Shariputra: sí, noble señor, eso es de hecho así.
Vimalakirti: reverendo Shariputra, "muerte" es un fin de una creación, y "renacimiento" es la
continuación de una creación. Pero, si bien un bodhisattva muere, él no pone fin a la creación
de las raíces de virtud, y si bien él es renacido, él no se adhiere a la continuación del pecado.
Entonces el Buddha dijo al venerable Shariputra: "Shariputra, esta persona santa vino aquí
desde la presencia del Tathagata Aksobhya en el universo Abhirati".
Shariputra: Señor, es maravilloso que esta persona santa, habiendo dejado un campo de
Buddha tan puro como Abhirati, debiera gozar de un campo de Buddha tan lleno de defectos
como este universo Saha!
Entonces el Licchavi Vimalakirti dijo: "Shariputra, qué crees? La luz del sol acompaña a la
oscuridad?"
Shariputra: ciertamente no, noble señor!
Vimalakirti: entonces los dos no van juntos?
Shariputra: noble señor, aquellos dos no van juntos. Tan pronto como el sol aparece, toda la
oscuridad es destruida.
Vimalakirti: entonces por qué el sol surge sobre el mundo?
Shariputra: surge para iluminar al mundo, y para eliminar la oscuridad.
Vimalakirti: así del mismo modo, reverendo Shariputra, el bodhisattva reencarna
voluntariamente en campos de Buddha impuros para purificar a los seres vivos, para hacer que
la luz de la sabiduría brille, y para aclarar la oscuridad. Dado que ellos no se asocian con las
pasiones, ellos disipan la oscuridad de las pasiones de todos los seres vivos.
En eso, la multitud entera experimentó el deseo de contemplar el universo Abhirati, al
Tathagata Aksobhya, sus bodhisattvas, y a sus grandes discípulos. El Buddha, conociendo los
pensamientos de la multitud entera, dijo al Licchavi Vimalakirti: "Noble hijo, esta multitud desea
contemplar el universo Abhirati y al Tathagata Aksobhya – muéstraselos!"
Entonces el Licchavi Vimalakirti pensó: "Sin levantarme de mi diván, tomaré en mi mano
derecha el universo Abhirati y todo su contenido: sus cientos de miles de bodhisattvas; sus
residencias de devas, nagas, yakshas, gandharvas y asuras, enmarcadas por sus montañas
Cakravada; sus ríos, lagos, fuentes, corrientes, océanos y otros cuerpos de agua: su Monte
Sumeru y otras colinas y tipos de montañas; su luna, su sol, y sus estrellas; sus devas, nagas,
yakshas, gandharvas y asuras en sí mismos; su Brahma y su comitiva; sus villas, ciudades,
pueblos, provincias, reinados, hombres, mujeres y casas; sus bodhisattvas; sus discípulos; el
árbol de la iluminación del Tathagata Aksobhya y el Tathagata Aksobhya en sí mismo, sentado
en medio de una asamblea vasta como un océano, enseñando el Dharma. También los lotos
que completan el trabajo de Buddha entre los seres vivos; las tres escaleras enjoyadas que
surgen desde esta tierra hasta el cielo Trayastrimsa, sobre las cuales los dioses de aquel cielo
descienden al mundo a ver, honrar, y servir al Tathagata Aksobhya y a escuchar el Dharma, y
sobre las cuales los hombres de la tierra escalan hacia el cielo Trayastrimsa para visitar a
aquellos dioses. Como un alfarero con su torno, reduciré aquel universo Abhirati, con su
depósito de innumerables virtudes, desde su base acuosa hasta su cielo Akanistha, a un
tamaño minúsculo y, llevándolo suavemente como una guirnalda de flores, lo traeré hasta este
universo Saha y lo mostraré a las multitudes."
Entonces, el Licchavi Vimalakirti entró en una concentración, y practicó un hecho milagroso de
modo que redujo el universo Abhirati a un tamaño mínimo, y lo tomó con su mano derecha, y lo
trajo hasta este universo Saha.
En aquel universo Abhirati, los discípulos, bodhisattvas, y aquellos entre los dioses y hombres
que poseían el super conocimiento del ojo divino, gritaron todos: "Señor, estamos siendo
transportados! Sugata, estamos siendo sacados! Protégenos, Oh Tathagata!".
Pero, para disciplinarlos, el Tathagata Aksobhya les dijo: " Ustedes están siendo llevados por el
bodhisattva Vimalakirti. No es mi asunto".
En cuanto a los otros hombres y dioses, ellos no tenían conciencia de que estaban siendo
llevados a ningún sitio. Si bien el universo Abhirati había sido traído al universo Saha, el
universo Saha no era incrementado ni disminuido; no era ni comprimido ni obstruido. Ni era el
universo Abhirati reducido internamente, y ambos universos aparecían iguales a como habían
sido siempre.
En esto, el Buddha Shakyamuni preguntó a todas las multitudes: "Amigos, contemplen los
esplendores del universo Abhirati, el Tathagata Aksobhya, el arreglo de este campo de
Buddha, y los esplendores de estos discípulos y bodhisattvas!"
Ellos respondieron: "Los vemos, Señor!"
El Buddha dijo: "Aquellos bodhisattvas que desean abrazar semejante campo de Buddha se
entrenan a sí mismos en todas las prácticas de los bodhisattvas del Tathagata Aksobhya."
Mientras Vimalakirti, con su poder milagroso, les mostraba así el universo Abhirati y el
Tathagata Aksobhya, ciento cuarenta mil seres vivos entre los hombres y dioses del universo
Saha concibieron el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi, y todos ellos formaron una
plegaria para ser renacidos en el universo Abhirati. Y el Buddha profetizó que en el futuro todos
serían renacidos en el universo Abhirati.
Y el Licchavi Vimalakirti, habiendo así desarrollado a todos los seres vivos que podían de ese
modo ser desarrollados, regresó el universo Abhirati exactamente a su lugar anterior.
El Señor entonces dijo al venerable Shariputra: "Shariputra, viste ese universo Abhirati, y al
Tathagata Aksobhya?"
Shariputra respondió: " Lo vi, Señor! Puedan todos los seres vivos llegar a vivir en un campo de
Buddha tan espléndido como aquel! Puedan todos los seres vivos llegar a tener poderes
milagrosos exactamente como aquellos del noble Licchavi Vimalakirti! Hemos ganado gran
beneficio de haber visto a un hombre santo tal como él. Hemos ganado un gran beneficio de
haber escuchado tal enseñanza del Dharma, ya sea que el Tathagata en sí mismo exista
realmente o que ya haya obtenido la última liberación. Por lo tanto, no hay necesidad de
mencionar el gran beneficio para aquellos que, habiéndolo oído, creído, confiado en él,
abrazado, recordado, leído, y penetrado hasta su profundidad; y, habiendo encontrado fe en él,
enseñen, reciten, y lo muestren a otros y se apliquen a sí mismos al yoga de la meditación al
llegar su enseñanza. Aquellos seres vivos que comprenden correctamente esta enseñanza del
Dharma obtendrán el tesoro de las joyas del Dharma. Aquellos que estudien correctamente
esta enseñanza del Dharma se volverán compañeros del Tathagata. Aquellos que honren y
sirvan a los adeptos de esta doctrina serán los verdaderos protectores del Dharma. Aquellos
que escriban, enseñen y veneren esta enseñanza del Dharma serán visitados por el Tathagata
en sus hogares. Aquellos que obtengan placer en esta enseñanza del Dharma abrazarán todos
los méritos. Aquellos que lo enseñen a otros, aunque sea una estrofa de cuatro líneas, o una
simple frase de resumen de esta enseñanza del Dharma, harán el gran sacrificio Dharma. Y
aquellos que dediquen a esta enseñanza del Dharma su tolerancia, su celo, su inteligencia, su
discernimiento, su visión, y sus aspiraciones, se volverán así sujetos de la profecía de futura
Buddheidad!"
*
Epílogo
Antecedentes y Transmisión del Santo Dharma

Entonces Sakra, el príncipe de los dioses, dijo al Buddha: " Señor, anteriormente he escuchado
del Tathagata y de Manjusri, el príncipe coronado de sabiduría, varios cientos de miles de
enseñanzas del Dharma, pero nunca antes he escuchado una enseñanza del Dharma tan
notable como esta instrucción de la entrada en el método de transformaciones inconcebibles.
Señor, aquellos seres vivos que, habiendo escuchado esta enseñanza del Dharma, la aceptan,
la recuerdan, la leen, y la comprenden, serán, sin duda, verdaderos recipientes del Dharma; no
hay necesidad de mencionar a aquellos que se aplican a sí mismos al yoga de la meditación.
Ellos cortarán toda posibilidad de vidas infelices, abrirán su camino a todas las vidas
afortunadas, siempre serán cuidados por todos los Buddhas, siempre vencerán a todos los
adversarios, y siempre conquistarán a todos los demonios. Ellos practicarán el camino de los
bodhisattvas, tomarán sus lugares en el asiento de la iluminación, y habrán entrado
verdaderamente al dominio de los Tathagatas. Señor, los nobles hijos e hijas que enseñarán y
practicarán esta exposición del Dharma serán honrados y servidos por me y por mis
seguidores. A las villas, ciudades, pueblos, estados, reinos, y capitales donde esta enseñanza
del Dharma será aplicada, enseñada y demostrada, yo y mis seguidores iremos a escuchar el
Dharma. Inspiraré a los incrédulos con fe, y garantizaré mi ayuda y protección a aquellos que
creen y contemplan el Dharma".
Al oír esas palabras, el Buddha dijo a Sakra, el príncipe de los dioses: "Excelente! Excelente,
príncipe de los dioses! El Tathagata se regocija en tus buenas palabras. Príncipe de los dioses,
la iluminación de los Buddha del pasado, presente y futuro es expresada en este discurso de
Dharma. Por lo tanto, príncipe de los dioses, cuando los nobles hijos e hijas lo acepten, lo
repitan, lo comprendan profundamente, lo escriban completamente, y, haciéndolo un libro lo
honren, aquellos hijos e hijas rendirán por lo tanto homenaje a los Buddhas del pasado,
presente y futuro. Supongamos, príncipe de los dioses, que este universo galáctico de billones
de mundos estuviera tan lleno de Tathagatas como está cubierto con bosques de caña de
azúcar, con arbustos de rosas, con matorrales de bambú, con hierbas, y con flores, y aquel
noble hijo o hija fueran a honrarlos, reverenciarlos, respetarlos y adorarlos, ofreciéndoles toda
clase de comodidades y ofrendas durante un eon o más de un eon. Y supongamos que, estos
Tathagatas habiendo entrado en la liberación última, él o ella honren a cada uno de ellos por
medio de la veneración de sus cuerpos preservados en una stupa memorial hecha de piedras
preciosas, cada una tan grande como un mundo con cuatro grandes continentes, levantándose
tan alta como el mundo de Brahma, adornada con parasoles, banderas, estandartes y
lámparas. Y supongamos finalmente que, habiendo erigido todas esas stupas para los
Tathagatas, él o ella fuera a dedicar un eon o mas ofrendándoles flores, perfumes, banderas y
estandartes, mientras tocan tambores y música. Habiendo hecho esto, qué crees, príncipe de
los dioses? Recibirían esos nobles hijos e hijas mucho mérito como consecuencia de tales
actividades?"
Sakra, el príncipe de los dioses, respondió: " Muchos méritos, Señor! Muchos méritos, Oh
Sugata! Si uno fuera a dedicar cientos de miles de millones de eones, sería imposible de medir
el límite de la masa de mérito que aquel noble hijo o hija reuniría de ese modo!"
El Buddha dijo: "Ten fe, príncipe de los dioses, y comprende esto: quienquiera que acepte esta
exposición del Dharma llamada "Instrucción en la liberación inconcebible", la recite, y la
comprenda profundamente, él o ella reunirán méritos aun más grandes que aquellos que
practican los actos mencionados. Por qué así? Porque, príncipe de los dioses, la iluminación de
los Buddhas surge del Dharma, y uno los honra por la veneración al Dharma, y no por la
veneración material. Así esto es enseñado, príncipe de los dioses, y así debes comprenderlo".
El Buddha dijo además a Sakra, el príncipe de los dioses: "Una vez, príncipe de los dioses,
hace mucho tiempo, mucho antes que eones más numerosos que los innumerables, inmensos,
inconmensurables, inconcebibles, y aun antes de eso, el Tathagata llamado Bhaisajyaraja
apareció en el mundo: un santo, perfecta y plenamente iluminado, dotado con el conocimiento
y conducta, un bendito, conocedor del mundo, incomparable conocedor delos hombres que
necesitan ser civilizados, maestro de hombre y dioses, un Señor, un Buddha. Él apareció en un
eon llamado Vicarana en el universo llamado Mahavyuha. La duración de la vida de este
Tathagata Bhaisajyaraja, perfectamente y completamente iluminado, fue de veinte eones
cortos. Su comitiva de discípulos era de treinta y seis millones de billones, y su comitiva de
bodhisattvas era de doce millones de billones. En esa misma era, príncipe de los dioses, hubo
un monarca universal llamado Ratnacchattra, quien reinaba sobre los cuatro continentes y
poseía siete joyas preciosas. Él tenía mil hijos heroicos, poderosos, fuertes, y capaces de
conquistar enemigos armados. Este Rey Ratnacchattra honró al Tathagata Bhaisajyaraja y su
comitiva con muchas ofrendas excelentes durante cinco eones cortos. Al fin de ese tiempo, el
Rey Ratnacchattra dijo a sus hijos: "Reconociendo que durante mi reinado yo he adorado al
Tathagata, a su turno ustedes también deberían adorarlo". Los mil príncipes dieron su
consentimiento, obedeciendo a su padre el rey, y todos juntos, durante otros cinco eones
cortos, honraron al Tathagata Bhaisajyaraja con toda clase de ofrendas excelentes. Entre ellos,
había un príncipe con el nombre de Candracchattra, quien se retiró en soledad y pensó para sí:
" no hay otro modo de adoración, aun mejor y más noble que este?" Entonces, por el poder
supernatural del Buddha Bhaisajyaraja, los dioses le hablaron desde los cielos: "Buen hombre,
la adoración suprema es la adoración del Dharma".
Candracchatra les preguntó: " Qué es esta adoración del Dharma?"
Los dioses respondieron: "Buen hombre, ve al Tathagata Bhaisajyaraja, pregúntale acerca de
la adoración del Dharma, y él te lo explicará plenamente."
Entonces, el príncipe Candracchatra fue al Señor Bhaisajyaraja, el santo, el Tathagata, el
insuperablemente, perfectamente iluminado, y habiéndose aproximado a él, e inclinado ante
sus pies, lo rodeó por la derecha tres veces, y se retiró a un lado. Él luego preguntó: "Señor, he
oído acerca de la "adoración-Dharma", que sobrepasa toda otra adoración. Qué es esta
adoración Dharma?"
El Tathagta Bhaisajyaraja dijo: "Noble hijo, la adoración Dharma es aquella adoración rendida a
los discursos enseñados por el Tathagata. Estos discursos son hondos y profundos en
iluminación. Ellos no se conforman a lo mundano y son difíciles de comprender, difíciles de ver
y difíciles de realizar. Son sutiles, precisos, y definitivamente incomprensibles. Como
Escrituras, ellos son colectados en el canon de los bodhisattvas, estampados con la insignia
del rey de las encantaciones y enseñanzas. Ellos revelan la irreversible rueda del Dharma,
surgiendo de las seis trascendencias, limpios de toda falsa noción. Ellos son dotados con todas
las ayudas de la iluminación y corporizan los siete factores de iluminación. Ellos introducen a
los seres vivos a la gran compasión y les enseñan el gran amor. Ellos eliminan todas las
convicciones de los Maras y ellos manifiestan la relatividad. Ellos contienen el mensaje de la
carencia de yo, de la carencia de yo, la carencia de persona, la carencia de ser vivo, la
carencia de tiempo de vida; la vaciedad, la carencia de signo, la carencia de deseo, la no
realización, no producción y no ocurrencia. Ellos hacen posible el obtenimiento del asiento de
la iluminación y ponen en movimiento la rueda del Dharma. Ellos son aprobados y elogiados
por los jefes de los dioses, nagas, yakshas, gandharvas, asuras, garudas, kimnaras, y
mahoragas. Ellos preservan intacta la herencia del santo Dharma, contienen el tesoro del
Dharma, y representan la cima de la adoración Dharma. Ellos son contemplados por todos los
seres santos y enseñan todas las prácticas de los bodhisattvas. Ellos inducen la comprensión
sin error del Dharma en su último sentido. Ellos certifican que todas las cosas son
impermanentes, miserables, sin yo y apacibles, y así epitomizan el Dharma. Ellos causan el
abandono de la avaricia, la inmoralidad, la malicia, la pereza, la desmemoria, la estupidez, y los
celos así como las malas convicciones, la adherencia a los objetos, y toda oposición. Ellos son
elogiados por todos los Budas. Ellos son las medicinas para las tendencias de la vida
mundana, y manifiestan auténticamente la gran felicidad de a liberación. Enseñar
correctamente, contemplar, investigar, y comprender tales escrituras, así incorporando a la
propia vida de uno el santo Dharma –esto es la adoración Dharma. Más aun, noble hijo, la
adoración Dharma consiste en determinar el Dharma de acuerdo con el Dharma; aplicar el
Dharma de acuerdo al Dharma; estar en armonía con la relatividad; estar libre de las
convicciones extremistas; obtener la tolerancia del definitivo no nacimiento y no ocurrencia de
todas las cosas; realizar la carencia de yo y la carencia de seres vivos; abstenerse de la lucha
acerca de causas y condiciones, sin riña ni disputa; no ser posesivo; estar libre de egoísmo;
confiar en el significado y no en la expresión literal; confiar en la gnosis y no en la conciencia;
confiar en las enseñanzas últimas definitivas en significado y no insistir en las enseñanzas
superficiales interpretables en significado; confiar en la realidad y no insistir en opiniones
derivadas de autoridades personales; realizar correctamente la realidad del Buddha; realizar la
última ausencia de cualquier conciencia fundamental; y vencer el hábito de aferrarse a un suelo
último. Finalmente, obtener paz mediante detener todo desde la ignorancia hasta la vejez,
muerte, tristeza, lamentación, miseria, ansiedad, y problema, y comprender que los seres vivos
no conocen fin para sus puntos de vista concernientes a esos doce eslabones de la originación
dependiente; entonces, noble hijo, cuando tú no te aferras a ningún punto de vista en absoluto,
eso es llamado la adoración Dharma insuperable."
Príncipe de los dioses, cuando el príncipe Candracchatra escuchó esta definición de la
adoración Dharma del Tathagata Bhaisajyaraja, él obtuvo la tolerancia conformativa del último
no nacimiento; y, tomando sus mantos y ornamentos, él los ofreció al Buddha Bhaisajyaraja,
diciendo: "Cuando el Tathagata esté en la última liberación, deseo defender este santo
Dharma, protegerlo, y venerarlo. Pueda el Tathagata otorgarme su bendición supenatural, que
yo pueda ser capaz de conquistar a Mara y a todos los adversarios e incorporar en todas mis
vidas el santo Dharma de Buddha!"
El Tathagata Bhaisajyaraja, conociendo la gran resolución de Candracchatra, le profetizó que él
sería, en un tiempo posterior, en el futuro, el protector, guardián, y defensor de la ciudad del
santo Dharma. Entonces, príncipe de los dioses, el príncipe Candracchatra, por su gran fe en el
Tathagata, dejó la vida de hogar para entrar en la vida sin hogar de un monje, y habiendo
hecho esto, vivió haciendo grandes esfuerzos hacia el obtenimiento de virtud. Habiendo hecho
gran esfuerzo y siendo bien establecido en virtud, él pronto produjo los cinco super
conocimientos, comprendió las encantaciones, y obtuvo la elocuencia invencible. Cuando el
Tathagata Bhaisajyaraja obtuvo la liberación última, Candracchattra, sobre la fuerza de sus
super conocimientos y por el poder de sus encantaciones, hizo girar la rueda del Dharma
exactamente como el Tathagata Bhaisajyaraja había hecho y continuó haciéndolo así durante
diez eones cortos. Príncipe de los dioses, mientras el monje Candracchattra estaba
ejercitándose a sí mismo así para proteger el santo Dharma, miles de millones de seres vivos
alcanzaron el estado de irreversibilidad en el camino de la insuperable, perfecta iluminación,
catorce billones de seres vivos fueron disciplinados en los vehículos de los discípulos y los
sabios solitarios, e innumerables seres vivos tomaron renacimiento en los reinos humanos y
celestiales. Tal vez, príncipe de los dioses, te estarás preguntando o experimentando alguna
duda sobre si, en aquel tiempo anterior, el Rey Ratnacchattra era o no alguien más que el
actual Tathagata Ratnarcis. No debes imaginar eso, porque el presente Tathagata Ratnarcis
fue en ese tiempo, en aquella época, el monarca universal Ratnacchattra. En cuanto a los mil
hijos del Rey Ratnacchattra, ellos son ahora los mil bodhisattvas del presente bendito eon,
durante el curso del cual mil Budas aparecerán en el mundo. Entre ellos, Krakucchanda y otros
ya han nacido, y aquellos restantes aun nacerán, desde Kakutsunda hasta el Tathagata Roca,
quien será el último en nacer. Quizás, príncipe de los dioses, estás preguntándote si, en
aquella vida, en aquel tiempo, el Príncipe Candracchattra que contempló el Santo Dharma del
Señor Tathagata Bhaisajyaraja no era otro que yo mismo. Pero no debes imaginar eso, porque
yo fui, en aquella vida, en aquel tiempo, el Príncipe Candracchattra. Así es necesario saber,
príncipe de los dioses, que entre todas las adoraciones rendidas al Tathagata, la adoración
Dharma es verdaderamente la mejor. Sí, es buena, eminente, excelente, perfecta, suprema, e
insuperable. Y por consiguiente, príncipe de los dioses, no me veneres con objetos materiales
sino venérame con la veneración Dharma! No me honres con objetos materiales sino hónrame
por honor al Dharma!"
Entonces el Señor Shakyamuni dijo al bodhisattva Maitreya, el gran héroe espiritual: "Te
transmito, Maitreya, esta iluminación insuperable, perfecta, que he obtenido sólo después de
innumerables millones de billones de eones, para que, en un tiempo posterior, durante una vida
posterior, una enseñanza similar del Dharma, protegida por tu poder supernatural, se esparcirá
en el mundo y no desaparecerá. Por qué? Maitreya, en el futuro habrá noble hijos e hijas,
devas, nagas, yakshas, gandharvas, y asuras, quienes, habiendo plantado las raíces de virtud,
producirán el espíritu de Anuttara Samyak Sambodhi. Si ellos no escuchan esta enseñanza del
Dharma, ellos ciertamente perderán incontables ventajas e incluso perecerán. Pero si ellos
escuchan tal enseñanza, ellos se regocijarán, creerán, y la aceptarán sobre las coronas de sus
cabezas. Por lo tanto, para proteger a aquellos futuros nobles hijos e hijas, debes esparcir una
enseñanza como esta! Maitreya, hay dos gestos de los bodhisattvas. Cuáles son? El primero
es creer en toda clase de frases y palabras, y el segundo gesto es penetrar exactamente el
profundo principio del Dharma sin tener miedo. Tales son los dos gestos de los bodhisattvas.
Maitreya, debe saberse que los bodhisattvas quienes creen en toda clase de palabras y frases,
y se aplican ellos mismos en concordancia, son principiantes y no son experimentados en la
práctica religiosa. Pero los bodhisattvas que leen, escuchan, creen y enseñan esta profunda
enseñanza con sus expresiones impecables reconciliando dicotomías y sus análisis de estados
de desarrollo, esos son veteranos en la práctica religiosa. Maitreya, hay dos razones por las
que los bodhisattvas principiantes se lastiman a sí mismos y no se concentran en el Dharma
profundo. Cuáles son? Escuchando esta profunda enseñanza nunca antes oída, ellos están
aterrorizados y dudosos, no se regocijan, y la rechazan, pensando "de dónde viene esta
enseñanza nunca antes oída". Ellos entonces contemplan a otros nobles hijos aceptando,
volviéndose recipientes de, y enseñando esta profunda enseñanza, y ellos no la escuchan, no
son amistosos hacia ellos, no la respetan, y no la honran, y eventualmente ellos van tan lejos
como para criticarlas. Estas son las dos razones por las que los bodhisattvas principiantes se
lastiman a sí mismos y no penetran el Dharma profundo. Hay dos razones por las que los
bodhisattvas quienes aspiran al Dharma profundo se lastiman a sí mismos y no obtienen la
tolerancia del último no nacimiento de las cosas. Cuáles son estas dos? Estos bodhisattvas
desprecian y reprochan a los bodhisattvas principiantes, quienes no han estado practicando
durante largo tiempo, y ellos no los inician o los instruyen en la enseñanza profunda. No
habiendo gran respeto por esta enseñanza profunda, ellos no son cuidadosos acerca de sus
reglas. Ellos ayudan a los seres vivos por medio de regalos materiales y no los ayudan por
medio del regalo del Dharma. Tales, Maitreya, son las dos razones por las que los bodhisattvas
quienes aspiran al Dharma profundo se lastiman a sí mismos y no obtendrán rápidamente la
tolerancia del último no nacimiento de todas las cosas".
Habiendo sido así enseñando, el bodhisattva Maitreya dijo al Buddha: "Señor, las hermosas
enseñanzas del Tathagata son maravillosas y verdaderamente excelentes. Señor, desde este
momento en adelante, evitaré todos esos errores y defenderé y contemplaré este logro de
Anuttara Samyak Sambodhi por el Tathagata durante innumerables cientos de miles de
millones de billones de eones! En el futuro, colocaré en las manos de nobles hijos y nobles
hijas quienes son merecedores recipientes del santo Dharma esta profunda enseñanza.
Instilaré en ellos el poder de la memoria con la cual ellos pueden, habiendo creído en esta
enseñanza, la retengan, la reciten, penetren sus profundidades, la enseñen, la propaguen, la
escriban y la proclamen extensivamente a otros. Así los instruiré, Señor, y así puede saberse
que en aquel tiempo futuro aquellos que crean en esta enseñanza y que entren profundamente
en ella serán sostenidos por las bendiciones supernaturales del bodhisattva Maitreya".
En esto el Buddha dio su aprobación al bodhisattva Maitreya: "Excelente! Excelente! Tu palabra
es bien dada! El Tathagata se regocija y recomienda tu buena promesa".
Entonces todos los bodhisattvas dijeron juntos en una voz: "Señor, nosotros también, después
de la última liberación del Tathagata, vendremos desde nuestros varios campos de Buddha a
esparcir ampliamente y lejos esta iluminación del Buddha perfecto, el Tathagata. Puedan todos
los nobles hijos e hijas creer en esto!"
Entonces los cuatro Maharajas, los grandes reyes de los puntos cardinales, dijeron al Buddha:
"Señor, en todas las ciudades, villas, pueblos, reinados, y palacios, dondequiera que este
discurso del Dharma será practicado, contemplado, y correctamente enseñado, nosotros, los
cuatro grandes reyes, iremos allí con nuestros ejércitos, nuestros jóvenes guerreros, y nuestras
comitivas, a escuchar el Dharma. Y protegeremos a los maestros de este Dharma en un radio
de una legua para que ninguno que infrinja heridas o perturbación contra esos maestros tenga
ninguna oportunidad de herirlos".
Entonces el Buddha dijo al venerable Ananda: "Recibe esto, Ananda, esta expresión de las
enseñanzas del Dharma. Recuérdala y enséñala ampliamente y correctamente a otros.
Ananda respondió: "He memorizado, Señor, esta expresión de las enseñanzas del Dharma.
Pero cuál es el nombre de esta enseñanza, y cómo debería recordarla?"
El Buddha dijo: "Ananda, esta exposición del Dharma es llamada "Las enseñanzas de
Vimalakirti" o "La reconciliación de las dicotomías" o incluso "Sección de la Liberación
Inconcebible". Recuérdala así!"
Así habló el Buddha. Y el Licchavi Vimalakirti, el príncipe coronado Manjusri, el venerable
Ananda, los bodhisattavas, los grandes discípulos, la multitud entera, y la totalidad del universo
con sus dioses, hombres, asuras y gandharvas, se regocijaron extremadamente. Todos
elogiaron estas declaraciones del Señor.